Capitulo 36;

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Ya habíamos llegado, ¿ que si estoy nervioso?, pues la verdad si, y no se si pueda conseguir decirle aquellas simples palabras.

Nos bajamos del auto, y me relaje al ver la expresión de felicidad de Annie al ver la playa. Al menos se que he escogido bien el lugar.

Saco la manta de color burdeo del asiento trasero y al tener todo listo, agarro la mano de mi chica y nos derigimos a la calida arena. Siento que todo es perfecto, me gustaría que el tiempo se detuviera exactamente ahora y poder apreciar todo con cada mínimo detalle. El sol esta en su punto mas hermoso, a minutos de esconderse en el horizonte, su reflejo en el mar, el cielo de aquel color anaranjado, pero la verdad es que a pesar del aquel bellísimo paisaje frente a mi ojos nada puede superar esos cristalinos y grandes ojos grises que veo cada día.

Estiro la manta en la arena y le indico a Annie que se acueste.

-Esto es hermoso -dijo casi en un susurro. - es perfecto.

-Y solo somos tu y yo - me senté a su lado tranquilamente, paso mi brazo por sobre sus hombros y la apego mas a mi. La brisa del mar choca contra mi rostro. Esta bien, es ahora o nunca. Debo hacerlo. - Ann.....

-¿Si? - gira su cabeza hacia mi y al tener sus ojos incrustados a los mios, pierdo las fuerzas.

-Ems..... Bueno - me rasco la nuca. Oh dios, esto no puede ser. - ¿me esperas un poco?

-Este bien - rueda los ojos y niega con la cabeza.

Me levanto y rápidamente corro en dirección al estacionamiento, allí me espera Megan con una sonrisa, y a su lado el pequeño campeón.

-¿Como vas? - pregunta mi hermana entusiasmada.

-Por el momento aun no las cago - río.

-Vale, esta todo listo, he puesto los parlantes en la arena, solo tienes que presionar la canción y ya está - me entrega el ramo de flores y la diminuta cajita color roja envuelta en un una cinta morada.

-Suerte tío camarón - me agacho para abrazarlo y aquel pequeño que me derrite el corazón con cada gesto, deposita un beso en mi mejilla.

-Nos vemos - me despido de ambos.

Vuelvo a correr rápidamente hasta donde se encuentra mi castaña, y la veo a los lejos acariciando a un perro de color negro. Es que simplemente debo admitir que estoy enamorado, por que no es normal que esta sonrisa de idiota aparezca cada vez que la veo o con sólo pensar en ella. Estoy jodido.
Me acerco a ella y el corazón me late como si estuviera a punto de estallar, saco el celular de mi bolsillo y coloco la canción "All i want" de kodaline, una de sus bandas favoritas, al instante la melodía comienza a escucharse por casi todo el sector y la cara de desconcierto de Annie, logra hacerme reír. No se esperaba eso. Comienza a mirar por todos lados aun acariciando al pequeño perro hasta que su mirada se cruza con la mía, y al procesar lo que esta ocurriendo sus mejillas comienzan a colocarse de un color levemente rojo, sonrió. No puedo evitar no hacerlo. Y es que talvez debo de verme realmente estúpido con un ramo de flores en la arena. Sigo caminando y al estar frente a ella me arrodilló y dejo el ramo de flores a un lado, las piernas me tiemblan y espero a que la puesta de sol llegue, la cual no tarda. Suspiro. La cara de asombro de Annie me pone aun mas nervioso. Ya no se que pensar.
Abro la diminuta caja y dejo ver aquel papelillo de color gris que esta en el interior, y al lado de aquel, un collar plateado.

-Bueno - muerdo mi labio inferior - se que esto debe ser una completa ridiculez, pero aquí voy - vuelvo a suspirar. La musica de fondo nos envuelve y aquella puesta de sol nos rodea, solo somos ella y yo. Y este es nuestro momento. Solo nuestro - Ann..... ¿Quieres ser.... Mi... novia? - tartamudeo y cierro los ojos, extiendo la pequeña cajita hacia ella, esperando a que la acepte.

-Dios, ¿es una broma? - abro los ojos y la observó, esta llorando. - ¡Claro que si! - se lanza a mis brazos y siento que soy la persona mas afortunada en todo el mundo.

Me ha dicho que si. ¡Joder me ha dicho que si!

La abrazo con todas mis fuerzas y me levanto junto con ella, busco su rostro a tientas y la beso, la beso con desesperación y necesidad. Necesito saber que todo esto es real y que de verdad esta sucediendo. Que ahora definitivamente he dado aquel paso que cambiara todo, por ella lo hice, e incluso haría mas, lo que sea para verla feliz y lo que sea para tenerla conmigo.

-te amo -digo entre besos. No puedo estar mas feliz.

-y yo a ti - sonrie.

Nos separamos por un momento y le entrego la caja. La observa y sus ojos vuelven a ponerse llorosos. Saca el collar de su interior y me lo extiende para que se lo coloque, y así lo hago, lo tomo entre mi manos y se lo coloco delicadamente, aquella pequeña medallita que tiene impregnado nuestras iniciales brilla gracias a los rayos del sol. Deposito un tierno beso en su cuello y espero a que lea la nota.

Sus delgadas manos sostienen el papel y puedo observar como sus labios se mueven al leer cada palabra escrita.

-Estaremos juntos, a pesar de todo -dije en voz alta, recordando aquello que escribí en la nota. - Promesa.

Annie levanta su mirada y sonríe levemente.

-¿Nuestra promesa? - susurra.

-Nuestra promesa, nena.

Y vuelvo a besarla, por que no existe nada mas que desee en este mundo que a ella.

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Corto pero preciso, ¿que les pareció?
Bueno, espero les guste. Iré de apoco, con capítulos cortos, para alargar un poco mas la historia, ya que aun no encuentro un final definitivo. Espero actualizar pronto.un beso.

No soy tu juguete / Cancelada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora