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Luego de lo que pareció horas de estar dentro de la tienda, pero en realidad fueron minutos, le pedí a Marinette que se quedara dentro mientras yo debía enfrentar a la tribu. Jamás me había gustado ser parte de esta tribu, mucho menos que ellos me consideren su líder, pues...por favor, ni siquiera pertenezco aquí. Pero ahora agradezco haber sido elegido luego de haber salvado al anterior líder, de lo contrario Marinette estaría perdida.

Salí viendo los rostros felices de aquellos que me habían acogido como uno más de ellos pese a las rencillas iniciales. Algunas veces me siento mal de fingir que me agradan, que entiendo y estoy de acuerdo con sus tradiciones, pero no pertenecía aquí, no me acostumbraba a estar en este lugar pese a los años que han pasado. Dos años desde que salve a su líder, un año desde que ese puesto recayó en mí, no lo merecía, no cuando fue Fu quien lo arrojó al peligro en primer lugar

-Debes mezclarte Adrien- me había dicho después de golpear al “líder”- no podemos seguir siendo parias en esta sociedad

-Pero Fu, esto es extremo...no quiero estar con ellos- dije, aquella tribu era la menos civilizada, saqueaban, mataban, tomaban lo que querían. Fu me explicó que ellos habían perdido su rumbo hace años, divisiones internas de un pueblo más grande generaron que fueran como son ahora - no te voy a matar para...

-Tendrás que hacerlo, te he enseñado bien y has aprendido a diferenciar entre pueblos. Adrien, si quieres regresar te recomiendo que te mantengas en este lugar, es obvio que solo aquí encontraremos respuestas y ellos son el pueblo más cercano, es mejor que te vean como aliado que como enemigo- Fu tenía razón, pero no podía matarlo, no cuando él me había ayudado desde el primer momento en que llegue a este sitio, me había enseñado todo lo que sabía y me había explicado cada una de sus hipótesis acerca de cómo llegamos aquí en primer lugar

Cuando despertó el líder del golpe proporcionado por Fu, yo estaba cubierto de Sangre, su sangre luego de una pelea a la cual me obligo a entrar, pese a ser quien me había ayudado y protegido como un hijo también era la persona que había perdido el juicio luego de 40 años atrapado en este lugar. Su necesidad de protegerme lo llevó a atacarme, obligandome a defenderme y luchar por mi vida. Mis sentidos se pusieron en alerta cuando tomo una roca con la que planeaba golpearme, la misma que había utilizado para golpear al líder, yo tome una estaca la cual clave en su pecho observando una sonrisa de orgullo en su rostro...hice exactamente lo que quería que hiciera

Horas más tarde el líder despertó, su mirada se dirigió al cuerpo sin vida de Fu para luego fijar su vista en mi

-"¿Me matarás?"- preguntó en su idioma, el cual logre entender gracias a Fu durante los últimos tres años. Su expresión era fría, como si no le importase y yo lo mire de la misma manera, no me debía dejar intimidar por aquel hombre, no cuando tenía una misión

-Ya lo habría hecho de haberlo querido ¿no lo crees?- respondí en Francés

-Hablas el idioma antiguo- afirmó. Me sorprendí al escucharlo, pero no deje que mi rostro lo demostrara, era la tercera persona que lo hablaba desde que llegue

-Tú también- dije indiferente

-¿Cuál es tu nombre?

-Aspik- ese era el nombre que Fu me recomendó usar en aquel lugar. Su mirada inquisitiva me dio a entender que no estaba conforme con mi respuesta

-Desde ahora serás Chat Noir- ante la confusión que se mostraba en mi rostro- y seras parte de mi gente

-¿Por qué?- pregunte mientras aún mantenía la indiferencia ante su propuesta, aunque igual me sentía curioso ante lo fácil que había sido eso

-Has acabado con el viejo, estoy en deuda- respondió de manera simple

A Fu siempre lo vieron como una amenaza, y eso lo sabía, razón para obligarme a hacer lo que hice. El  nombre del líder era Anark, de inmediato me trató como uno más de ellos, me explicó que todos quienes estaban destinados a dirigir hablaban lenguas antiguas y tenía la esperanza de que ayudará a su hijo a aprender esta pues es quien debía asumir el liderazgo luego de su muerte. Viperion jamás aprendió y Anark me nombró como nuevo líder de su gente.

Ahora, luego de dos años, estaba frente a ellos realizando el último paso para convertirme en su líder, estaba aceptando a una mujer como esposa, concubina, pareja o el nombre que le dieran a la mujer que se convertiría en la madre de mis hijos...claro que no obligaría a Marinette a eso porque esperaba escapar mucho antes de que empezaran a exigir un descendiente.

Encontrar a una chica que conocía luego de años estar en ese lugar me trajo nuevas esperanzas las cuales había comenzado a perder a medida que pasaba el tiempo. Cuando la vi supe que no la podía dejar allí, no cuando estaba lastimada, además de que si yo no la hubiera visto, eventualmente alguien más de mi tribu u otra la habría encontrado y como mencione, ellos toman lo que quieren, a menos que ya esté tomada por alguien más. Debía ceder a las exigencias de mi gente, hace meses que estaban insistiendo en que eligiera a una mujer pero no quería, eso hubiese significado aceptar el hecho de que me encuentro atrapado en este lugar y no quería eso… pero al ver a Marinette una necesidad de protección surgió. 

La conocía, siempre sentí que era como una hermana y si bien nos conocimos poco antes de que yo terminara en este lugar aún recordaba su amabilidad y lo buena persona que es, necesitaba protegerla y si la aceptaba como esposa ambos saldríamos ganando, ella estaría protegida por mi posición y de paso podríamos buscar una forma de salir de aquí.

Luego de que la ceremonia de aceptación del líder terminó, fui cubierto por pintura que representaba mi rango ante otros dentro de la tribu, minutos después exigí que se dispersaran, que volvieran a sus actividades normales o en otras palabras, que me dejaran en paz...supe exactamente lo que pasó por sus cabezas, me molestaban esas sonrisas que siempre tenían cuando alguien "tomaba" una esposa, me molestaba saber que sometían a las mujeres mientras que ellas no tenían otra elección, era eso o morir...una razón más para proteger a Marinette... Me adentré donde estaba Marinette... Esta llorando

-Tranquila- dije acercándome- todo estará bien...estarás a salvo

-¿Donde estoy?- susurro con una frágil voz

-No estoy del todo seguro- respondí con la verdad, a pesar de los cinco años que había pasado aún no sabía en donde me encontraba, pero una de las hipótesis de Fu era una de las más acertadas y que explicaba bastante lo que observamos y encontranos- pero hay una alta posibilidad de que estemos en el futuro

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Se que el capítulo anterior y este no fueron los mejores, pero me costó pensar como explicar esta parte de la historia...


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