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Mi padre vendió la compañía, pensé mirando a Marinette, de todo lo que me dijo creo que eso fue lo que más me impactó, después era el hecho de que no era diseñadora…

-¿La vendió para buscarme?

-Para seguir la investigación

-.¿Investigación?- no entendía…¿qué investigacion?

-Adrien, desapareciste - dijo mirándome de una forma exasperada-  te declararon muerto como hace...no lo se...¿ocho años?

-Imposible- respondí, aquello no me calzaba

-¿Por qué? jamás te encontraron además supongo que no imaginaron que estuvieras en el “futuro”- lo ultimo lo dijo haciendo un gesto de comillas...ok, aún no me cree esa parte pero...

-No digo que sea imposible que hayan considerado que este muerto, en eso tienes razón, supongo que jamás se han detenido a pensar que viaje en el tiempo- dije con algo de gracia para alivianar la tensión, no funcionó- es imposible que haya pasado hace 8 años, estoy aquí desde hace 5 años Marinette

-No- rodó los ojos,  debo decir que me encantaba ese gesto, siempre me pareció divertido- desapareciste hace 10

-No-

-Adrien, si

-Pero ¿cómo es aquello posible...

-Cómo es esto posible…- señaló a su alrededor, vi que sus hombros se relajaron- no tratemos en buscar explicaciones ahora, creo que ya tenemos suficiente- iba aceptar eso, lo importante no es dónde exactamente estamos, lo importante es salir

Nos quedamos en silencio por un momento, Marinette aún se encontraba recostada y algunas veces hacía gestos de dolor

-Lamento haberte mordido- me disculpe por ello

-En realidad, es mi espalda…- explicó, me había olvidado de que la tire sin consideración sobre lo que yo llamo “cama”- ¿Me podría explicar porque lo hiciste?

-¿No tienes alguna idea del porque?- ante la negación procedí a explicar- Ante sus ojos serás mi esposa- respondí, esperando su reacción

-¿Que?- abrió los ojos mirándome 

-Soy su líder o jefe...como prefieras llamarlo y siendo honesto contigo necesitaba una esposa

-No pienso ser tu esposa yo ya….

-Y no es necesario que lo seas- me apresure a aclarar- no cuando estamos solo los dos, pero frente a ellos...

-¿Por qué?

-Es la única manera de protegerte, como te dije antes, tienes suerte de que yo te haya encontrado, si hubiera sido otro...bueno, te habría atacado realmente y…- no quería pensar en eso, había visto antes cómo trataban a cualquiera que considerasen como intruso, no era indiferente en cómo trataban a sus mujeres, las marcas de abuso eran evidentes y si bien en este último año he tratado de cambiar eso, no he logrado conseguir mucho, no cuando aún era observado por el hijo de Anark, debía parecer uno de ellos por lo que hacer cualquier cosa que difiera de su comportamiento normal era difícil...muy difícil, pero no imposible...no quería pensar en que Marinette habría sufrido el mismo destino de no...ni siquiera quería pensarlo- lo importante es que eso no paso- finalice, vi sus ojos aterrados 

-Sentí unas manos- Viperion, pensé al instante- me toco el vientre y...

-Es Viperion, el segundo al mando...creyó que te traje para él- el hijo de Anark era el principal obstáculo en cualquier cosa que hiciera, cuestionaba todo y cada una de mis decisiones, y no lo culpaba, después de todo le quite el mando que por derecho le pertenecía, desde ese momento me ha exigido y presionado por demostrar ser el líder que su padre decía que era, pero yo me nege a varias de sus estupideces, una de ellas era tomar a una mujer… “debes tener descendencia”me dijo, “después de todo, no creo que quieras que tu linaje empiece y termine contigo” claro que quería eso, mi intención era escapar...por supuesto que mi respuesta fue no estar interesado aun en procrear, por lo que supongo que al verme con Marinette supuso que, como en otras ocasiones, habría traído a la chica dejándola a la suerte…odiaba hacer eso, pero como mencione, debía intentar ser parte de ellos- pensaba hablar contigo antes pero, con él aquí tuve que dejar en claro que tu eres mía

-¿Soy tuya?- era mia, con una simple palabra deje en claro que Marinette seria mia, pero Viperion, como siempre, exigió que realizará el maldito ritual de inmediato

-Frente a ellos, si

-Adrien, ¿te estás escuchando?

-Se como suena- lo sabía, claro que lo sabía con cada maldito día que pasaba sabía en qué me están convirtiendo poco a poco- y a mi tampoco me gusta, pero prefiero dejar las cosas en claro…

Espere que ella hablara, pero quedó callada, sopesando mis palabras. En ese momento comencé a observar. Estaba realmente cambiada, seguía siendo hermosa, pero en ese momento su cara estaba algo sucia, y tenía unas marcadas ojeras, observe cómo su rostro parecía mostrar más años de los...

-¿Entonces no tienes 22?- pregunte a partir del pequeño detalle del transcurso de tiempo, de haber pasado cinco años, ella tendría la edad en la cual yo desaparecí

-Tengo 27…-respondió- ¿en serio acabas de preguntar mi edad?- su mirada era de incredulidad pero al parecer estaba algo divertida por la pregunta la cual en realidad no venía al caso

-Bueno…¿si?- dije inseguro- vaya, creo que tenemos la misma edad

-Para mi no- 

-Para mi si…- le di una sonrisa- por fin podre intentar conquistarte sin que parezca acoso- intente bromear pero la diversión que transmitían sus ojos cambió, su sonrisa ahora era triste

-Tengo esposo- respondió en un susurro

-Si, soy yo querida- utilice un tono de voz algo bromista para intentar nuevamente levantarle el ánimo, pero inmediatamente me arrepentí de aquello, su mirada bajo y tomo su mano. Por primera vez me percate de los anillos que tenía, los acariciaba con un rostro que mostraba muchas emociones, tristeza por sobre todo, al igual que nostalgia - lo lamento...mis bromas al parecer siguen siendo malas

-Estoy acostumbrada a malas bromas- respondió cerrando los ojos, suspiro

Nuevamente nos vimos inmersos en el silencio, era incomodo. Hace años, jamás nos vimos en este tipo de situaciones, la conversación fluía de manera tan natural y ahora...pensé que será diferente, empezando porque creí que sería más fácil convencerla de mi punto de vista...

-Dijiste que…- rompió el silencio, en su voz se notaba el cansancio- que  tenías pruebas de que era el futuro…- abrió sus ojos observandome de manera autoritaria- ¿cuales son?

-No estás en condiciones…

-No te estoy pidiendo que me lleves, además creo que ¿es de noche? - asenti, ya era tarde y creo que ella debería descansar- solo pido que me expliques cuales serian las pruebas para afirmar que...

-Encontramos edificios destruidos, y en bastantes malas condiciones- respondí, recordando haber tropezado con un pequeño muro, el cual estaba escondido entre arbustos.

-Con mala condiciones te refieres a...

-En ruinas, destruido...además de que la vegetación no permite ver estas a simple vista

-Claro, la naturaleza toma lo que pertenece…- vi su cara reflexiva, notaba que aún tenía dudas- dijiste encontramos...¿lo hiciste con ellos?- señaló fuera de la tienda dando a entender que hablaba de la tribu

-No...yo…- decidí comentarle lo de Fu, después de todo creo que es necesario dejar en claro desde ahora que para sobrevivir y pasar desapercibidos debíamos hacer cualquier cosa...en especial si ella cree que no podemos volver...debo decir que jamás había pensado en la naturaleza misma del tiempo, y demonios, las esperanzas que habían crecido disminuyeron considerablemente con lo que mencionó…¿desde cuando es tan pesimista?

-¿Mataste a un hombre?- me dijo luego de escuchar mi historia

-Si,  fue necesario para sobrevivir- respondí con firmeza, dándole a entender que ella deberá hacer lo mismo de darse el caso.

ATEMPORALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora