— Vamos Jonah - Marc me llama y ruedo los ojos.
— A donde vamos Marce.
— Tengo que buscar un libro en la biblioteca - dice y frunzo el ceño.
— Pero si tú nunca vas a la biblioteca, ni siquiera lees.
— Pero olvidó hacer una tarea. - Mark aparece a mi izquierda - Vamos.Sin dejarme responder, cada uno me toma de un brazo arrastrándome por el pasillo. Subimos las escaleras al segundo piso y caminamos otro poco hasta llegar a la biblioteca.
Entramos y como suponía está vacía, es la hora del almuerzo por lo que todos están en la cafetería.
— No deberíamos estar aquí - digo pero me ignoran abiertamente.
Cierro los ojos y empiezo a dar vueltas.
—Al menos yo no debería estar aquí ¿Por qué me trajeron?
Escucho que Mark me llama y abro mis ojos sin dejar de girar.
— ¿Que quieres? ¿Encontraron el libro? - pregunto.
— Emm, no te molestes ¿Si? - responde su hermano por él.Voy a preguntar qué sucede cuando lo veo.
Paso de dar vueltas a quedarme completamente quieto. Cierro mis ojos con fuerza y niego varias veces con la cabeza antes de girarme a los gemelos.
— ¿En serio me trajeron por esto? - señalo al chico a mis espaldas.
Ellos se miran entre sí y niego con la cabeza.
— No - mascullo con una sonrisa amarga - Esto no va a pasar.
Camino hasta la puerta y escucho al chico decir mi nombre.
— ¡No vuelvas a hablarme! - grito y mi voz tiembla. Mierda, las lágrimas no tardarán en aparecer — No vuelvas a hacerlo.
Salgo de la biblioteca y empiezo a caminar por los pasillos hasta entrar un salón. Miro a mi alrededor suelto un suspiro al darme cuenta del lugar donde estoy.
Nuevamente mi inconsciente me traiciona.
Cierro la puerta del salón de música y camino directo al piano que se encuentra al lado de la ventana.Este lugar es uno de los mas importantes para mi, incluso si es un salon de clases, los recuerdos que tengo aquí siguen dibujando una sonrisa en mis labios.
Acaricio las teclas y me siento en el banco empezando a tocar un0 de mis tantos intentos de componer una canción.
La música puede reflejar nuestros sentimientos más ocultos, al tocar se nota cuando estamos tristes, molestos, felices o emocionados. Sin palabras, solo sonidos que vienen desde lo más profundo de nuestra alma, eso es lo que me gusta de ella, no debo hablar para transmitir y dejar salir aquello que me atormenta. Toco y sinceramente no sé cuánto tiempo pasa, pero cuando decido que es suficiente acarició por última vez las teclas tomando mis cosas saliendo del lugar.
— Perdiste una clase y vas en camino de perder otra - dice Mark al verme.
Ambos están sentados en el suelo.
— Lo sentimos ¿Si? - habla su hermano - Desde el primer día aquí has estado diferente, también con eso de la carta que mencionaste pues creímos que debían hablar.
— Quizás las cosas podrían arreglarse y te sentirías mejor, con menos dudas. - Mark termina por él — ¿Estas molesto?
Suspiro y niego con la cabeza.
— No estoy molesto, pero no hay nada - marco la última palabra con fuerza- que hablar con él. No hay nada que arreglar. Entiendo que quieran ayudarme , pero estoy bien chicos en serio.
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Nuestro Pequeño Espacio [editando]
Teen Fiction¿Has pasado por esos amores adolescentes donde crees que todo durará y luego, de un momento a otro las cosas acaban y no queda otra cosa que seguir? De eso trata esta historia, de la que aún no sabemos el final. La música es amor buscando palabras...