Riesgo | Ross Lynch.

Catorce.

-¿De verdad te acostaste con ella?

Me pregunta Lewis sin poder creerlo a través de la llamada. Suspiro.

-Sí, ayer me la encontré peleando con su ex-novio y se veía muy mal, la llevé hacia su casa y bueno, pasó.

Lewis da un grito de gloria.
Causando ni un tipo de gracia en mí.

-Si se lo dices a alguien te partiré los putos huevos.

Añado.

-Eso significa que también tengo oportunidad de acostarme con ella.

Frunzo el ceño.

-¿Qué?

-Si se acostó contigo, ¿por qué no lo haría conmigo?

-Lewis, no sucedió como te lo estás imaginando- paso las manos por mi cabello, lleno de nervios de que Lewis haga una estupidez en clase- Ella estaba un poco bebida, yo también... y se dió.

-Por Dios, te follaste a la maestra más buena de la escuela, eres un puto héroe.

Bufo.
Mierda.

-Deja de decir eso- hablo apretando con fuerza los dientes- Maldita sea, espero que no vayas a hacer...

Cuelga la llamada.
Dejándome atónito.
Frunzo el ceño.
Intento volver a llamarlo pero no lo logro ya que al parecer está apagado.

¿Qué?
O bien esta en clases o...
Vamos Ross, es tu mejor amigo, no te puede traicionar...

Aprieto mis ojos con fuerza.
Asegurándome de confiar en Lewis y haciéndome creer que es incapaz de mencionarle algo así a los demás...

Porque si lo hace, arruinaría mi vida.
Bueno, no precisamente la mía.
Sino la de ella.

Dejo mi teléfono celular encima de la mesita de cristal y me levanto del suelo. Mirando su departamento con detenimiento.

¿Debería comprar muchas rosas y ponerlas por doquier para luego pedirle una cita?

Creo que sería una buena idea.
También compraría algo de champagne...
Y...
¡oh! Y un bonito collar.

Sonrío.
A Rydel le gustan bastante.
Tan solo espero que a ella también.

-
Se viene el último capítulo ♡