Nosotros estuvimos allí, incluso antes del comienzo, antes de que Alguien pronunciara las palabras que lo provocaron. ¿Y ahora?, nos llaman Condenados, Los Caídos, e incluso nos comparan con viles "Monstruos Demoníacos", por rebelarnos, o por existir con ellos. Quienes se hacen llamar Humanos, sólo son vestigios de un recuerdo, medio difuso, y a punto de ser olvidado, de lo que eran... ¿Axions? Sí, creo que así les dicen ahora, antes tenían otro nombre. Pero ya no quedan muchos.
Déjenme enseñarles la verdad, que yace dentro de todo, dentro de lo que existe y lo que no, déjenme enseñarles el Destino. El comienzo y el final de ésta historia, y de muchas otras... ¿Por dónde empiezo?
Supongo que debería empezar por el principio, pero en esta ocasión no sería correcto, más bien comenzar desde el resultado sería la mejor elección...
¿Le'Strange, preguntas? Una familia que se ha desligado por completo del tiempo y su continuidad, del destino e incluso más últimamente, de la muerte, en más de una oportunidad. ¿Pero qué es el tiempo, sino una simple ilusión?, un artificio, pero para ellos, tanto como para nosotros, no es más que una simple palabra.
Sin embargo, estos dos últimos son más difíciles de evitar. Te lo explicaré de manera fácil; Nada puede existir sin un destino, ya sea que crean crearlo por sí mismos, o sea dictado por mi palabra, por lo que son una anormalidad en la existencia, y finalmente la muerte... es un tema algo complicado, ya sabemos qué es, pero incluso nosotros, seres eternos e inmortales, hemos de morir algún día, el Destino morirá y dará paso a otro. Un ciclo infinito, por así decirse... al menos en esta forma, claro está.
Así que en definitiva, los Le'Strange son alguien de quien debo cuidarme... o mejor dicho, debería cuidarse nuestro hermano mayor. Tan arrogante de sus logros pasados, jugando con los mortales hasta romperlos, intentando lograr metas fútiles, vanos deseos inocuos sobre la trascendencia, aunque sería mejor llamarlo venganza, a nuestra querida hermana mayor. Quien nos ató a estas formas materiales y perecederas... su amor por el universo será su fin un día de estos, lo siento si te aburro con mis pensamientos personales, pero en el fondo, muy en el fondo, es su culpa que todo esto sucediera de ésta manera tan atroz para los tuyos.
Sus hijas, una tan pura y blanca como su madre... mientras que la otra, mi favorita, está llena de odio y oscuridad, la luz que heredó de su raíz tendrá que atravesar muchas sombras antes de poder salir, aunque ya no será la misma. Pero en esencia, ambas son iguales, muy diferentes entre ellas. Porque ambas son Le'Strange. Como dije, los Le'Strange nunca han estado en mi radar, sólo sé de ellos por consecuencias, y ellas son unas de ellas. Mi hermana terminó siendo alguien muy traviesa después de una eternidad... Si bien toda historia tiene un final preestablecido, es muy diferente para ellos, su odisea podría nunca acabar, o ni siquiera empezar. Pero N no dejará esa carta en blanco sin usar, ese es precisamente su pase libre hacía lo que alguna vez fuimos, y lo va a jugar en cuanto tenga la oportunidad, de una manera u otra.
Desde cierto punto, las letras se vuelven borrosas, me es difícil leer que está escrito allí, pero será algo que no quiero perderme, estos cambios en el libreto siempre me han fascinado, toda la familia estará presente. ¿Lo estarás tú...Padre? ¿O debería llamarte Yahvé? Nunca sé que decir.
¿Seguro que da igual? Si tú lo dices, así sea... era algo así ¿no? No te rías, lo que digo es en serio. Ya es hora de irme, tengo una cita... sí, finalmente veré a la familia. Supongo que seguían molestos por lo de la rebelión del sobrino y todo eso, pero a ti nunca te molestó. Puedes tomarlo como mi pago por hacer tu trabajo todo este tiempo... "Adiós, Shelohim. Creo que no nos veremos en un tiempo. Cuídalos por mi hasta entonces" Suena tan bien cuanto tú lo dices, será un fastidio, pero después de todo no queda otra. Adiós, Padre... Gracias por todo, pero ya es hora de retirarse... criaste unos excelentes hijos, aunque no lo fuéramos en verdad.
Nos encontró por accidente aquella vez, vagando entre la nada, apenas si dijo tres palabras, pero ellas fueron suficientes para despertarnos de nuestro letargo. ¿Quién sabe cuánto pasamos así? Vidas enteras de comienzos y finales, pero por esa vez, a pesar de ser la última en abrir los ojos en esa vasta oscuridad, pude ver como brillaba con la fuerza del universo en un solo punto... Mi odiada y querida hermana mayor, la primera de nosotros...
Sé que has pasado por mucho desde entonces, mucho de eso por mi culpa... Lo único que puedo hacer para compensarlo es algo simple, tanto tu como yo lo sabemos, el final de nuestra historia está por venir. ¿También lo viste?... me alegro. Sí, se acaba de ir. Parecía ir con prisa, alguien le debió estar esperando del otro lado... No, nunca me interesó regresar a mi forma original, realmente me gusta este cuerpo.
¿Estás embarazada? Eso sí que es una sorpresa, recuerdo que regresaste a Athelebershet por algo similar... no, no te preocupes por ello, estará bien dentro de poco. ¿Es de ese Le'Strange?... Me lo imaginaba. ¿Sabes lo que sucederá no?... Me hace gracia, yo tampoco lo sé. Es tan divertido...
¿Su nombre? Que lo elija... ya que es la primera hija que tienes... Hameline, sí como el flautista, será muy especial. Ya lo verás... Déjame enseñarte, el comienzo de la historia de tus hijas, y la persona que amas, más que al universo.
No te preocupes, solo tienes que seguir sonriendo de esa manera, hasta que descubramos cómo terminará todo... Hasta entonces ten una buena vida como humana, es lo que siempre quisiste ¿no? Yo me encargo del resto, le avisaré a la familia de tu boda y todo eso...
¿Y bien, sigues aquí? Creo que ya es hora de irte, tengo trabajo que hacer... esta historia no se escribirá sola, puede que sí lo haga, pero dejarle todo a Val no es buena idea, no conozco su destino, pero sí los efectos que causará más adelante, todas las posibilidades se abren frente a ellos y no pueden ni verlo. Alguien tiene que darles una pista del camino, si no, es muy posible que se pierdan... y hay tigres merodeando.
Yo tengo una cita a la cual asistir, ve tú primero.
Nos veremos muy pronto, no te preocupes... no hay nada de qué preocuparse. No es muy propio de ti desconfiar, eso deberías dejármelo a mí, sólo no puedo evitarlo. No puedo evitar pensar en lo emocionante que todo se volverá muy pronto. Después de todo, falta muy poco para esa fecha en la que el destino de todo, y todos, se esfuman, ¿no te lo dije? Creí que te habrías dado cuenta, supongo que por ese motivo te quedaste a vivir incontables vidas mortales; Querida, el tiempo sólo es una ilusión que tus humanos crearon, no hay una barrera entre el mañana y ahora, todo está sucediendo al mismo tiempo, solo tienes que creer.
"Cómo digas, prefiero vivir mis días como humana, que ver nacer y morir mundos enteros." Si tan sólo conocieras el peso que tienen esas palabras no lo dirías, ya que estás aceptando tu propia muerte como algo natural, aunque no puedas morir, tiene que doler. No estoy muy segura de mis pensamientos ahora que lo pienso, ¿se habrá vuelto finalmente una mortal? ¿O algo muy similar a ello? ¿Tus hijas?... Y en cuanto analizo sus palabras, leyendo entre líneas, lo comprendo casi al instante. La razón por la cual se desprendió a sí misma de ese fragmento de antes de la creación, y que le otorgaba esa blancura, la razón por la cual su luz cegadora se teñía, de un matiz sanguinolento, mientras recorría los senderos hacia mortalidad.
Dejándome a solas con una sensación desbordante que me recorría, finalmente lo había hecho, nunca dudé de que lo haría, pero no creí que lo hiciera... ¿Le'Strange, eh? Sin duda, esto será interesante, no quiero perdérmelo ni un instante... Supongo que no pasará nada si dejo este lugar por un relativo momento... ¿Lo sienten aproximarse? Algo viene, y no está contento de haber sido dejado atrás.
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El Amanecer de los Condenados
Short StoryEl Mundo acabó repentinamente, sin previo aviso, los cielos se recubrieron con rojo sanguinolento, mientras los edificios y las ciudades se desmoronaban hasta sus cimientos, lenta e imperceptiblemente, cuando nos dimos cuenta de ello... ya era demas...