Me levanté con los rayos de sol dándome en la cara, maldiciendo me levanté del suelo y fui a cerrar las cortinas, un momento ¿qué hacía en el suelo? miré a la cama y se encontraba Seth y Leah donde me encontraba yo hace unos momentos, le coloqué una almohada en la cabeza a mi hermana y bajé a la cocina donde se encontraba Sue haciendo el desayuno.
-Buenos días Sue, que rico huele- lo di un beso en la mejilla mientras ella me sonreía.-Buenos días cariño, ¿que tal te encuentras?
-Bastante bien,gracias por preguntar. Oye, referente a lo de ayer, sabes si los Cullen pueden tener alguna información sobre eso.- ella me ponía el plato con el desayuno en frente-
-Tal vez, podrías pasarte mañana a preguntarles, hoy Sam quiere que vayas a su casa.
-Quiere asegurarse de que no sea una amenaza, ya se, ya se.- su cara demostraba pena al saber que los que son mis propios hermanos desconfían de mi, una vez terminado el desayuno seguí hablando- Llamaré a Edward para ir adelantando las cosas.
- Vale, pero podrías despertar a los chicos- asentí y cogí una botella de agua.
Tranquilamente subí al cuarto donde mis hermanos seguían dormidos en la misma posición, empezaba a dudar de que estuviesen vivos aunque ese comentario desapareció de mi mente cuando el ronquido de Seth se hizo presente, riendo me acerqué a ambos y les lancé el agua logrando que se despertaran sobresaltados.
- El desayuno está listo.- Salí del cuarto escuchando los insultos de mi hermana y los bufidos de Seth. Cogí el teléfono y marqué a mi querido amigo, el cual tardó un poco en cogerlo.
-Hola Eddy, ¿que tal?
- Buenos días Val, estoy bien, ¿pasó algo?
- No, no, tranquilo. Solo quería preguntarte si podrías ayudarme con algunos asuntos de mi familia. Según Sue, es una familia un tanto extraña de vampiros y que una hermana es bruja. Si quiero quedarme en Forks, tengo que asegurarme de que no soy una amenaza de verdad.
-Podría investigar, si. No creo que haya muchas brujas que ayuden a vampiros ¿no?
-No lo se Edward, no lo se. Muchísimas gracias.
-No hay de que enana.
Me dirigí a casa donde mis hermanos seguían desayunando, al entrar ambos me miraron supuse que habían escuchado la conversación, sabía perfectamente que podía utilizar el don de Edward pero no me parecía correcto, nuestra mente es nuestro lugar secreto e íntimo.
-Si encuentras a tu familia materna, ¿no te irás con ellos no?¿ nos dejarás?- Seth hizo la pregunta que rondaba por la cabeza de ambos
-Por supuesto que no, podré encontrar a mi madre, pero sois mi familia y voy a estar siempre con vosotros, ¿te ha quedado claro?- le acaricié suavemente la mejilla mientras él asentía.- Ahora si, ¿que tenéis planeado para hoy?
- Ahora vamos a casa de Sam, quiere que vayas.
- Lo se Leah, no te preocupes me lo dijo Sue esta mañana.
-Si, el caso es que nos vamos ahora, en cuanto terminemos.
-Oh, no hay problema, voy a subir a ducharme mientras tanto.
Tras la ducha, me vestí y me dirigí hacia la salida donde se encontraban mis hermanos esperándome, Leah y Seth se transformaron y empezaron a correr a la que se supone que es la casa de Sam Uley, yo simplemente los seguí con mi velocidad vampírica. A lo lejos pude ver una casa de madera, parecía sacada de un cuento de hadas, desde donde me encontraba se podía oler el aroma a magdalenas recién hechas y a canela. Ellos rápidamente salieron de fase, se cambiaron y entraron a la casa, pero cuando fue mi turno una especie de barrera me lo impidió, Leah salió y me miró extrañada.
-No puedo entrar Leah- volví a intentarlo y el resultado fue el mismo, mi hermana intentó empujarme pero un grito desgarrador salió de mi garganta alarmando a toda la manada- Dios, que dolor, ni se te ocurra volver a intentarlo- señalé a la metamorfa.
-Valerie, tus ojos...han cambiado.
-Si,ya lo se Jared. Suele pasar, según tengo entendido hay diferentes tipos de vampiros y yo soy diferente a los Cullen, mis ojos se ponen así cuando voy a alimentarme o cuando quiero amenazar. Pero esto es nuevo para mi, no me pasó en casa de Sue ni nada.
-No pasa nada, chicos podemos hablar aquí no creéis, por lo menos hasta que sepamos que es lo que pasa.
-No te preocupes Emily, quedaos dentro, yo tengo que ir a hablar con los Cullen, otro día lo planeamos mejor- me despedí de ellos y me adentré en el bosque dirigiéndome al territorio Cullen.
El sonido de un coche hizo que me detuviera, reconocía el olor a humano, a vampiro y a lobo, algo dentro de mi me gritaba que me dirigiese así que con los sentidos alertas me dirigí hacia el olor. Lo primero que vi fue una espalda desnuda y morena,el tatuaje que se mostraba en su brazo me indicaba que era de la manada, enfrente suya se encontraba Isabella Swan y Edward, este último se había percatado de mi presencia al contrario de los otros.
-¿Todo bien, Edward?- mi voz se hizo presente alterando al metamorfo y a la humana, cuando el moreno me miró a los ojos supe que él era mi perdición, mi mundo ahora mismo giraba en torno a él, toda relación que mantenía con mi familia, con los Cullen o con la manada desaparecieron para atarse a una sola persona,él.
-Si, si no te preocupes.- sabía que notaba la incomodidad del momento por lo que se acercó a mi, para luego murmurar- Iba a llamarte ahora, he encontrado algo.
Con esas palabras mi corazón empezó a latir rápidamente y lo miré. Sentía la mirada de nuestros acompañantes pero no le tomé importancia, tenía la posibilidad de encontrar a mi madre.
-Habla, ahora.
-Se que te emociona, pero tengo que decirte varias cosas, sabrás que tu "especie"-hizo comillas con los dedos", asentí - y las diferencias que he encontrado son pocas, como lo de tu apariencia y que podéis comer comida humana, todos. He podido localizar a algunos de ellos, se encuentran en un pequeño pueblo de Virginia.
- Espera espera chupasangre, ¿esta quién demonios es? - las palabras que me dirigía mi impronta me dolieron pero él parecía ignorarlo.
- Es la hija de Harry Clearwater, Jake- y la humana tenía que hablar, una risa de parte de Edward se escuchó, había escuchado eso.
- Mira Bella, ¿por qué no te callas un rato? puedo presentarme yo sola, soy Valerie Clearwater.
-Soy Jacob Black, te conozco pero de la nada desapareciste, un placer.
Una voz demasiado fuerte llegó a mi mente, sabía que era el don de Edward actuando y ahí lo supe, Jacob estaba enamorado de Bella y le daba igual rechazar a su impronta incluso romper el tratado con tal de tenerla, ignorando el dolor que sentía en mi pecho me dirigí a él.
-Creo que es mejor que volvamos Jacob, y no es una pregunta, hay reunión en casa de Sam.-antes de irme recordé algo- Edward, ¿como se llamaba el pueblo?
-Mystic Falls
ESTÁS LEYENDO
En los genes del lobo
FanfictionPAUSADA TEMPORALMENTE Valerie Vulturi vuelve a Forks después de casi una década y se encuentra con cosas que ni su deseo más anhelado podrá impedir.