偽 fake alpha ━ riren

20.

Antes de comenzar con el capítulo, vengo a
advertir que contendrá puro lemon, so, si dicho contenido no es de su agrado pueden
simplemente no leerlo !!!

— Te he dicho que ocurrió algo importante, no puedo dar detalles ahora.

— Excusas, sólo estás saltándote nuevamente las clases.

— No, no es eso.— Bufó, aguantándose las ganas de cortar. Sabía que si su padre terminaba enterándose de lo que ocurrió, no dudaría ni un segundo en expulsar a Mike de la academia, sin embargo, eso conllevaría a un sinfín de rumores que podrían afectar en demasía al ojiverde, y eso era lo que menos deseaba. Además, prefería encargarse de ese bastardo por cuenta propia.

— ¿Y entonces?, ¿Qué es eso tan importante?

— ¡Te he dicho que no puedo dar detalles, viejo!— Su padre frunció el ceño, apretando con fuerza el pequeño bolígrafo que llevaba en su mano.

— ¿Pasó algo con tu madre?, ¿Ella está bien?— Cuestionó de forma insistente, provocando que el ojigrís frunciera de igual forma el ceño, la paciencia no era clave para ninguno de los dos.

— No. No es ella, es Eren.— Suspiró, percatándose de que ya habían pasado varios segundos desde que dejó al mencionado en su habitación.— Mira, realmente estoy ocupado ahora, colgaré.

— ¡¿Huh?!, ¡¿Qué fue lo qu— La línea se desconectó por parte del peli-negro, dejando completamente perplejo e incluso preocupado a su padre.

Aún así, Levi no tenía ganas de hablar sobre ello, ahora lo único que le importaba era la condición de su pareja. No podía ser egoísta y pensar simplemente en su venganza, Eren había sido el que se llevó la peor parte y lo menos que podía hacer era ocuparse de él; cuidándole más que nunca.
Subió las escaleras con prisa, corriendo hasta la inmensa puerta que daba con su habitación y agradeció que no hubiera nadie en casa, después de todo, la mayoría de sus parientes eran Alfas.

— Mierda...— El mayor abrió sus ojos en sorpresa al encontrar su cuarto cubierto por las feromonas del más bajito, al parecer era demasiado tarde para que los supresores lograran hacerle efecto. Tragó en seco cuando decidió acercarse hasta quedar sentado sobre la cama junto al Omega. Su lado cuerdo le pedía a gritos que contuviera a toda costa sus instintos, para no tomar posesión del Omega con brusquedad en ese mismo instante.— Eren...— Murmuró, pero antes de siquiera poder seguir hablando sintió como el más bajito se apresuraba en levantarse para poder juntar torpemente sus labios, mientras su cuerpo se posicionaba sobre su regazo.

— A-ayúdame.— Susurró, dejando ver al ajeno con claridad sus ojitos húmedos color esmeralda que brillaban con gran intensidad.

Levi maldijo en voz baja, lo que más quería en estos momentos era mandar todo a la mierda, las feromonas del Omega causaban un gran efecto sobre él, pero aún así no podía, ¡no debía!, Eren no merecía eso después de lo ocurrido.

— No puedo ayudarte...— Intentó mantenerse firme, muriendo de ternura en el intento al ver el ceño fruncido y el leve puchero sobre los labios del menor.

— ¡Pero mi cuerpo está ardiendo!— Lloriqueó, dejando ver su lado asustado ésta vez.— Siento que moriré si no haces algo, ¡por favor!— Suplicó, mientras sus lágrimas comenzaban a caer mojando sus mejillas.— S-sólo lo he experimentado una vez... ¡Es horrible!... Además, ésta vez fue culpa de ese idiota y-y... ¡Soy de lo peor!, ¡Lo siento mucho!— Rompió en llanto, causando un desconcierto al mayor y preocupándole aún más.