偽 fake alpha ━ riren

12.

El sonido que ejercían los cubiertos sobre la mesa y el ruido que se realizaba a la hora de masticar uno que otro alimento, era lo único que se escuchaba con claridad seguido del incómodo silencio entre los presentes.

Levi, a pesar de estar aún un poco incómodo por la situación, sentía con claridad el inmenso nerviosismo que el más bajito emanaba y aquello le hacía querer actuar con más confianza. Movió una de sus manos por debajo de la mesa en busca de la ajena y entrelazó ambas, notando el pequeño sobresalto de Eren. Sin embargo, él no había sido el único en percatarse de aquello.

— ¡No debes sentirte nervioso!— Exclamó Carla con una sonrisita amable, provocando que el mayor se apenara un poco.

— Ah.. supongo que es inevitable.— Le devolvió la sonrisa, rascando su mejilla.

— Es la primera vez que Eren trae a su pareja.— Murmuró contenta y ambos se avergonzaron, después de todo no eran oficialmente novios.

— Mamá... nosotros...— Intentó explicarle, pero ella le detuvo.

— ¡Tú tampoco te avergüences!

— Entonces— Aclaró su garganta, recibiendo la atención de todos.— Tú eres el Alfa que mi hijo mencionó.— Levi sintió el leve apretón que el ojiverde ejerció con su manito y le sonrió con ternura para calmarle, para después dirigir su vista hacía el hombre que finalmente se había dignado a hablar.

— Supongo que puedo decirle que sí.— Murmuró, sintiendo la mirada amenazante del padre de su Omega.— ¡Claro, si es que Eren no tiene otros!— Bromeó soltando una leve risita nerviosa, a decir verdad, aunque su intención había sido un ambiente menos intenso, había logrado lo contrario.

— ¿Eres consciente de la situación de Eren?— Comentó cortante, provocando un suspiro por parte de su hijo y una mirada confusa por parte del peli-negro.

— Grisha....— Murmuró Carla con indignación, llamándole la atención, pero su esposo le ignoró por completo.

— Tengo entendido que eres de la familia Ackerman, ¿no es así?— Prosiguió, sin dejar de mantener el contacto visual.

— Sí...— Después de correr a un lado su plato, el hombre frente a él apoyó su mentón sobre sus manos entrelazadas, dejando que sus codos actuaran como soporte sobre la mesa.

— Tu familia es importante, es literalmente la cabeza de nuestra pirámide.— Comentó, mostrando una falsa sonrisa. Levi frunció el ceño, dejando su nerviosismo a un lado, aquello había logrado enojarle.

— ¿A dónde quiere llegar, Señor Jaeger?— Preguntó con tranquilidad, mordiéndose la lengua para mantener la calma y evitar levantar el tono.

— ¿A dónde quieres llegar tú con mi hijo?— Contraatacó.— Es decir, él realmente es anormal, — El mencionado tragó saliva y apretó con fuerza sus labios, todo estaba saliendo tan bien, ¿por qué su padre tenía que saltar a arruinarlo?— Eren no tiene feromonas, tampoco puede sentirlas, jamás ha presentado un celo, no es tan dulce como los demás Omegas y, ante ello, estoy seguro que jamás podrá quedar embarazado. Tu familia, al ser importante, necesita sucesores casi por obligación, claro, si es que no quieren terminar en un rango menor.

— ¡Grisha!

— No se preocupe, Señora Jaeger.— Le sonrió al verla tan enojada.— A decir verdad, estaba esperando con ansias una conversación con mi suegro.

— Tú no lo has marcado. No me trates de forma tan familiar.

— Tiene razón, debería apurarme con eso, ¿estoy siendo muy lento? — Jaeger frunció el ceño, apretando sus dientes ante la actitud arrogante que el joven comenzaba a presentar. Por otro lado, por alguna razón, Eren se sintió cómodo al escucharle hacerle frente a su padre de aquella forma.— Supongo que tendré que responder a sus pequeñas dudas.— Suspiró, soltando con suavidad la mano del ojiverde para imitar la posición que el ajeno había tomado sobre la mesa.