Stockholm Syndrome [#1 Zayn] TERMINADA.

Décima Tercera Semana.

¡Hey Zayn!

Seguro te preguntarás por qué estoy tan efusiva hoy.

Pues, de todas las cosas malas que nos han pasado, recordé las cosas buenas, que alguna vez, habías hecho por mi.

Recuerdo el día que me compraste esos esmaltes de colores. Sólo para que tenga algo que hacer mientras tú no estabas.

-Zayn- susurré
-¿Si?- soltaste el mando del videojuego y me miraste.
-Eh, sabes que soy mujer y.. necesito ir al super- mencioné avergonzada.
-¿Como para qué?- refunfuñaste.
-Estoy en esos días del mes.. donde ya sabes- dije y me miraste con confusión en el rostro, para luego comprender.-
-¡Oh! ¿Quieres esas toallitas higiénicas no?- dijiste sin pudor alguno haciéndome sonrojar al extremo.-
-Eh, si- murmuré.-
-Aw bebé, no deberías avergonzarte, deberías pedirmelo más a menudo - dijiste levantandote del suelo y dándome un cariñoso beso en la nariz.-
-Okay, gracias- dije y me senté en el tan conocido y aburrido sillón para mi.

-Ana... - Becca me miró cerrando su libreta - Te preguntaré algo... Y quiero la verdad.

-Siempre... - me interrumpió.-

-No - cerro los ojos y levantó el dedo índice para señalarme - Ni pienses, en decirme, que siempre me dices la verdad - me miró y se levantó - Porque se que no lo haces.

-Bien - dije. Ella se sentó a mi lado, y tomo mis manos.-

Cuando me dijiste que ibas al super, seguido de un amoroso beso, me quedé atontada mirando a la nada.

Cuando llegaste cargado de cosas me dijiste algo como:
-Ten cuidado con esas bolsas, te traje esos esmaltes de diferentes colores y un poco de maquillaje para que no te aburras tanto- mencionaste como si fuésemos novios de hace años, y no unos jodidos novios, donde la chica (ósea yo) era tú rehén.
-¿En serio?- dije y corrí por las bolsas.
En secreto tenía una obsesión con pintarme las uñas, y tu habías traído eso.

Al abrir la bolsa encontré unos diez de distintos colores y sonreí embelezada por su ternura.

-Tu - Becca me miraba dulcemente, mientras acariciaba mis manos - Has... - se aclaro la garganta - ¿Has dormido con él? - su pregunta, me llegó como un balde de agua fría. Intenté no reaccionar ante eso, pero falle. Mi mirada, que se encontraba hasta ese momento, fija en nuestras manos, se levantó de repente, mirando los ojos profundos de Becca.-

-¿Que? - la voz a penas me salió.-

-¿Has tenido, relaciones con el? ¿Sabes a quien me refiero, cierto? - el aire se atoro en mi diafragma. Mi garganta se secó. Y llore. No pude mas.-

-Gracias Zayn- dije a punto de soltar lágrimas. Maldito periodo.
-Oh de nada bebé, si quieres más no dudes en pedirmelo ¿Okay?- dijiste y envolviste tus brazos cálidos alrededor mío.
-Okay- dije y te abracé más fuerte.

Esos fueron unos de los días donde la felicidad me cegaba a tu lado.

Uno de los pocos que tuvimos juntos.

-Traquila Ana - Becca me abrazo. Y sentí en ese momento, que ella realmente, era de fiar.-

No me despediré con un adiós, si no con un hasta siempre.

Siempre tuya, Belle.

*** :)