𝐔𝐧𝐚 𝐩𝐞𝐪𝐮𝐞𝐧̃𝐚 𝐈𝐧𝐟𝐢𝐝𝐞𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝 🐰/ 𝐊𝐎𝐎𝐊𝐌𝐈𝐍/🐥

❤︎ Si lo prometí ★

El silencio era ensordecedor y como no serlo si el reloj marcaba las 3 a.m. hora que suelen decir que las almas vagan por el mundo y que no es nada bueno despertarse a esa hora. (Yo escribiendo a esta hora y lo que se me ocurre poner👆 y todo porque me quita el sueño)

Jungkook había despertado, como era ya su costumbre el solía pasar su brazo por la cintura de Jimin cuando él dormía profundamente, así evitaba que el castaño se diera la vuelta y aún con sus pequeños ojos cerrados sonreirá inconscientemente dejándose ver como todo un Ángel, evitaba ver aquella escena la cual le hacía maldecirse por hacerlo sufrir y a su vez engañarlo.

Al no sentir el cuerpo del castaño Jungkook se levantó abruptamente de la cama mirando de un lado a otro, la luz de la luna iluminaba la habitación y con ello dejaba ver el vacío que había en ella.

Asustado de no encontrar a su esposo salió a paso ligero y cuando estaba por gritar su nombre desde la escalera pudo divisar un pequeño bulto hecho bolita en el sillón, su corazón dolió como si una daga le hubieran incrustado en el al ver tal escena, su esposo, su único amor se encontraba durmiendo en el sillón como si no tuviera una cama a la cual ir y sobre todo ni siquiera estaba arropado.

Bajando lo más silencioso que pudo se acercó hacia él, una lagrima cayó al tenerlo tan cerca y lejos a la vez, pasó su mano con cuidado por esos lindos cabellos castaños y esas mejillas regordetas que tanto le gustaba apretar y ver como hacía puchero por tal acción, lo tomó en brazos delicadamente evitando que despertara y subió con él a la habitación, lo recostó en su lado y él se recostó detrás abrazándolo por la cintura.

__ Lo siento tanto mi amor __ susurró en el cuello del castaño y dejando un beso en el mismo__ te amo tanto mi Mochi y me odio por hacerte sufrir, pero no puedo solo alejarme de ti, mi vida ya no sería vida si no te tengo a mi lado__ dijo con lágrimas antes de quedarse dormido.

Y ahí estaban ellos recostados en la misma cama, durmiendo profundamente como si nada hubiera pasado.

El brillo del sol se hacía presente dejando caer sus rayos en el rostro del castaño, abriendo lentamente sus ojos y mirando cuidadosamente en donde estaba no se movió en absoluto y cómo hacerlo con el peso que sentía en su cintura pues no recordaba que él hubiera subido a su habitación, sino más bien recordaba haber estado en el sillón.

Una sonrisa se le formó al ver como los fornidos brazos de su esposo lo aprisionaban, sabía que estaba mal y que debía estar totalmente furioso y odiando a su esposo por la manera en como lo trataba pero, simplemente no podía hacerlo no amándolo como lo ama, moviéndose lentamente y lo más cuidadoso que pudo se dio la vuelta quedando frente a frente, podía sentir la respiración relajada del pelinegro, se veía realmente hermoso cuando dormía, todo él era hermoso, amaba cada pequeña facción que formaba todo él, realmente lo amaba.

__ Si me sigues mirando así me desgastaré __ habló el pelinegro aún con sus ojos cerrados.

Jimin desvió la mirada y trató de levantarse.

Cuando estuvo a punto levantarse los brazos del pelinegro lo detuvieron haciendo que quedara en la misma posición en la que estaba.

__ No te vayas __ dijo esta vez, pero mirándolo.

Jimin tenía la mirada baja, aún le dolía la forma en que la que lo trató el día de ayer, pero estaba feliz de que su esposo lo estuviera abrazando y pidiendo que no se fuera.

__ No quieres seguir desgastándome con tu vista __ dijo con un tono coqueto.

__ Eres un engreído __ respondió sonriendo y a su vez mirándolo.

Sus miradas se conectaron en ese instante, miradas de amor, hicieron clic una vez más.

__ Lo siento tanto mi amor __ dijo el pelinegro sin apartar la vista y sin dejar de abrazarlo__ siento lastimarte, no te merezco __ esto último dijo desviando la mirada.