Capítulo 7

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Los dos jóvenes llegaron segundos después hacia Urokodaki, viendo que estaba frente a una pequeña casita. Tanjiro, todo inocente de él, preguntaba si ya habían pasado la prueba.

- La prueba va a empezar ahora. Tanjiro, deja a Nezuko y Luna en mi casa, yo las protegeré.- El de cabellos borgoña, no muy convencido deja a las dos pequeñas en el interior de la casa para irse junto al hombre mayor.

- Nezuko, estoy muy cansada...- Sus ojos ámbar van cerrándose poco a poco, quedando acostada en el suelo apoyando su cabecita en la cesta, con una Nezuko pequeña dormida tambien, pero sintiendo la suave presencia de Luna.



Mientras tanto, Urokodaki había llevado a Tanjiro montaña arriba para decirle que su prueba sería bajar esta misma antes de que los rayos del amanecer hicieran acto de presencia, dejando al menor con las preguntas en la punta de su lengua. Con cierta determinación, el chico empieza a bajar velozmente la montaña, sin percatarse de las miles de trampas ocultas que esperaban pacientemente a ser activadas para atacar al joven Tanjiro.

"¡Trampas!¡Ahora entiendo lo que quería decir Urokodaki-san con lo de llegar antes del amanecer!¡Esto no va a ser fácil, para nada!"

Pensaba el chico mientras trataba de bajar la montaña tan rapido como podia, con ayuda de su agudo sentido del olfato, pudiendo detectar las trampas con éxito; pero todo un fracaso a la hora de esquivar a tiempo algunas.

Por mientras Tanjiro bajaba la montaña, Urokodaki estaba arropando a Nezuko y Luna, quedándose mirando a la última mencionada, viendo su cuerpo en casi los huesos, con su piel opacada por la suciedad y su cabello en las mismas circunstancias. 

"Tanjiro salvo a esta niña de la perdición y la muerte horrible que podría haber sufrido si anduviera sola. Sus rasgos parecen extranjeros, pero sin duda es muy buena chica. Podría ser una chica muy fuerte para ser cazadora."

Mientras estaba hundido en sus pensamientos, había logrado oír como la puerta se abría lentamente, dejando ver a un malherido Tanjiro, con sangre por su ropa y frente mientras mantenía la miraba baja.

- Y-ya he llegado, Uro...kodaki...- El cuerpo del joven cae arrodillado, desmayado por el esfuerzo que había hecho por estos últimos días. Lo último que había oído antes de dejarse caer en la infinita oscuridad de la inconsciencia y en los brazo de Morfeo, sería el reconocimiento de su maestro.

- Kamado Tanjiro, reconozco tus habilidades. A partir de ahora serás mi discípulo y yo tu maestro.





Al día siguiente, Tanjiro empieza a ser entrenado por Urokodaki, siendo testigo la pequeña niña quien se limitaba a observar con admiración mientras trataba a escondidas de imitar a Tanjiro y seguir los consejos de Urokodaki.  Un dia, el mayor estaba sentado en el interior de la casa con los dos menores, escuchando atentamente al hombre quien les explicaba que eran los demonios, que propósitos tienen y que hacían los cazadores de demonios y sus rangos que había.

- Entonces, ¿dices que los Pilares son los más fuertes entre toda la Organización Cazademonios?- Preguntaba la pequeña mientras miraba con una admiración al mayor, recibiendo una respuesta afirmativa por parte de Urokodaki.

- Exactamente, Okami-chan. Actualmente hay 9 Pilares, entre ellos está Tomioka Giyuu, como Pilar del Agua.- Un "woah" agudo sale de los labios de la Okami, haciendo sonreír al hombre el cual llevaba máscara, por lo que no se notaría en absoluto la felicidad que le daba ver como esa pequeña empezaba a brotar alegría por sus opacos ojos.

- ¡Es muy genial, quiero conocerlos Urokodaki!- Decía la niña con emoción, ganándose unas pequeñas palmadas en su cabeza de parte de Urokodaki mientras la miraba.

- Primero debes ser una cazadora de demonios y matar a todos los demonios que puedas. Contra más demonios elimines, más alto rango serás y tal vez veas a algún Pilar, pequeña.- Luna asiente con la cabeza rápidamente, decidida por primera vez en su vida con algo. 

-En fin, Tanjiro. Sigamos entrenando. El tiempo no espera a nadie.



Desde aquel día, Tanjiro entrenaba con todas sus fuerzas tratando de ganar fuerza físicamente y a aprender correctamente las posturas, con una pequeña Okami imitando todo a la perfección a escondidas de sus mayores. Lo que no sabía era que esa pequeña estaba siendo observada por dos pares de ojos.





𝑳𝑨 𝑵𝑶𝑪𝑯𝑬 𝑫𝑬 𝑳𝑨𝑺 𝑬𝑺𝑻𝑹𝑬𝑳𝑳𝑨𝑺 【Kokushibo X Reader】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora