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maratón 2/3

Norma's POV

- Jade, por favor, déjame entrar - esa era la quinta vez que se lo pedía, pero al parecer no cedería tan rápido.

No tuve otra opción que correr hasta la habitación de mi hermana y buscar el conjunto de llaves para todas las habitaciones de la casa.

Cuando al fin tuve la llave que necesitaba en mi poder, no dude en usarla y abrir la puerta lentamente.

Me encontré con la imagen más devastadora que vi en mi vida.
Mi pequeña se encontraba en un rincón de la habitación apretando sus piernas contra su pecho y con su rostro escondido en sus rodillas.

Al acercarme un poco más, pude escuchar sus pequeños sollozos. Esi fue lo que terminó de destruirme.

- Jade... - susurré débilmente intentando contener mi llanto - Pequeña...

- Por favor, vete - pidió entre sollozos. Obviamente no le hice caso, jamás volvería a apartarme de su lado.

- Déjame explicarte - murmuré acercándome cada vez más a ella.
Estaba a punto de agacharme para quedar a su altura, cuando ella decide ponerse de pie bruscamente.

- ¡No quiero escucharte! - gritó haciéndome estremecer. Jamás en la vida pensé que ella me levantaría la voz, siempre fue respetuosa conmigo, pero la entendía y merecía su desprecio - Estuve meses esperando una pizca de interés de tu parte, pero no obtuve nada ¡¿y ahora crees que tienes derecho a excusarte?! ¡Claro que no!

- Yo... - como era de esperarse, mi hija me volvió a interrumpir.

- No estuviste ahí cuando más te necesité... No estuviste ahí cuando el abuelo murió sabiendo lo importante que él era para mí. Fuiste tan egoísta que solo te concentraste en tu propio dolor, te olvidaste de los demás,
y gracias a eso te perdiste de muchas cosas importantes que me sucedieron... Estuve saliendo con una chica ¿sabes? Creí que era el amor de mi vida pero me rompió el corazón, y no estuviste ahí para consolarme.... Al parecer tengo un talento para el canto, mi profesor de música lo descubrió, pero por supuesto no te lo conté... ¡Dejé de comer solo para llamar tu atención, pero no funcionó! Dos de mis amigas se dieron cuenta antes de que tú lo hicieras, y ahora me estan ayudando con eso ¡pero siento que jamás saldré de esta mierda!
¿Entiendes lo que hiciste? ¡Me convertiste en un monstruo! - para ese entonces, ambas teníamos las mejillas húmedas debido a las lágrimas.

Ver a Jade así de vulnerable me rompió por completo. Me acerqué lentamente a ella y la rodee con mis brazos. Al principio se resistió, pero terminó por devolverme el gesto.

- Lo lamento, lo lamento - empecé a susurrar en su oído - No sabes lo mucho que me arrepiento. No estaba pensando en lo que hacía y arruiné todo... Por favor hija, perdóname.

- Necesito a mi madre, la necesito - sollozó mi pequeña mientras se aferraba con más fuerza a mi cintura.

- Aquí estoy pequeña, por favor perdóname - sollocé junto a ella.

Estuvimos abrazadas por al menos veinte minutos, lo único que se escuchaba en aquella habitación eran nuestros sollozos.

De repente, Jade se alejó de mí para tomar mi mano y guiarme hacia una de las camas en donde ambas nos recostamos. Segundos después, ella se abrazó a mi cintura mientras escondía su rostro en mi pecho. Solía hacer eso cuando era pequeña y acababa de tener una pesadilla. Eso me hizo sonreír, pues significaba que se seguía sintiendo segura entre mi brazos y enserio lo agradecía.

Luego de unos minutos, ambas caímos en un sueño profundo.

Jade's POV

No sé cuánto tiempo estuve durmiendo, pero al despertar el sol seguía en su punto alto. Si fuera por mí seguiría durmiendo, pero el timbre de la casa comenzó a sonar y debía atender.

Just breatheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora