Prólogo

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Desde pequeño, siempre soñó con ser como su madre: un omega dulce, tierno y amado. Creció admirando la devoción con la que su padre trataba a su madre, los besos en la frente, las caricias en la mejilla, el amor palpable en cada mirada. Aquello le despertaba un cosquilleo en el estómago, una certeza cálida en su pequeño corazón. Cuando creciera, él también encontraría a su alfa, alguien que lo protegería, que lo cuidaría... que lo amaría como su padre amaba a su madre.

A los trece años, su mundo cobró color con un primer flechazo: su mejor amigo. En su mente infantil, no había dudas. Él sería su alfa. Lo marcaría con amor y juntos construirían una vida perfecta. Ya lo imaginaba todo: una casa grande, el fuego crepitando en la chimenea, sus cachorros riendo y jugando mientras él recibía mimos de su amado. Se veía reflejado en sus anillos de casamiento, brillando con la luz del hogar que compartirían. Serían felices, envejecerían juntos. Para él, aquel futuro era inevitable.

Pero el destino tenía otros planes.

La naturaleza le jugó una cruel broma.

El día que descubrió su verdadera naturaleza, sintió cómo su mundo se desmoronaba. No era un omega. Nunca lo sería.

Era un alfa.

Y para colmo... deseaba a otros alfas.

Su sueño de infancia se rompió en mil pedazos. Su identidad, su futuro ideal, todo se desvaneció con una verdad ineludible. ¿Qué quedaba ahora? ¿Podría encontrar su propio camino en un mundo que parecía no haber sido hecho para él?

TuOtraMitad.Com | KakaNaru | OMEGAVERSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora