Fight Together

◇< 17 >◇

Había casi un semana desde la última vez que vi a Max, desde esa discusión que tuvimos no pude contactarme con el, y Yihwa tampoco queria decir donde estaba, aunque muchas veces había querido ir buscarlo a donde sea, Cho me lo impedia haciendome entrenar todo el tiempo.
Faltaban solo 10 días para la pelea y la verdad es que necesitaba Max a mi lado, por eso un día convencí a Cho para que me ayudara a hablar con Yihwa.

—Escucha, invite a Yihwa a almorzar hoy —dijo al teléfono—. Te voy a enviar la ubicación, pero prometeme que si ella se niega a ayudarte dejaras de pensar en Max y te concentraras en la pelea.

—Lo prometo Cho, esta sera la última vez que lo intenté.

—Ok.

Después de terminar de entrenar ese mismo día recibi el mensaje de Cho diciéndome que ya estaba con Yihwa y fui hacía ellos.

—¿Por qué creo que me invitaste a comer solo para que hable con Tul? —cuestionó Yihwa al verme.

—No es así querida —respondió mi amigo  negando con las manos, ignorando el hecho de que yo estaba detrás de él.

—¿Y entonces porque Tul esta detrás de ti ahora mismo? —preguntó Yihwa apuntandome.

—Ok, esta bien, ¡lo siento! —exclamó levantándose de la mesa—. Solo habla con el si, escúchalo al menos.

—Por favor Yihwa, necesito saber algo sobre Máx —le suplique.

—¿Por qué debería hablar de sus asuntos contigo? —cuestionó ella molesta.

—¡No te he demostrado ya que de verdad me importa Max! —exclame mirándola a los ojos.

—No lo sé Tul, no creo que el quiera verte ahora —afirmó ella levantándose de la mesa.

—¡Por favor Yihwa! —le rogué sujetando su brazo—. Estoy realmente desesperado... por favor.

—Esta bien Tul, pero prometeme que cuidarás de el.

—Te lo juro... Max me ha demostrado lo que es amar realmente a una persona, no pienso volver a lastimarlo, te lo prometo —aseguré tomando sus manos.

—Esta bien, pero creo que es necesario que sepas que la relación que Max tenía con el imbécil de Joss Way-ar no es la que tu crees — afirmó sentándose nuevamente.

—¿Qué quieres decir?

—El no tuvo un romance con ese maldito, fue de verdad solo su fisioterapeuta —afirmó—. En realidad Max estaba en pareja en ese momento.

—¿Entonces que paso entre ellos realmente?

—Ellos se habian vuelto amigos, porque Joss a diferencia de ti tuvo casi un año de rehabilitación con el, entonces en ese tiempo se hicieron muy cercanos y parecía que el imbecil ese de verdad apreciaba y confiaba mucho en Max.

—Entonces que es lo que sucedió entre ellos dos, no lo entiendo —afirmé confundido.

—¿Tú sabes verdad? Que si Max no dice que es Gay nadie lo creería.

—Si lo sé, yo no lo podía creer cuando lo supe.

—Así como tú, Joss tampoco lo creía, aunque algunas personas ya se lo habían dicho... hasta que un día encontró a Max en un Bar con su pareja.

—¿Qué sucedió entonces?

—El maldito resultó ser un homofóbico por completo y se molestó mucho al ver que Max era realmente gay, luego de verlos espero a que ambos salgan del Bar y los embosco.

—¿Estas diciendo que ese maldito atacó a Max?

—Así, ese imbécil golpeo a Max hasta dejarlo inconsciente, cuando llegue al hospital el doctor me dijo que le habían roto varias costillas, además tenía un brazo quebrado y casi le rompen una de sus piernas tambien, pero a parte de eso el golpe que recibió en la cabeza fue tan fuerte que lo dejó casi un mes en coma —recordó ella conteniendo las lágrimas.

—¿Es enserio?

—Pero eso no fue lo peor —agregó molesta—. En ese momento ni Max ni su pareja de ese entonces presentaron cargos contra el, aunque yo le insistí mucho para que lo hiciera no lo hizo, no lo quiso hacer.

—¿Por qué?

—Todavía no lo sé, pero después  de que el salió del hospital rompió con su novio y no lo volví a ver.

—¡Eso es increíble! —exclame sorprendido.

—Desde entonces Max no ha tenido ninguna relación sería, ni le gusta que sus pacientes sepan que es gay.

—¡Y ese maldito sigue con su vida como si nada! —exclame aprentando los puños de la rabia que sentía.

—Si, después de que Max se negó a presentar cargos el caso se cerró y ese maldito imbécil siguió como si nada.

—Maldición soy un idiota Yihwa, Max pasó por todo eso y yo pensé que era solo su ex novio.

—Pero ahora ya lo sabes Tul y puedes ir a apoyarlo, solo te pido que no lo obligues a hablar de eso.

—Lo entiendo Yihwa, por favor dime donde encontrarlo, te prometo que no haré que Max pase por un mal momento, pero necesito estar con el, quiero estar con el.

—Ok, solo espero que lo que digas sea cierto, si no lo es, te mataré... —dijo amenazante—. ¿Entiendes?

—Lo sé, gracias.

—Ahora vete, te mandaré la ubicación —afirmó sonriendo—. Y por favor cuídalo.

—¡Lo prometo! —exclame sonriendo y salí corriendo.

No podía ni siquiera imaginar como se sentía Max en ese momentos, pero sabía que quería estar con el, no podía dejarlo solo cuando el nunca me había dejado solo a mi, incluso cuando lo alejé.
Lo único que me quedaba era encontrarlo, no sabía como iba a reaccionar al verlo o si el iba a querer hablar conmigo, pero eso ya no importaba.
Cuando subí al auto Yihwa me mando la ubicación, me sorprendí al ver que el estaba en algun lugar en el Parque Nacional Khao Yai, pero ella ya me había dicho que lo tenía que encontrar y que quizás yo ya sabía donde.
No lo pensé demasiado y solo fui hacía allí, cuando llegué no sabía por donde debía empezar, pero había algo que me resultaba muy familiar del lugar y solo empecé a caminar.
Después de un rato encontre una hermosa cascada en medio del bosque que me resultaba conocida, pero no sabía porque, cuando mire a los alrededores vi a Max en la cima a punto de tirarse al agua, me hizo muy feliz verlo, entonces corrí hacia el.

—¡Estoy contigo! —afirme tomando su mano con fuerza y luego nos tiramos juntos al agua.