Capítulo 14

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Hoy os hablo antes de empezar para aclarar que me he basado en el mito, hay cosas reales y otras que no serán muy fieles pero me gustaba la relación. Espero que os guste!!♡

Natalia se despertó boca abajo y con la cara aplastada en la almohada , el sonido de la alarma a su izquierda y la bruja abrazando su espalda desnuda a la derecha. "Está preciosa" pensó la morena.

Vio como poco a poco se desperezaba deshaciéndose en arrumacos en su espalda. Bien es cierto que podía acostumbrarse rápido a esa buena vida porque si había algo más adorable que Alba Reche, era una recién despertada Alba Reche. Con el pelo revuelto y la cara todavía un poco hinchada, la voz todavía más grave y su calidez era como tener al mismo sol entre las sábanas.

-Buenos días, Nat.- dijo Alba repartiendo besos por sus hombros y restregando la cara contra su piel desnuda.

-Buenos días, gatito.- contestó dándose la vuelta para recibirla con un beso de buenos días.- Conste que adoro este despertar pero, ¿por qué hemos puesto la alarma tan temprano?.- preguntó acariciando la espalda y la cabeza de la rubia disfrutando del calor mutuo.-

-¿Sabías que hay ninfas que solo muestran su cara humana determinadas horas del día?.-

-Pues... no tenía ni idea pero supongo que es un dato...curioso.-

-Y útil.-

-Ajá.- contestó Natalia dándole besos por toda la cara.

-Nat.- llamó su atención entre risas por las cosquillas.- ¡Para para que no salimos de la cama!.-

-¿A qué eso sería un planazo?.-

Alba le dio un beso y se dejó arropar por sus brazos un minuto hasta que hizo uso de su magia y desapareció de la cama para aparecer en la puerta del cuarto y abrirle la puerta a su gata para darle los buenos días al animalillo.

-¡Eh!.- se quejó Natalia en un puchero.- Jo...-

"Es un bebé...2 metros sí, pero un bebé" pensó Alba sacando algo de ropa del armario.

-A tu hermana le está costando convertirse como lo haces tú así que Baba ha tenido una idea y vamos a ir en busca de unas plantas.-

-¿No las venden en el herbolario? ¿Hay que levantarse pronto y dejarme sin mimos?.- protestó de forma infantil.-

-Eres una bebé pero en el herbolario no venden estas cosas.- contestó la rubia apretándole las mejillas para después preparar la mochila.- Pero créeme que te va a gustar, no vamos al campo el busca de hierbas, vamos a ver a Sabela.-

-¿Tendría que conocerla?.- preguntó Natalia curiosa por saber a dónde iban mientras cogía ropa limpia para darse una ducha.

-Es una ninfa.-

-¿Y dónde está esa ninfa?-

-En el mundo espejo.-

Desayunaron rápido porque después de saber a dónde iban Natalia se puso el turbo, desde la primera vez que estuvieron y las visitas que habían hecho para los entrenamientos de su hermana estaba deseando volver y descubrir más de esa curiosa realidad mágica.

Alba las transportó a lo que parecía...¿un jardín botánico?. Lo primero que hizo Natalia fue estornudar, no sentía las náuseas características de ir allí y el ritual de los polvos en la cara que Alba se encargaba siempre de soplarle en la cara.

-Madre mía, acabamos de matar a mi olfato.- dijo Natalia siguiendo el paso acelerado de la rubia, las plantas abrían camino a su paso y si no estaba cerca de ella se comería alguna.

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⏰ Última actualización: Aug 30, 2020 ⏰

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