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aun estuvimos bastante rato con los batidos, yo termine dejándome casi la mitad por que iba a reventar y no podía más, estuvimos durante no sé cuánto rato charlando, y me volví a dar cuenta de que Ryu cada vez se me acercaba más, y yo a la vez me alejaba.

-te apetece que nos vayamos a otro lado? - me dijo ryu poniendo su mano encima de la mía.

note que su mano estaba calentita, sin embargo, mi mano a pesar del calor que hacía en aquel sitio estaba helada.

fue a pagar y cuando volvió me dio la mano para ayudarme a levantarme, pero para mi sorpresa después de aquello no me soltó, salimos del bar y seguía con mi mano entre la Suya, las parejas que paseaban se nos quedaban mirando, yo intentaba esconderme detrás de su espalda, evitando así que la gente viera el enrojecimiento de mis mejillas.

llegamos a una zona donde nunca había estado, y allí estaban ellos, o "el" mejor dicho.

el chico amigo de Ryu con el que había tenido problemas. me pare en seco, haciendo que Ryu se parara en seco, al estirar de mi brazo.

-que hacemos aquí, o, mejor dicho, que hace él aquí? - le dije forcejeando para que me soltara la mano.

-vamos venga, es solo un amigo, y no te volverá a hacer nada. - dijo volviendo a agarrarme con más fuerza de la muñeca, estaba apretando tan fuerte que me empezaba a hacer daño. -no después de lo que le hizo el zorro de tu amigo.

y no sé en qué momento se puso detrás, pero en el mismo momento que Ryu me solto la muñeca, yo estaba haciendo tanta fuerza, que me fue para atrás, y alguien me clavo los dedos en los hombros para que no me cayera hacia atrás.

-hombre, si está aquí la mocosa!!. - dijo clavándomela más aun los dedos en la parte de atrás de la espalda.

-Dejadme en paz!!. - chille y en ese momento todos se me quedaron mirando en la calle.

-akane, no te pongas así, era solo una broma. - escuchaba decir a Ryu mientras mis ojos pasaban de un lado a otro.

-no te vuelvas a acercar a mí. - le dije mientras me daba media vuelta para irme.

-NO!! tú no te vas a ningún lado. - escuche que decía Ryu mientras me volvía a coger esta vez por las dos muñecas y me empujaba a entrar en un callejón entre dos edificios, allí no llegaba La Luz de la calle principal, y no veía nada.

solo sentía como Ryu me agarraba las dos muñecas por encima de la cabeza y cada vez se acercaba más a mi cuello, forcejeaba y daba patadas con las piernas, pero nada parecía afectarle por muy fuerte que le diera.

-akane, me gustas, no puedo dejar que te vayas así, sal conmigo por favor. - me dijo acercando su boca a mi cuello.

sentí algo húmedo deslizarse por mi cuello y después volviendo a subir hasta llegarme al lóbulo de la oreja.

ahora no había nadie allí para salvarme, y tenía que hacerlo por mis propias medidas. una de mis pulseras escondía una aguja, tan fina como para no notarla, pero suficiente como para infligir daño en una situación apurada... como estaba ahora mismo, logre sacarla con la otra mano, y no pudiendo mover los brazos arañe una de las manos de ryu con ella, el gruño y aflojo un poco su agarre, lo que me dio tiempo para deshacerme del agarre y propinarle un puñetazo que lo dejo tumbado en la pared contraria.

-me miraba desde el suelo, limpiándose la sangre de la boca con el puño. - yo a punto de las lágrimas le dije mis últimas palabras a aquel sujeto.

-cómo te vuelvas a acercar a mí no volverás a caminar. - era lo único que me venía a la cabeza como amenaza.

Ranma 1/2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora