7:15.

2.2

Azoté la puerta de mi habitación y la cerré a mis espaldas, contenta  de haber terminado la difícil discusión que tuve con mi madre. Pasé mis dedos por mi cabello y me dejé caer sobre mi cama soltando un gran suspiro.

Mi madre tiene estas altas expectativas para mí, y siempre las ha tenido. Ella quería que yo estudiara intensamente y obtuviera buenas calificaciones para así poder entrar en una gran universidad y ser igual de exitosa que ella y mi padre. Esa era una de las razones principales por las que me quitaron las llaves de mi auto cuando metí al chico -o Jaden aparentemente– a la casa. Ella tenía miedo de que pasara mucho de mi ultimo año asistiendo a fiestas en lugar de concentrarme en mis calificaciones.

Pensé que todo eso era ridículo. En los pocos meses en los que conozco a Jaden he sido capaz de mantener mi enfoque en la escuela tanto como en él. Ya no salía a fiestas y si pasó algo fue que mis calificaciones mejoraron, porque siempre pensé que subir mis calificaciones me iba a devolver mis llaves del auto.

Simplemente no comprendía qué era lo que mi madre tenía en contra de Jaden. Todos estábamos al tanto de que Jaden tomó malas decisiones en el pasado, pero precisamente por eso es el pasado. Ahora él es diferente y si mi madre pudiera darle una oportunidad lo entendería. Ella pensaba que diciéndome que tenia prohibido verlo mas tiempo iba a detenerme, pero ese no fue mi caso. El odio que mi madre le tenía a Jaden solo logró que yo lo quisiera mas.

Fui interrumpida de mis pensamientos cuando escuché golpecitos en mi ventana, la misma ventana por la que Jaden se había metido un par de veces antes. Me levanté y llegué hasta allí, justo a tiempo para mirar una pequeña piedra rebotar en el cristal. Lentamente abrí la ventana, asustada de que Jaden me fuera a pegar accidentalmente con un roca en el rostro.

–¿Qué haces aquí?– susurré hacia abajo.

–Estoy aquí para disculparme con mi novia.– Jaden gritó con cuidado, mirando un poco alrededor como si tuviera miedo que mi madre fuera a salir de los arbustos.

Mordí mi labio inferior, preguntándome si debía de correr el riesgo de dejar que Jaden subiera o no. Suspiré, abriendo la ventana por completo. –Sube.

Sin mucha gracia Jaden trepó por el lado de la casa, tratando de no hacer mucho ruido mientras lo hacia. Había hacho esto una vez antes, pero sus habilidades para escalar no había mejorado mucho desde ese entonces. Finalmente llegó a mi ventana y prácticamente rodó en la habitación, la cabeza primero y aterrizando en el suelo con un gran golpe.

–Hola.– Jaden se puso de pie, sacudiéndose.

–Hey.– asentí.

–Esto es para ti.– dijo Jaden, rebuscando por sus bolsillos y sacando un pedazo de papel arrugado. Leí "Un día libre".

–¿Que significa esto?– pregunté, riendo suavemente. Doble el papel por la mitad y lo puse en mi bolsillo trasero antes de cruzar los brazos sobre mi pecho, esperando una respuesta.

–Es un cupón de "Jaden lo siente mucho, así que le está ofreciendo a Kate un día libre donde hace lo que quiera sin quejarse."— explicó Jaden, con una amplia sonrisa en su rostro.

–Oh, así que tú pequeño cupón solo va a arreglarlo todo.– retuve una sonrisa, encontrándolo totalmente adorable.

–Lo siento mucho, Kate, por todo. Sobre meterte en problemas con tu madre, y quitarte las llaves, y...– se adelantó Jaden, tomando ambas de mis manos entre las suyas. No dejaba de divagar hasta que yo lo corté, con miedo a que mi madre lo escuchara abajo.

–Jaden.– lo detuve, –No pasa nada. Siento haberte atacado antes, estaba tan frustrada con mi madre que lo desquité contigo.

–Está bien, de verdad. Yo solo... dios, lo siento.– dijo Jaden, bajando la voz. Se acercó y apoyó su frente contra la mía, para que pudiéramos hablar en silencio sin la oportunidad de que alguien fuera de la habitación pudiera escucharnos.