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Erick me prometió que irá a la empresa apenas el moretón mejore, no quiere que nadie sospeche ni especule de lo que le hizo su esposo.

Me estoy poniendo ansioso porque han pasado varios días ya, y todavía no regresa. Me ha asegurado que todo está bien y que está tomándose unos días porque se ha sentido un poco enfermo últimamente.

Me jode la cabeza pensar que su marido pudo haberlo golpeado nuevamente, aunque me jure que no es así. En verdad espero que sea cierto, porque he sentido hartas ganas de desfigurarle la cara al recordar el rostro magullado de Erick.

Sé que eso mandaría todo a la mierda pero me calcome la impotencia de no poder hacer nada, la única razón por la que no he hecho ninguna locura aún es porque Erick me ha pedido que esté tranquilo.

Me levanto para ir al baño y de regreso me paso por la oficina de Richard, no ha sido tan trajinado el día así que supongo que no está mal que socialice un poco.

-¡Hey!- digo abriendo la puerta.

-Puta madre Joel ¿por qué nunca tocas?

-¿Por qué tengo que hacerlo?- digo para fastidiarlo.

-Porque tal vez podría estar jalándomela viendo porno.

Me río escandalosamente porque sí es capaz de hacerlo.

-¡Rich!- dice Zabdiel entrando también.

-¿Por qué carajos nadie toca la puerta?

-Lo siento Joel no sabía que estarías aquí- dice mirándome.

Siento que estoy sobrando y me despido para salir, pero el moreno me interrumpe.

-¿Quieres hablar Zab?- le pregunta al rubio.

Noto la duda en él pero antes de decir o hacer algo Richard vuelve a hablar.

-Puedes hacerlo delante de Joel, él es de confianza.

El ambiente se torna un poco incómodo y veo que tanto Zabdiel como yo queremos irnos pero Richard está empecinado en que no.

-Podemos hablar los tres, tú te follas a Chris y Joel a Erick.

-¡RICHARD!- gritamos al tiempo.

-¿Qué?, ya están a mano- dice viéndonos a los dos.

Giro hacia Zabdiel y él está mirándome probablemente con el mismo pánico con que lo miro yo a él. La expresión de su ojos cambia y siento cómo empiezo a relajarme.

-¿Es así?- me pregunta.

-Sí, es así- responde Richard girando los ojos -ahora dinos, ¿qué pasó?.

-Estoy preocupado por Chris- dice después de soltar un suspiro.

-¿Le pasa algo?- pregunto.

-Está en la oficina del señor Vera- pasa un pañuelo por su frente para secar el sudor -le está gritando feo.

El temblor en sus manos me indica que está más que preocupado, se ve realmente nervioso.

-Cálmate y dinos qué sucedió- dice Richard guiándolo hasta una silla.

-Llamaré a Ginna para que traiga un té- agrego sacando mi teléfono.

-Parece que hubo un error en la facturación del pedido que se entregó, es la firma de Chris la que está ahí.

-Estoy seguro que el error fue del inútil de Emilio- dice Richard enojado.

-Ya lo han llamado a él, pero ha dicho que es responsabilidad de Christopher revisar todas las facturas que él le entrega.

-No es más que un lame botas el muy imbécil- expreso uniéndose a la conversación después de colgar.

-Chicos Chris cometió un error y el jefe estaba demasiado enojado, en verdad tengo miedo.

-No es justo que Chris pague las consecuencias, Emilio viene cagándola prácticamente desde que entró y jamás le han hecho un llamado de atención- digo indignado porque es verdad.

-Zab, ¿tú crees que pueda ser despedido?- pregunta Richard.

-Tal vez, pero no es eso lo que me preocupa.

-¿Y entonces qué?

-Oigan no sé si deba contarles esto, lo que pasa es que él...

Los toques en la puerta nos interrumpen y Ginna entra con el té que le solicité.

-Aquí tienes Joel, espero que lo disfrutes- dice sonriéndome.

-Muchas gracias- digo al recibirlo -ten Zab, esto te hará sentir mejor.

Sé que está enojada, pero no puedo preocuparme por ella en estos momentos, la situación de Christopher es mucho más grave.

-Está muy bueno, gracias Ginna- dice Zabdiel después del primer sorbo.

Ella sale casi tirando la puerta y nosotros volvemos al tema en cuestión.

-¿Que es lo que te preocupa?- pregunto.

-Su estado emocional es más importante en este momento, no quiero que le grite más.

-¿Por qué?- cuestiona Richard.

-Es que él está... emb-embarazado.

El silencio que se instaló en la oficina duró sólo unos segundos.

-¿En serio lo preñaste?- no sé si reírme o reprender a Richard por las cosas que dice.

-Esto es más grave aún- digo más pensándolo, pero sé que me han oído -conoces las políticas de la empresa.

-Sí- me responde -nunca debí involucrarme con él pero pasó, se supone que yo iba a renunciar y luego formalizar la relación con él, pero no se piensa muy claramente cuando se está enamorado.

Lo entiendo.

Lo que dice me toca profundamente porque tampoco debí involucrarme con Erick, pero pasó. La imagen de Er con un bebecito mío en su panzita se forma en mi cabeza y mi corazón se acelera de solo pensarlo. Me desconecto totalmente de la realidad que ni siquiera sé lo que están diciendo los otros, sus voces suenan como murmullos lejanos mientras yo simplemente me pierdo en mi propia imaginación.

Sé que no va a ser así ahora, pero tengo la esperanza de que lo sea después, cuando Erick sea libre y pueda estar conmigo.

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Les quiere:
Lía. ❤️

¿Cuál Es Nuestro Título? |Joerick|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora