Capítulo 1

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Al escuchar el sonido de la voz de su padre, Kim Taehyung interrumpió la conversación que estaba manteniendo con un gerente de una nueva empresa y se giró hacia él

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Al escuchar el sonido de la voz de su padre, Kim Taehyung interrumpió la conversación que estaba manteniendo con un gerente de una nueva empresa y se giró hacia él.

—¿A quién has encontrado? —el hecho de que su padre hubiera hecho el esfuerzo de acudir aquella noche allí era una buena señal. Unos meses atrás era un hombre roto, reacio a salir de su aislada villa tras su segundo y doloroso divorcio en seis años.

—Al doncel perfecto para ti —su padre sacudió la cabeza con incredulidad, pero se le formaron unas arruguitas alrededor de los ojos cuando sonrió—. A veces me pregunto si de verdad eres mi hijo. Este lugar está lleno de mujeres y donceles hermosos, pero ¿a qué te dedicas tú? A hablar con hombres aburridos vestidos de traje. ¿Qué hice mal contigo?

Al ver la sorpresa reflejada en los ojos del gerente, Taehyung se disculpó educadamente y se llevó a su padre a un aparte. —Para mí, esta noche es un asunto de negocios. Celebro este baile todos los años. Su propósito es hacer que los ricos y famosos se desprendan de parte de su dinero.

—Negocios, negocios, negocios —visiblemente exasperado, su padre alzó las manos al cielo—. ¿Los negocios te dan calor por la noche? ¿Te hacen la cena? ¿Crían a tus hijos? Tú siempre estás con los negocios, Taehyung, ¡y ya eres millonario! ¡Tienes dinero de sobra! No necesitas más. ¡Lo que necesitas es una pareja!

Varias cabezas se giraron hacia ellos, pero Tehyung se limitó a reírse.

—Esta noche no estoy ganando dinero, lo estoy repartiendo. Y estás asustando a la gente. Compórtate. Además, no necesito que me busques pareja.

—¿Por qué? ¿Ya has encontrado a alguien por ti mismo? No, claro que no. Al menos, no al adecuado o adecuada. Pierdes el tiempo con mujeres y donceles de una noche.

—Por eso las elijo —murmuró Tehyung, pero su padre frunció el ceño con desaprobación.

—¡Ya sé a quién escoges! Lo sabe todo el mundo, porque sale en todas las revistas. Una semana es Jennie, la siguiente una tal Minho... Ninguno te dura más de unas semanas, y siempre están muy, muy esqueléticos —con su fuerte acento marcado Kim Jong Woon emitió un sonido de desaprobación—. ¿Cómo vas a ser feliz con alguien que no disfruta comiendo? Una persona así, ¿cocinaría para ti? No. ¿Disfrutaría de la vida? No, por supuesto que no. Las personas que escoges son como atletas en la cama, pero ¿se ocuparán de tus hijos? No.

—No necesito a alguien que cocine. Tengo personal para eso —Taehyung se preguntó por un instante si después de todo no habría sido un error invitar a su padre a aquel evento en particular—. Y no tengo hijos de los que deba ocuparse un esposo.

Su padre resopló exasperado.

—¡Ya sé que no tienes hijos, y yo quiero que los tengas! ¡Es a eso a lo que me refiero! Tienes 27 años, ¿y cuántas veces te has casado? Ninguna. Yo tengo setenta y tres, y me he casado tres veces. Ya es hora de que empieces a alcanzarme, Taehyung. ¡Hazme abuelo!

𝚁𝚎𝚕𝚎𝚗𝚝𝚕𝚎𝚜𝚜 𝚔𝚘𝚛𝚎𝚊𝚗'𝚜 (ⱽʰᵒᵖᵉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora