Atraído por el brillante cabello rojo y las interminables piernas del joven que estaba mirando el escaparate, Kim Taehyung pisó el freno de golpe y detuvo bruscamente el coche.
Ignorando las cabezas que repentinamente se giraron, se quedó mirando fijamente al doncel.
¿Sería él? ¿La habría encontrado por fin, o sólo se estaba haciendo ilusiones?
Parecía distinto. Preguntándose si no habría cometido un error, Taehyung entornó los ojos y se imaginó a aquel doncel con el cabello más ordenado, debido al inteligente corte de traje de alta costura.
Y entonces sus ojos se encontraron con los suyos, y toda duda desapareció. Incluso a aquella distancia, Taehyung captó aquel destello azul-zafiro, el mismo color inusual que había atraído su atención la fatídica noche del baile.
Aquellos ojos eran inolvidables.
Por fin lo había encontrado. ¿Y dónde si no comprando en uno de los barrios más caros de París?
Aquél era el primer sitio en el que debió decirle a su equipo de seguridad que buscara, pensó Taehyung con cinismo, preguntándose quién sería el pobre engañado que le habría proporcionado el dinero que sin duda estaba a punto de gastar.
El hecho de haberse visto obligado a buscarlo hizo que en su interior se desatara una explosión de ira. Apagó el motor y salió del coche, mostrando la misma indiferencia por los carteles de «no aparcar» que por la boquiabierta audiencia que observaban sus movimientos con lujurioso interés.
En aquel preciso instante, Taehyung no estaba interesado en nadie excepto en quien lo estaba mirando fijamente, y casi se rió al ver el asombro en sus ojos.
No le sorprendía que le asombrara volver a verlo, teniendo en cuenta el modo en que se habían despedido.
Él también estaba asombrado. En circunstancias normales, seguía su camino evitando a personas como él. Si alguien le hubiera dicho un mes atrás que iba a utilizar todos sus contactos para seguir la pista de alguien cuyo comportamiento le asqueaba, se habría reído.
Pero allí estaba, a punto de alegrarle el día a él. Gracias a un giro del destino, estaba a punto de darle todo lo que había soñado y todavía más. Mientras se acercaba con decisión, Taehyung se consoló con la certeza de que aunque él había ganado la primera ronda, la segunda, la tercera y la cuarta serían suyas.
Aquel doncel estaba también a punto de descubrir la verdad que se escondía tras el famoso dicho: «ten mucho cuidado con lo que deseas...».
Él había dejado perfectamente claros cuáles eran sus deseos, pero Taehyung estaba convencido de que para cuando hubiera terminado con él, desearía haber escogido un hombre menos capacitado para defenderse. Taehyung apretó los dientes, se sentía furioso y frustrado por la posición en la que ahora se encontraba. Sin duda se trataba de la clase de doncel que dedicaba su vida a chuparles la sangre a los que eran mejor que él. Un doncel sin escrúpulos ni moral. Lo más bajo de lo más bajo, y la certeza de saber que le habían manipulado por primera vez en su vida, no contribuyó a calmar su furia.
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𝚁𝚎𝚕𝚎𝚗𝚝𝚕𝚎𝚜𝚜 𝚔𝚘𝚛𝚎𝚊𝚗'𝚜 (ⱽʰᵒᵖᵉ)
FanfictionTaehyung creía que Hoseok era un ambicioso caza fortunas que había puesto los ojos en él. Pero entonces descubrirá el gran error de sus arrogantes teorías sobre el joven de bonita sonrisa. Vhope Taehyung -top Hoseok - bottom ADAPTACIÓN