Taehyung era muy distinto a su padre. Recordó lo encantado que se había mostrado el anciano cuando creyó que su hijo estaba enamorado. Hoseok se quedó mirando desde el balcón las calles de París. Podía divisar el Sena deslizándose a través de la ciudad, y la brillante estructura de la Torre Eiffel centellando bajo el sol.
Y al otro lado de la ciudad, en la parte más sucia, barata y olvidada de París, estaba la habitación que había dejado libre aquella mañana. El precio se había vuelto prohibitivo para un camarero. Había llegado el momento de moverse.
¿Por qué no Corea? No tenía otro lugar donde ir. No necesitaba estar en ningún otro sitio.
¿No resolvería eso todos sus problemas a corto plazo, además de servir para ayudar a un hombre que verdaderamente le importaba? Si su presencia ayudaba a su recuperación, ¿no era motivo suficiente para ir?
Podría quedarse todo el tiempo que lo necesitaran, y luego utilizar Corea como base para su próxima aventura. El único problema era que tendría que estar en compañía de Taehyung. Él lo hacía sentirse más incómodo que cualquier hombre que hubiera conocido nunca.
Pero él estaría trabajando. Añadiendo más ceros a sus billones. Lo único que Hoseok tendría que hacer durante el día sería tumbarse al lado de la piscina y charlar con su padre.
—En algún momento tendrás que decirle la verdad.
—Por supuesto, cuando esté más fuerte. Al parecer, el hecho de haber visto la muerte de cerca le hace pensar únicamente en que no le he dado nietos. Y se los daré en algún momento, pero cuando encuentre a la persona cuyos genes puedan llevar mis hijos con orgullo —el tono de Taehyung no le dejó lugar a dudas de que no permitiría que los genes de Hoseok se acercaran a su descendencia.
Aquélla era una actitud que le resultaba de lo más familiar.
Él nunca había encajado en ningún sitio. Toda su vida se había sentido fuera de lugar. Siendo un doncel había vivido al filo de un mundo al que no pertenecía. Y en pocas ocasiones le habían mostrado amabilidad.
Sin embargo, el padre de Taehyung había sido amable con él.
—Lo haré —aseguró con firmeza—. Si crees que puede ayudar, lo haré.
—No he dudado en ningún momento que lo harías.- los ojos de Taehyung brillaban con desprecio burlón.- Por lo que tengo entendido, tú nunca gastas tu dinero si puedes gastar el de otra persona.
Hoseok se puso tenso.
—Hago esto por tu padre.
—Por supuesto que sí. Tu generosidad es legendaria.
—Me da igual lo que pienses —Hoseok se sentía casi aliviado de no ser Seokmin—. Tu dinero no me interesa.
Lo que la había atraído de Taehyung era algo completamente distinto. Una poderosa conexión que no podía explicar. Una química que se burlaba de ambos, porque ninguno de los dos quería explorarla.
ESTÁS LEYENDO
𝚁𝚎𝚕𝚎𝚗𝚝𝚕𝚎𝚜𝚜 𝚔𝚘𝚛𝚎𝚊𝚗'𝚜 (ⱽʰᵒᵖᵉ)
FanfictionTaehyung creía que Hoseok era un ambicioso caza fortunas que había puesto los ojos en él. Pero entonces descubrirá el gran error de sus arrogantes teorías sobre el joven de bonita sonrisa. Vhope Taehyung -top Hoseok - bottom ADAPTACIÓN