𝐒𝐔𝐄𝐍̃𝐎 𝐄𝐓𝐄𝐑𝐍𝐎 ༐ 𝐘𝐄𝐎𝐍𝐁𝐈𝐍

⒈⒉ Monster

Yeonjun esconde su ira y cuando al fin lo tiene frente a sus ojos, estos se oscurecen y su mirada se vuelve fria.

-Vaya, enserió eres un maldito descarado.

Kai parece sorprendido por su llegada pero eso no evita que lo mire con desprecio.

-Para empezar, ¿qué carajos haces aquí?

-Eso te pregunto yo a ti -dice el rubio entre dientes -, ¿esas flores son para Soobin?

Nadie podía darle obsequios a Soobin más que él, la idea de que Kai se haya atrevido darle flores lo estaba enloqueciendo. El castaño suelta una diminuta risa y niega continuamente, no creyendo lo que escucha.

-Y a ti que mierda te importa, dime que es lo que quieres.

-Que desaparezcas de mi vista, podrás engañar a todos pero no a mí -sonríe con falsedad y Kai frunce el ceño confundido -, sabes... Soobin nunca tendrá ojos para tí.

El menor aprieta la mandíbula luchando con sus propios instintos.

-Tienes que aceptar que me ama a mi Huening, ¿entiendes lo que te estoy diciendo?

-No me hagas reír, él ya no te ama ¿Por qué crees que renunció a ti? -pregunta Kai con burla -, se dio cuenta de la clase de imbécil que soporto todo este tiempo.

Yeonjun observa hacia la calle y luego el cielo, piensa que es un buen dia para golpear a alguien.

-¿Algo más?

-Lárgate antes que yo mismo te saque de aquí, no tienes nada que hacer en este lugar.

Kai no era de esas personas que resolvían sus problemas a golpes o insultos, no recurría a la violencia porque nunca necesitó de ello, tenía ese autocontrol que no muchos poseían, sin embargo cuando le da la espalda a Yeonjun para irse, todo rastro de compasión desaparece.

-No eres nadie para saberlo pero, Soobin y yo regresamos. -dice Yeonjun con gran satisfacción, sonríe triunfante cuando nota los ojos confusos del menor. -, todo está mucho mejor entre nosotros, después de todo, él me sigue amando.

Kai no podía creerlo, siente una punzada en el pecho y como sus iluciones junto a sus anheladas esperanzas con Soobin se desvanecen por completo.

-M-mientes, él no regresaría contigo..

Yeonjun disfruta de su rostro ausente y su voz débil, complacido porque puede ver la derrota en el rostro de kai. Siempre sospechó que había algo más en él, algo que le decía que no debía brindarle oportunidad alguna porque la aprovecharía, ahora lo tiene claro, HueningKai quería quitarle a su chico.

-Jamás podrás sustituirme, nunca obtendrás algo más de Soobin ¿entiendes? -mientras habla se va acercando a kai de manera amenazante -, él me eligió a mi, duela a quien le duela.

Kai lucha contra las lágrimas en sus ojos y cuando cree recobrar valor para enfrentarlo es empujado bruscamente por Yeonjun y cae al suelo.

-No hay nada que pueda separarnos, ni siquiera tú.

-El hecho que Soobin siga contigo es porque no lo dejas en paz, -Kai busca defenderse pero se sentía tan humillado que simplemente quería desparecer y tragarse el nudo en su garganta.

-Eso es lo que tú crees, pero entiendo, solo eres un jodido niño mimado qué no sabe valerse por si mismo -Yeonjun suelta cada palabra con veneno y cuando esta a centímetros de su cuerpo, mira aquel ramo de flores en el suelo y las levanta con diversión -, te aseguro que ni regalándole lo más valioso, obtendrás su atención.

Yeonjun no lo piensa mucho y destruye las flores exóticas hasta dejarlas tan miserables como lo era el rostro de kai. El castaño observa los pétalos tirados por todo el suelo, junto con aquella tarjeta que había escrito para su amigo.