PROHIBIDA ATRACCIÓN

DE INTIMIDACIÓN A PESADILLA

POV DE SAKURA

No me lo podía creer, me estaba amenazando, tenía que huir o sino él se saldría con la suya.
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Ya pasaron muchos días, he perdido la cuenta, sólo entra para alimentarme y saciar mi sed, no me dice ni una palabra y eso me asusta, temo que en cualquier momento vaya a entrar a la habitación y abuse de mi.

En ese momento se escucha el cerrojo abriendo y la puerta chillar, se me pone la piel de gallina, puedo sentirlo que se aproxima a mi, toca mi brazo, es un toque sutil pero me estremezco, tenía miedo mucho miedo, podía sentir otro toque, que es algo frío pero me tranquilizó rápidamente cuando me doy cuenta que sólo es agua con una esponja.

-¿Qué haces? - pregunto aunque ya se la respuesta, sólo quiero mantener la comunicación con él a ver si así puedo convencerlo de que me deje ir.

-te estoy bañando, tienes días sucia o prefieres hacerlo tú?- me contestó y paro rápidamente la acción

--sí, prefiero hacerlo yo, desencadename para que pueda hacerlo.- estaba temblando como nunca antes, todo esto me aterraba, él me aterraba.

-lo haré, pero debo advertirte que no podrás salir de la habitación y aún si lograrás hacerlo, no encontrarías la salida en el inmenso laberinto, sólo yo conozco el camino, no te conviene luchar, sólo me harás más fácil la toma de mi decisión.

-prometo que no lo haré no trataré de huir, pero por favor sueltame y piensa seriamente en dejarme  ir, no hagamos esto así de difícil, no arruines lo que queda de nuestra amistad- suplique.

-¡Callate Haruno! o sino no dejaré que salgas de esté aposento- me gritó y apretó fuertemente mi mano.

-esta bien, basta.- dije levemente

Entonces me soltó de los amarres y pude sentirme feliz por un breve instante, pues tenía todas entumidas mis manos y el cuerpo entero, tenía días estando acostada, solo levantaba mi cadera cuando él me ponía el cómodo, con mi poca cantidad de chakra pude destensar los músculo de mis manos y piernas, no tenía energía suficiente para desencadenarme, estaba bloqueada con los sellos que puso el Uchiha.

Como pude me levanté, me sentía cansada, desorientada, pero pude moverme, eso era una ganancia, salimos del cuarto y una luz me destello, había estado mucho tiempo en la oscuridad así que cuando mis ojos pudieron acostumbrarse a la luz, vi que era un lugar alumbrado sólo por antorchas, muchos cuartos, parecía una cueva con muchos pasillos, caminamos unos minutos y estábamos frente a una puerta grande de madera, al entrar al cuarto era muy amplia y luminosa, con una cama grande más que en la que estaba antes, dos búros y una lámpara, frente de la cama había otra puerta, supuse que era el baño.

--este será tu nuevo cuarto, en frente de ti esta el baño y dentro de ese armario hay ropa limpia.- me dijo fríamente, algo muy usual de él.

No dije nada sólo entre al baño, era sencillo como toda la habitación pero tenía lo esencial. Abrí la ducha y me metí en la regadera, que rico se sentía el agua caliente sobre mi cuerpo, sentirme limpia era una gran bendición,  divisé algunos aceites y esencias, por lo que decidí meterme a la bañera y quedarme unos minutos ahí, por poco se me olvidaba que estaba recluida con él.

Salí de mi letargo cuando escuché que tocaron la puerta y una voz que me decía que ya era hora de salir. No quería hacerlo pero no le daría motivos para que perdiera la calma.

Tenía una toalla enredada fuertemente en mi cuerpo, mire ligeramente por la puerta y vi que estaba sola, me sentí aliviada de estar sola así que caminé al armario pero vi que sólo había ropa interior y una bata de seda que me cubría hasta los glúteos, era muy pequeña. No tenía otra opción más que utilizar lo unico decente que había.

Al recostarme en la cama pude tomar en cuenta mis manos y piernas, que  estaban moradas por las ataduras, me dolían junto con mi cuerpo, me estire un par de minutos y caí rendida a los brazos de morfeo, estaba exhausta.

Desperté porqué Sentí una mano recorrer mis piernas y automáticamente me desperté, vi una silueta con los ojos rojos tan rojos como la sangre, era Sasuke, cerré rápido los ojos no quería caer en algún tipo de mangekyou.

-eres lista, pero eso no te va a servir de nada, esta noche es la toma de tu elección, ya sabes de que forma será?- me dijo mientras se me acercaba.

Me quedé helada, temblando, no sabía que decir, mi cuerpo no estaba reaccionando quería huir pero mis piernas no respondían, el miedo me estaba paralizando por completo, el venía hacía mi muy lentamente, me estaba torturando mentalmente, quería provocarme terror, entonces lo entendí, su forma de someterme era intimidandome, eso le causaba placer pude sentirlo.

Le Solté un golpe con la poca energía que tenía y comencé a correr, pero él fue más rápido y me tomó del cabello, me jalo fuertemente hacia la cama.

-¿A dónde vas Sakurita? te crees muy lista, pero sólo eres la misma niña tonta y patética que conocí- dandome una bofetada tras otra, estaba furioso quería hacerme el suficiente daño; comenzó a besarme bestialmente, mordiendome los labios para que yo le diera la entrada a mi boca y darle paso a su lengua, en el momento que sentí su asquerosa lengua reaccione velozmente y lo mordí, no iba a dejarme, me iba a defender con el poco chakra que me quedaba, aún si moría iba a ser peleando.

Claro que eso no se lo esperaba y sólo lo enfureció, me abofeteo una vez más y empezó a morder mi cuello, mis brazos, mis senos, hombros,piernas,  yo no dejaba de retorcerme, trataba de levantarme y quitármelo de encima, aparte que me cubría de los golpes en mis costillas y estómago, el exceso de adrenalina no me permitía sentir dolor.

-veo que ya tomaste tu decisión Haruno, tendrás lo que has pedido, iba a tener piedad de ti, pero después de esto, haré que pases el mayor sufrimiento una y otra vez, día tras día, hasta que te preñes.- me lo decía mientras me mordía mi cuello fuertemente tanto que me hizo sangrar.

Yo contenía las lágrimas durante la lucha, estaba gritando, pidiendo auxilio, mientras el razgaba mi ropa, estaba asqueada, quería vomitar, salir corriendo, pero me tenía atrapada no sólo físicamente también mi chakra, lo tenía con sellos que logró hacer mientras yo aún dormía, estaba a su merced, desnuda, tocandome todo, pasando su lengua por todo mi cuerpo, algunas veces me mordía otras me rasguñaba, estaba rompiendome de todas las formas posibles, iba a perder mi virginidad con él, de esta asquerosa y nefasta forma, el niño que conocí,del que me enamoré se había esfumado, sólo quedaba un monstruo, dolía, dolía demasiado todos los recuerdos que pasaron en cámara rápida por mi mente, todo lo que vivimos como equipo 7, no resistí, lloré amargamente esperando lo peor, él estaba encima mío podía sentirlo en mi entrada, estaba a nada de consumar el acto. Sólo cerré mis ojos y esperé a que pasará, me había hecho a la idea de que esto pasaría.
pero sólo sentí que el peso extra que tenía encima no estaba y escuche una voz familiar.

- ¡SAKURA, SAKURA! ESTOY AQUÍ, SÓLO RESISTE.

Esa voz la conozco, entonces abrí mis ojos,no me lo creía era Kakashi quien me hablaba, lo último que vi fue que tenía al Uchiha agarrado del cuello y lo golpeaba una y otra vez, eso vi antes de caer desmayada.