Mat19:48h Sara: Yo no podré ir. Te lo he pasado por si te interesa ir a ti.
Joder, ¡qué decepción!
Cuando vuelvo con Tom la chica ya no está pero él sonríe encantado y yo suspiro aliviado de que no quiera matarme por haberme olvidado de él antes.
—Estela —murmura con tono de bobo.
—¿Estela es la que presenciará como haces skí acuático y, primero sales volando, después haces planchazo contra el agua y, por último, alguien tiene que recogerte de las profundidades del mar y hacerte un boca a boca frente a ella?
Tom se parte de risa.
—Vale, ski acuático descartado. ¿Qué tal si la convenzo para dar un paseo en bici?
—Fantástico e ideal, si no fuera porque le has dicho que te va el riesgo ¿en qué pensabas?
—En esos ojos color miel que desprendían tanta ternura y esos labios tan dulces y besables y...
—Tío, ¿estás bien? —cuestiono empezando a preocuparme—. ¿Te has dado en la cabeza o algo?
Reviso su frente y su cabeza en busca de contusiones o heridas pero no encuentro nada.
—Ha sido un flechazo. Como en las películas cuando ella tropieza y se le cae todo y él viene a salvarla y recoge sus libros...
—Solo que has hecho la croqueta cuesta abajo y ella ha tenido que traer alcohol para desinfectarte las raspaduras, pero sí, muy romántico todo —ironizo divertido y a Tom le cambia la cara.
Ups.
—Ahora que lo dices ¿¡me puedes explicar qué cojones hacías con el puto móvil para ignorarme como lo has hecho!?
—Em... Me ha escrito Sara —comento sonriendo con ilusión.
—¿¡Quién demonios es Sara!?
—Es como Estela para ti: un crush.
—¿Un clush? ¿eso qué coño es? —cuestiona intrigado intentando ponerse en pie.
—Crush —repito corrigiéndole.
—¿Ruj?
—Crush —insisto pronunciando todo lo claro que puedo y subiendo el volumen un poco sin querer.
—¿Trush?
—Mira, ¡déjalo! —pido vencido y agobiado.
Tom comienza a reír a carcajadas y yo niego con la cabeza al darme cuenta de que me tomaba el pelo. Claro, ¡cómo no!
—Crush el que me he dado yo contra el suelo por culpa de tu crush con la tía esa que te ha escrito.
—No ha sido culpa de Sara, ha sido culpa tuya por ser tan poco flexible. Tío, no entiendo cómo estás tan en forma con lo patata que eres —me quejo con cierta envidia. Yo tengo que entrenar un montón para estar igual de en forma que está él sin hacer absolutamente nada.
—Genética —responde orgulloso.
Volvemos a casa con las deportivas puestas y los patines colgados del hombro. Hemos tenido suficiente riesgo por hoy. Además Tom se queja del tobillo y yo le aconsejo que se aplique hielo y lo ponga en alto al llegar a casa. Seguro que no es nada.
Por la noche pienso en escribirle a Sara, me encantaría saber más de ella. Pero no lo hago, me conformo con volver a mirar su perfil y leer algunas reflexiones que tiene escritas en diferentes fotos. Escribe muy bien, tiene un estilo muy pulido y personal.
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El unicornio y mi crush
RomanceSara no pasa por su mejor momento en la relación que tiene con su novio Julio. Juntos deciden abrirla con esperanzas de que al explorar nuevas opciones, se reavive la llama de su pasión y vuelvan a tener la chispa que ella tanto anhela. Lo que no sa...