Capitulo 4

2.9K 363 113
                                    

Ya había pasado una semana desde el exámen de admisión del instituto U.A. Todavía no recibía respuesta si será aceptada o no. Aunque lo duda mucho, a mitad de examen dejó de preocuparse por juntar puntos, si hacía memoria solo obtuvo dieciocho puntos.

-Si no soy admitida no importa, lo haré en otro lugar-pensó sacando una caja debajo de su cama. Al abrirla saca un libro de tapa blanda color marrón-Los extraño tanto.

Al abrir el libro se puede apreciar dibujos de personas hoja tras hoja. Las páginas fueron dibujados por uno de los monjes durante su última estadía en el templo. Le gustaba ir a visitarlos y meditar junto con ellos. La última vez le pidió este favor al monje mayor, él era bueno retratando, le dijo que estaba escribiendo una historia, y que le gustaría ver a sus personajes no solo en su cabeza.

En la primera hoja se podía apreciar a dos personas abrazadas de lado, eran sus padres, o mejor dicho, los padres de Sakura Haruno.

En la siguiente estaba dibujado el equipo siete, y en la tercera estaban Sasuke y Sarada. No podía evitar preguntarse cada noche si se encontraban bien, si se estarían alimentado adecuadamente, si Sarada ya tendría pareja, si sus padres estarían saludables, si Sasuke pasa más tiempo en la aldea cómo lo estaba haciendo antes de irse, si Ino seguiría esforzándose para mantenerse esbelta, si Naruto ya comenzó a escaparse de su trabajo.

Sin embargo todo eso son cosas sin relevancia, que solo demostraba cuanto los extrañaba. Con respecto a su seguridad ella sabía lo fuertes y astutos que eran, Naruto y Sasuke mantendrían la aldea a salvo, además ya estaban en épocas de paz. Si se presentara una amenaza ya poseían experiencia de sobra para afrontar la situación . Y lo que más la tranquilizaba era saber que su pequeña hija tenía muchos amigos, tenía a su padre, a su equipo, a sus abuelos, y al Hokage para apoyarla.

Solo los extrañaba.

-¡Nee-san!-gritó una niña de unos once años entrando a la habitación-la cena ya está servida,y...-saca un sobre del bolsillo delantero de su jardinero-te llegó un sobre de U.A.-le avisó entregándole el sobre.

-Gracias Umi-dijo Sakura con una sonrisa amorosa, guarda el libro en su lugar nuevamente y toma el sobre dejándolo en su escritorio de estudio.

-¿No vas a abrirlo?-preguntó la pequeña.

-Después de cenar con mi familia haré eso-dijo alsando por los aires a Umi

-No soy una niña pequeña para que me andes alsando por los aires nee-san-dijo con un puchero.

Esa pequeña le recordaba a Sarada con sus ojos negros y su cabello corto azul oscuro. Un sentimiento de protección natural especial surgió en ella cuando la vió por primera vez. Tal vez nunca olvidaría a las personas de su anterior vida, pero amaba a su nueva familia.

-Aunque te gusta ¿Verdad?-dijo Sakura colocando a Umi en sus hombros y comenzaba a trotar por el pasillo y escaleras abajo.

La ojinegra no hacía más que reir, adoraba a su hermana mayor.

Al llegar al comedor vió que no solo estaba Amaya, Kane también.

-¿Kane?-preguntó Sakura bajando a su hermana

-Hola hermanita ¿Ya abriste el sobre?

-Dijo que cenará con nosotros primero-contestó la pequeña por la mayor.

-Sé que serás admitida Saku-chan, te has esforzado tanto para tomar el curso de héroes-Dijo Amaya mientras se sentaba para comer.

-Gracias Amaya-san.

-Que mala costumbre tienes. Hasta con Haruo-san. Lo llamabas "papá" máximo una o dos veces al día y él se emocionaba demaciado cuando lo hacías, casi siempre era "Haruo". -habló Kane sirviéndose una gran cantidad de comida en su plato.

Nueva Vida. LiteralmenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora