Solo es cuestión de tiempo

Capitulo 11.- Gala

Nadie se esperaba lo que pasaría ese día… 

Acababa de terminar de arreglarme para la gala me sentía bien y con confianza, según Gabriel nos iríamos juntos pero eso nunca paso ya tenía media hora de retraso ¿se le habrá olvidado la gala? Lo dudo.

-Señora Alena, el coche ya está abajo esperándola – anuncio Cristina entrando a la habitación.

Respire profundamente tome mi pequeño bolso me vi por última vez en el espejo, había intentado hacer mi mejor trabajo aunque mi cabello no cooperara del todo.

-Se ve muy bien Señora- dijo Cristina mientras me tomaba de la mano.

-Solo Alena, lo sabes…- 

-Buena suerte que tengas una noche espectacular Alena, todo saldrá bien-  le di un abrazo, me imagino que así sería tener una mamá que te llenara de valor en estas ocasiones.

Cuando dejamos la casa atrás y vi como el auto recorría el centro de Londres, saque mi celular el cual no indicaba ninguna novedad desde la desagradable llamada de Christian. 

-Hemos llegado Sra. Ganzerla -

El chofer me ayudo a salir del auto, camine hacía la puerta del hotel una mujer de edad mediana, vestida de forma formal me dio la bienvenida, me enseño donde era la gala.

No veía a nadie conocido, recorrí con la mirada el salón como dos veces, un camarero se acercó a mí ofreciéndome un de las largas y caras copas de champagne.

Me sentía una tonta parada  enfrente de la entrada sentía que llevaba horas pero ni siquiera había pasado cinco minutos, quería darme la vuelta o tener el poder desaparecer cuando dos hombres se acercaron sonriendo como si fuera un trofeo que querían ganar.

Y como si fuera su salvador Gabriel se apareció a través de la multitud con el ceño fruncido y una cara de molesto, tomándola del brazo para apartarla de ese lugar.

Lo avergoncé… no cuadro con este evento.

Cuando estuvimos lejos de ese par me soltó – Hola a ti también Gabriel- mi voz sonó temblorosa algo que no pude controlar.

-Alena- dijo con su voz grave- No sabía que ya habías llegado-

-Acabo de llegar- 

-Ven acompáñame, no pienso dejarte sola- 

No podría creer lo que decía, siempre pensé que Gabriel quería estar lo más lejos posible de mí, que me evitaba bueno aunque a veces parecía ser atento, solo algunas veces.

-¿Quieres bailar?- pregunto él.

La pista de baile estaba abarrotada de parejas de diferentes edades – Claro- dije con una tímida sonrisa.

Sentí un escalofrío cuando él puso su mano en mi espalda desnuda para dirigirme al área designada para bailar, la música del saxofón con el piano era cautivadora.

Y como si ese par de ojos color zafiro me hubieran hipnotizado, me deje guiar por él, siento como si fuéramos una pareja de verdad, como si nos quisiéramos, siento… siento que va a besarme.

Se acerca poco a poco a mí –Vete a casa Alena-

Retrocedí dejando una extraña sensación de hormigueo por haber estado tan cerca, el debió ver mi reacción –Es lo mejor- tomo mi mano para sacarme del lugar y acompañarme hasta la salida.

No entendía nada,  para que decir de la gala si iba a mandarme de regreso en menos de veinte minutos.

-Te veo en la casa-

Y sin decir más dio media vuelta para regresar al salón, cuando estaba a punto de subir al auto una voz familiar llamo mi atención.

-¿Ya te vas hermanita?- hablo Eva quien iba acompañada de Christian, lo que me faltaba.

-Acompáñanos- dijo Christian.

-No me siento bien, quisiera regresar a la casa- mentí, bueno la verdad no me sentía bien emocionalmente.

-Eso puede esperar, he dicho que nos acompañes- dijo jalándome del brazo.

No quería regresar al lugar, no quería estar con ellos y mucho menos entrar para que Gabriel me viera de nuevo.

No sé en qué momento llegamos al salón – Si ya veo porque te querías ir- dijo la voz venenosa de Eva.

-Alena, Alena, ni como esposa sirves- dijo con una risa malévola.

Yo no entendía porque decían eso hasta que seguí sus miradas para encontrarme a Gabriel con Regina, quienes parecían estar pasándola muy bien juntos, ninguno se dio cuenta de mi presencia.

-Si vete Alena, a nadie le importara- dijo Christian soltándome.

Camine de forma directa parecía un robot hasta llegar al auto, quería fundirme con el asiento de piel y cerré mis ojos pero fue inútil ya que unas lágrimas habían recorrido mis mejillas.

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Lo sé tarde demasiadoooo en actualizar, pero ya estoy de vuelta, es la primera actualización del año así que FELIZ AÑO NUEVOO!!

Gracias por seguirme en este año que paso, muchas gracias gracias.

¿Que les parecio el capitulo?, dejenme su respuestas en los comentarios.

BYE <3