14.

179 26 91
                                    

Epístola: (n.)

1. (f.) Carta misiva formal que se dirige a un conjunto de personas; especialmente, las enviadas por los apóstoles a las diversas comunidades cristianas.

________________________

San Fernando de Cádiz, 24 de octubre de 1951

Querido Aray:

Cada día tenemos que ponernos unos pantalones cortos y una camiseta también de manga corta para salir a correr al patio en cuanto tocan diana. No importa que haga frío, o calor, o esté lloviendo, tenemos hacerlo siempre. Al principio no aguantaba mucho, pero ahora no me canso en cuarenta minutos, espero progresar así en todo lo demás... ¡Perdón!

Lo que quería decirte es que esta mañana cuando salí, apenas me percaté de que hacía frío porque estaba seguro de que me llegaría tu respuesta hoy. Pensaba en tu letra rápida, en cómo suena tu voz en mi cabeza mientras leo, en tus palabras bonitas. Y así fue, el carro del cartero aparcó delante del cuartel y unos cien de los casi trescientos que somos, nos agolpamos ahí para recoger el correo. No sé cuántos nombres se sucedieron antes del mío, pero no perdí la esperanza y salté y me abrí paso entre la gente gritando "¡aquí, aquí!" cuando lo escuché. Andrés y Salvador me agarraron con alegría al verme con mi carta, no paraban de preguntar de quién era, y yo les dije que era una carta de mi hermano. Espero que no te enfades por esto, solo quiero protegernos mientras esté aquí.

Hace unos días me preguntaron por mi novia, y yo solo alcancé a hacer una especie de retrato femenino de ti, pues así me brillarían los ojos mientras la describía, o sea... te describía. Casi se me escapa que me encanta tu barba, ¡imagínate si llego a decirlo! ¡Sería el novio de la mujer barbuda! Vaya... Ahora echo de menos rascar mis mejillas en tu barba. Y tocarla con las manos, y que me haga cosquillas cuando nos besamos...

Son las diez de la noche y te estoy escribiendo mientras me escondo en el baño para que no me arresten por estar fuera de la habitación a esta hora. Por qué no escribo de día, preguntarás: porque no puedo hablarte desde el corazón si hay alguien mirando. Realmente odio tener que escribirte a escondidas, y besarte a escondidas y quererte a escondidas. Todo lo hacemos a escondidas, y yo con Yolanda tengo que pasear por la plaza, aguantándome las arcadas a cada paso que avanzo con ella de mi brazo. Pienso mucho en eso, en que escondo el amor y disfrazo el dolor con un amor que no le pertenece a ella, que nunca ha tenido ella, que nunca va a tener.

Aray, te quiero y te extraño con cada parte de mí, te extraño tanto que a veces se me hace insoportable y solo puedo ver el día en que por fin tenga un permiso para poder volver a abrazarte en Barcelona. Respóndeme cuando puedas, cuídame a Rocío y dale un beso a Abel de mi parte.

Tuyo,

Romeu Vázquez García.

***

1 de noviembre de 1951

Tiana, (Barcelona)

Querido Romeu:

Yo también te echo de menos. Aquí todo el mundo me pregunta por ti cada día, incluso las señoras del pueblo que vienen a la tienda me preguntan si sé algo de ti. Y Vicente también, y los hermanitos de Abel, y mi madre; incluso yo me pregunto a mí mismo por ti a cada momento. Es verdaderamente insufrible pasar por delante del taller y no encontrarte allí desde hace ya más de un mes, pero cada día es uno menos para volver a verte, me gusta mirarlo desde esa perspectiva.

Hace un par de noches te soñé dormido junto a mí. Eras tan real que la felicidad aun me eriza la piel al recordarlo. Me quedaba mirando como respirabas, lentamente y con esa paz que irradias cuando no estás haciendo nada más que "ser". Yo me tumbaba sobre tu pecho y tú, como por instinto; me abrazabas, cálido, con esa ternura tan tuya que caracteriza hasta tus movimientos. Sin embargo, fue al no encontrar tus latidos que me di cuenta de que estaba soñando y desperté para descubrirme abrazado a la almohada. Fue un sentimiento comparable al que se me quedó en el cuerpo la mañana que abandonaste mi buhardilla con nuestra foto cortada a la mitad, dejando la cama revuelta después de hacer el amor. No era un sentimiento bonito, pero el recuerdo que me queda de esa noche sí que lo es.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 02, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cuando llegue la primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora