Capítulo 4: El libro de las sombras

54 4 1
                                    

Molly sonreía de oreja a oreja contemplando su colección, muy orgullosa se la mostraba a su amiga pelinegra, Serena por otro lado no sabía que decir, y que se supone que digas cuando tu nueva amiga te lleva a su casa y te enseña su preciada colección de libros sobre misterio, monstruos, vampiros, brujería, hechizos y todo eso que ella le causaba escalofríos.

— Es muy interesante – dijo al fin la pelinegra viendo los gruesos volúmenes con una gotita.

— ¡Lo sabía! te gustan me ha tomado casi siete años acumularlos pero hace un año conseguí una pieza única e invaluable, se llama el libro de la luna, el problema es que aún no lo he podido abrir – dijo la chica muy emocionada.

— ¿Y eso porque? – pregunto con curiosidad la pelinegra, pues estaba segura de que si era tan único como afirmaba Molly, debía haber sido imposible no leerlo para su amiga.

— No puedo abrir el libro, lo he intentado de toda las formas posibles pero el sello no se puede retirar – dijo frustrada la pelirroja.

— ¿Quieres que te ayude? – pregunto Serena indecisa.

— Claro – respondió la chica y de un cofre grande extrajo un libro color azul verdoso en la portada se halaba una gran luna de color rojo rodeada por diversa líneas que se sobreponían y entrelazaban creando un extraño diseño Serena veía la luna con interés, y entonces lo entendió coloco sus dos manso sobre la portada y giro la luna que se dividió en dos mitades abriendo los sellos.

— Maravilloso Serena – dijo Molly emocionada.

— Molly tienes un paquete – dijo la madre de la pelirroja ingresando a la habitación con un gran paquete rectangular que dejo sobre la cama.

Molly estaba muy entretenida con el libro que la fin se había abierto que no presto mucha atención a lo traído por su progenitora, más Serena repentinamente sintió que una fuerza misteriosa la llamaba sin ser muy consciente de lo que hacía cogió el paquete rectangular y quito el envoltorio en sus manos quedo un hermoso tomo forrado de cuero negro en la portada se encontraba un extraño símbolo en color plateado acaricio la portada y delineo con la punta de sus dedos la imagen era como un recuerdo lejano y le daba la sensación de haberla visto antes pero no entendía donde sus manos se deslizaron asía las tapas y abrió el libro. Molly se había acercado en ese momento y vio a Serena abrir el libro oscuro estiro su mano entonces una extraña melodía lleno la habitación y las dos chicas cayeron inconscientes al suelo.

En la casa de los Chiba; Rei decidió ver qué cosas tenía ocultas "el fenómeno de pelo negro" y empezó hurgar entre las cosas de la chica, después de busca un buen rato no hallo nada raro así que frustrada estaba por marcharse y entonces sobre el velador una pequeña caja musical llamo su atención, la sostuvo entre sus manos y la giro buscando la manera de darle cuerda y poder abrirla pero nada la caja tenía una sola ranura que se suponía era para la llave pero Rei no tenía dicha llave, frustrada de no poder abrirla lanzo la caja al suelo, la cajita cayo y como si en ves de madera hubiese sido de cristal se hiso mil pedazos, una extraña melodía fue inundado la habitación y Rei cayó al suelo pero antes de quedar inconsciente vio a un sujeto surgir de una débil niebla que emergió de los pedazos de la caja.

— Al fin – susurro el pelinegro y una sonrisa afilada se extendió por su rostro; buscaría a su princesa le dio una mirada a la chica en el suelo y coloco una mano en su cabeza manipulando su recuerdos después se trasformó en niebla y despareció.

Rosa CarmesiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora