Los días que siguieron fueron tan tranquilos respecto a información de mis sueños y de mi padre.
Sin embargo, en el Campamento, todo era un caos.
La primera semana ya habían asesinado a casi cien personas. Al parecer, habían elegido a los mejores asesinos.
Frank estaba dando vueltas por todas partes, con la mirada en el suelo, haciendo suposiciones. Jared se veía nervioso a cada rato, sin lograr sostener la mirada en una parte por más de un segundo. Mientras Sophie sólo estaba tirada en un sofá, divertida de verlos actuar así.
-Es tan gracioso verlos estar así por un juego -se burló mientras veía a Frank casi chocar contra el marco de la entrada de la cabaña principal. Al parecer, nos dejaban estar ahí sin ningún problema.
-Tal vez -dijo Frank-, no sé.
-¡Es sólo un juego! Ni que muerieras por él.
-Metafóricamente sí mueres -le dije y ambos nos reímos. Tenía razón, era gracioso verlos así. Frank la miró detenidamente y luego siguió caminando. Luego volteó a verme y siguió caminando.
-Tal vez sea genial el juego -dijo Sophie abriendo mucho los ojos al decir 'genial'-, pero no es como para exagerar. Sólo... sobrevive. Eso haré yo este año, trataré de evitar miradas -luego sonrió y murmuró-: Apuesto a que duraré más que ustedes...
-¡Cien personas! -gritó Jared mirando hacia el suelo- ¡Es una masacre!
-Eh, no. Es un juego -corregí.
-Agh, ya me harté de ustedes -se quejó ella y se dirigió a la entrada frontal de la cabaña.
-Te acompaño -no tenía nada más que hacer aparte de mirar a ambos sufrir.
Los dos salimos del lugar. Enfrente de la cabaña estaba un grupo de chicos que se dirigían hacia la otra parte del Campamento. De ese grupo, había una chica que miró en nuestra dirección. Tenía el cabello mojado y enrededado, casi parecía que no podía peinarse bien. Le calculaba unos quince años.
Ella volteó en nuestra dirección, pero pareció no percatarse de que yo estaba ahí. Pero cuando Sophie bajó los escalones, miró a la chica y ésta le guiñó un ojo.
Sonrió y siguió caminando con sus amigos. En cambio, Sophie dio media vuelta y, furiosa y con los puños apretados, subió los escalones de madera. Al verla subir así, la chica rió y desapareció por el sendero. Yo también reí. Apenas había pasado una semana desde que empezó el juego (y desde que me asesinaron) y ella ya había perdido, segundos después de haber dicho que iba a sobrevivir más que Jared y Frank. Irónico.
Al verme parado en medio de la entrada, ella me apartó de un empujón, obviamente molesta. Abrió la puerta y, sin esperar a que yo entrara, cruzó la sala a zancadas, seguida por los tres. Ella salió por la salida trasera, se acercó a la pizarra y borró su nombre de un rápido movimiento. Frank iba a empezar a reír, pero ella lo notó y le dio una bofetada. Jared se rio de eso y luego ella lo amenazó con el puño, obligándolo a cerrar la boca.
-¿Quién era ella? -me acerqué a Sophie, que mantenía los ojos y los puños cerrados.
-Marlene, de Agua -me susurró entre dientes, para que los otros dos no escucharan. La reacción que tuvo al ser asesinada por ella fue muy... violenta. Algo más debía de haber entre ellas.
Sophie vio a Frank quejarse del golpe y sonrió. Luego se alejó.
Me acerqué a ellos, que hablaban acerca de la pelirroja.
-Debí haber apostado con ella -se lamentó Frank.
-¿Siempre tiene que apostar? -le pregunté a Jared y éste se encogió de hombros. Luego se me ocurrió preguntar sobre Marlene- ¿Qué hay entre Sophie y esa chica Marlene?
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La Espada de Oro (Los Elegidos #1)
FantasyObserva alguna imagen de la tierra. Linda ¿cierto? Si lo vieras con mis ojos, ya no pensarías lo mismo. Mis ojos están muy desarrollados. Puedo ver cosas que los demás no. También mis oídos y mi olfato. Ahora mismo, seguramente estarás pensando "Qué...