Yo te Amaré (Rin x Len)

13

—No creí que alguien como el rarito de Kagamine se interesara en alguien, y hablamos de Neru, mira que apunta alto —vociferó un pelirrojo, obviamente buscando ser escuchado.

Fue ignorado completamente por Len, el rubio siguió escribiendo su canción sin importarle lo que decía Akaito, a este último no pareció agradarle aquello, ya que sonrió de manera torcida. Odiaba cuando Len lo ignoraba.

—Es decir, Len Kagamine enamorado, eso sí que es chistoso, ¿verdad, chicos? —preguntó Akaito, sus amigos no tardaron en asentirle.

—Sí, ¿qué se le habrá pasado por la cabeza? —acotó uno de los muchachos.

—No lo sé, tal vez que Neru lo correspondería —rio Akaito—. Hey, Len, dinos, ¿qué es lo que pensabas?

Al ser llamado, el blondo suspiró y dejó de escribir, para dirigirle su atención a Akaito, el cual lo miraba con una sonrisa burlona. Len abrió la boca, listo para hablar, pero ninguna palabra salió de su boca, simplemente sonrió y dejó escapar una risita, para volver la atención a su libreta. Sabía que aquello molestaría a Akaito, porque el pelirrojo creía que esa era una forma de Len para burlarse de él, y sí, lo era.

—¿Acabas de reírte?

Len no respondió, simplemente siguió sonriendo mientras escribía. Frustrado, Akaito se sentía frustrado, le frustraba que sus intentos por hacer sentir mal a Len no funcionaran.

—¿Qué tal si me respondes, Kagamine? —habló Akaito, poniendo su mano sobre el pupitre de Len— ¿Qué pensabas cuando te le declaraste a Neru?

El rubio suspiró, para luego guardar su libreta dentro de la mochila.

—Pensaba lo mismo que tú cuando intentabas ganarle a Kaito en cualquier cosa, "Puedo lograrlo" —respondió Len con diversión.

—¿Acaso estás buscando pelea?

—No, ¿y tú?

—¿Te crees gracioso?

—No, sólo me burlo de ti, Kaito en rojo.

Los ojos de Akaito se abrieron, sus puños se apretaron y prácticamente una vena empezó a palpitar en su frente, odiaba al rubio, lo odiaba más que a nadie, lo odiaba casi tanto como a su hermano mayor. Sin pensárselo, agarró del cuello de su sudadera a Len, haciendo que el susodicha tuviera que mirarlo.

—¡No vuelvas a llamarme así en tu miserable vida!

—Wow... ¿Qué pasa? ¿Toqué un punto sensible?

—¡Atrévete, vamos, llámame así una vez más!

—Vamos, tranquilízate, sabes que no hablaba en serio. Llamarte así sería un insulto para tu hermano.

La atención de la clase estaba sobre el encapuchado y el pelirrojo, Len se mantenía igual de inalterable. Akaito por su parte estaba totalmente alterado, parecía como si en cualquier momento pudiera saltar sobre Len y molerlo a golpes.

—¡Ustedes dos, sepárense! —gritó de forma autoritaria una mujer.

Akaito soltó de mala gana la sudadera de Len, para irse a su asiento. Afortunadamente para el blondo, la profesora había llegado, de no ser así, probablemente habría sido golpeado hasta el cansancio. Sí, "Kaito en rojo" un apodo estúpido, pero que logró hacer enfurecer a Akaito, y lo que Len le había dicho a continuación lo había hecho enfadar mucho más "Llamarte así sería un insulto para tu hermano", molesto, era como si le dijera "Tú hermano es mejor, y lo sabes, copia en rojo" y exactamente eso es lo que Len trataba de decirle con disimulo.

La clase duró dos horas exactamente, al momento en que la campana sonó, Len al igual que todos los días, recogió su mochila y se fue de allí. Akaito no había olvidado su enojo, pero no iba a perseguir a Len para golpearlo. Como buen estudiante, sacó un marcador de su cartuchera, para comenzar a escribirles mensajes de odio al rubio en su pupitre, mientras que sus compañeros le ponían pegamento en su silla y chicle debajo de la mesa, aunque lo del pegamento no tenía sentido porque cuando Len volviera el pegamento estaría seco.

Neru observó todo aquello, pero no emitió palabra, solamente salió del aula y caminó por los pasillos hacia el aula donde estarían sus mejores amigas. Curiosamente estaban todas, Rin seguía allí, pero se notaba preparada para irse como hacía últimamente.

—Rin, ¿podrías comer con nosotras hoy? —preguntó Neru.

—¿Eh? Yo...

—Por favor, quiero hablar contigo —le interrumpió.

La menor de las blondas suspiró, parece ser que tendría que dejar a Len un rato solo, sacó su celular y le mandó un mensaje al susodicho, diciéndole que pasaría el receso con sus amigas y el próximo recreo iría con él. Len respondió que no había problema, diciéndole que Kaito le mandó un mensaje diciéndole que tenía que hablar con él.

Las cuatro amigas caminaron por los pasillos de la institución, yendo directas a la cafetería. Sin problemas consiguieron comida y una mesa libre, sólo ellas cuatro, como siempre había sido.

—Rin, ¿tú eres amiga de Len? —preguntó Neru.

—Sí. ¿Cómo... resultaron las cosas?

—Como lo planeó, los chicos estuvieron burlándose de él...

Rin apartó la vista, no le agradaba escuchar eso, pero siendo sincera ya se lo esperaba.

—Hablé un poco con él ayer... —espetó Neru.

—¿Y?

—Le pregunté acerca de... si no le molestaba ser tratado así... A él no le...

—No le importa —interrumpió Rin, completando la frase de Neru—. A él no le importa lo que la gente diga de él... pero le importa lo que la gente diga de sus amigos... por eso él...

—Por eso no se junta contigo ni con su otro amigo...

—¿Te contó de él?

—No me dijo quién era, si a eso te refieres...

Silencio, ¿por qué el aire se sentía tan pesado?

—Ese chico Len... ¿Es agradable? —preguntó Miku.

—Sí —contestó Rin.

—¿Y si lo invitamos a comer con noso...? —trató de sugerir IA.

—No aceptara. Tiene miedo a que la gente empiece a decir cosas de mí por su culpa...

Silencio, Rin sentía su pecho comprimido, ¿por qué se sentía así? Tal vez porque no le gustaba que la gente tuviera algo nuevo con lo que molestar a Len. ¿Por qué no podían llevarse bien con él? ¿Por qué Len no hacía un mínimo de esfuerzo por tratar de agradarle a los demás? La blonda suspiró mientras pelaba su naranja.

A Miku e IA esto no les afectaba demasiado, porque ellas prácticamente ni conocían la existencia del rubio antes de la llamada de ayer. Neru por su parte estaba algo dudosa sobre el asunto, replanteándose un par de cosas, sintiéndose mal por Len ahora que sabía cómo era. La que estaba totalmente deprimida era Rin, la más preocupada de todas por el rubio, no quería que trataran mal al chico.

Mientras tanto, el tema de su conversación se hallaba hablando tranquilamente con su mejor amigo, los dos en el santuario de Len. Tal y como esperaba Len, Kaito se partió de la risa cuando Len le explicó que hizo su plan en base a un capítulo de un anime. El de cabello azul se lo tomaba con gracia, si Len no quería cambiar, no podía obligarlo.

Len no se odiaba, Len sabía lo que valía, Len se quería, y si él se quería era suficiente.

Pero...

Al igual que Len no quería que le pasara nada malo a sus amigos. También había personas que no querían que le pasaran cosas malas a Len, que no querían ver como lo humillaban, personas que querían que él fuera apreciado por los demás, personas como Rin que se mostraba triste mientras comía y como Kaito, quien fingía su risa para ocultar su rabia.

Siento que nunca pongo nada acá... Meh.