Prólogo

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Si estás aquí antes de leer Sin Miedo. Te recomiendo vayas a leerla si es que prefieres seguir el orden de esta trilogía y no tengas un fuerte spoiler.

Detrás de la Pantalla

La misma rutina, la escena ya estaba grabada, por fin, el apuesto policía terminó salvando a la bella dama que simplemente lo rechaza, lo bueno era que pronto acabaríamos la película.

La siguiente y última escena no sería nada fuera de lo normal, se besan, deciden alejarse del peligro un largo tiempo, lo veo siempre.

A pesar del amor que le tenía al cine y a las cámaras, ¡Odio que todo sea final feliz!

—¡Corten!— gritó el director, las cámaras pausaron, los micrófonos se apagaron, por fin.

Los actores en el set soltaron un largo suspiro, dando una  pre-felicitación a ellos mismos.

Si, sí, muy bonito.

Ahí fue, cuando del set, salió caminando la estrella de la película, con un suspiro cansado, y una sonrisa decaída.

Miré la lista de grabaciones que tenía en mis manos, las cuales hemos estado realizando todos estos meses.

Lo ví alejarse, directo a su camerino, todos lo saludaban y felicitaban, y él solo les daba una falsa sonrisa.

¿Nadie nota lo decaído que está?

No entendía, él no estaba feliz, lo podía ver, pero, ¿Por qué? Si es la estrella aquí.

Miré a todos lados, él me preocupaba en muchos sentidos, cuando finalmente me aseguré de que nadie me veía caminar hacia él, aceleré el paso.

Rápidamente fui a dar a su camerino, para esto él ya había entrado hace tiempo.

—¿Kent?— lo llamé —¿Necesitas algo?

—Estoy bien— respondió con su voz neutra.

Negué aplastando mis labios, y así entré.

Estaba desparramado en su silla, totalmente derretido, podía ver su vacío que hasta yo mismo lo sentía.

Carajo, incluso sin motivación en su vida, era tan... Bello. Pero yo quería verlo bien, sabiendo que, Kent no era tan perfecto.

Me acerqué a él, girando su silla para que me diera la cara.

—Em, sé que probablemente no me conozcas tanto, pero, te noto apagado, ¿Seguro que todo está bien?

Asintió sin ganas. —Solo estoy cansado de la grabación.

Dejé la lista por un lado y lo levanté cómo pude, Kent Schell podrá ser muy alto y fuerte, pero era como un niño pequeño en su mente.

—¡Vamos! ¡La gente quiere verte feliz!

Rió con amargura. —La gente solo quiere ver lo bueno de las cosas, la realidad les duele.

Cuando pude tenerlo de pie, lo sostuve de los hombros, permitiéndome ver su rostro. Kent usualmente no debería permitir que tantos miembros de producción lo estén tocando.

Barba fina, cabello rubio oscuro, ojos caramelo, y una personalidad y físico deslumbrante. Sí, Kent era perfecto a ojos de muchos, no tanto para mí.

Hubo un largo silencio, silencio en el cual muchas cosas pasaban por mi mente, entre ellas, sus labios delgados devorando los míos.

Estúpidos pensamientos repentinos.

Pero al tenerlo aquí, a solas, sabiendo que él no siempre es tan alegre, me estaba atrayendo más que lo normal. Solo un chico de producción diciendo este tipo de cosas de un actor alemán, soy una vergüenza.

Kent era tan imperfecto, y yo me estaba volviendo loco por eso, porque sabía que yo era el único que lo veía, y aún así, me encantaba.

Pero aún así, mis manos viajaron al cuello de su camisa blanca, la cual estaba manchada a propósito, gracias a la última escena que se grabó hoy.

Y de un tirón, jale esa camisa hacia mi, golpeando sus labios con los míos en un beso directo.

Me estaba preparando para un empujón, pero no, nada de eso fue así.

Moví mi boca intentando alejarme un poco, y en lugar de eso, las manos de Kent jalaron de mi cintura hasta pegarme a él por completo.

Él mismo abrió su boca y luego entró a la mía, me siguió el beso. Las luces de su camerino eran tenues y rojas, estaba cayendo en el cielo. Kent empezó a dominar el beso con deseo e impudor, y llevó su mano detrás de mi cuello.

Saboreé sus labios como jamás lo había hecho, soltando suspiros y respiraciones cortas entre nosotros.

De un momento a otro, su boca dejó la mía y paso a mi cuello, chupando, besando y lamiendo, luego mordió suavemente.

Un gemido suave salió de mi boca, no debí haberme metido en esto.

—Yo...— balbucé, y cuando reaccioné, me aparté por completo —¡Lo siento! ¡Kent! ¡Perdóname, no debí hacerlo!

Primero me miró confundido, aturdido, y luego negó desviando su rostro para después darme la espalda.

Su espalda tonificada se contrajo, y suspiró. —Vete.

No lo pensé y salí.

Acabo de arruinarlo en grande.

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Los primeros capítulos estarán un poco tristes nada más JAJA.

Y pues, espero les agrade la segunda historia de esta trilogía, sisi.

Recuerden que la he hecho con todo el sudor de mi poco empático y nada frágil corazón. JAJA

Es lindo saber que estoy logrando hacer esta trilogía y que en cada capítulo pongo una parte de mi, gracias a todos por su apoyo ❤️

⭕ Recuerden que el embrollo del asunto con Gian, es que no puede olvidar el pasado, así que probablemente ya saben a quién mencionará una que otra vez, los qm⭕

POCOS CAPÍTULOS. Es una trilogía pero cada historia tiene pocos capítulos, y claro que no tienen tantas escenas sexuales, al menos una o dos. :)

Y creo que es todo, pasen, y descubran como Gian O'Conner ha tenido que salir adelante :').

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@flor_decerezo_

Detrás de la Pantalla (O'Conner #2/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora