13

3.6K 303 201
                                    

El lugar era muy formal, había mucha gente —y yo odiaba las aglomeraciones de gente— Hannah saludaba a casi todas las personas y yo... Solo sonreía.

—¿Conoces a todas estas personas? —le hablé entre dientes a Hannah

—No —me respondió saludando a lo lejos a más personas —, solo los saludo para que mi papá vea que socializo.

—Ya.

—¿Quieres algo? —me preguntó gentilmente

Sigo diciendo que me da un mal presentimiento

—No, estoy bien, gracias.

—Bien, iré a ver algunas cosas —y se alejó de mí

Tenía mis dedos entrelazados entre sí en mi regazo, me dirigí al banquete de comida porque siendo sincera, sí tenía hambre. Agarré un bocadillo y otro... Y otro... Y otro... Y otro.

Después de un rato de estar comiendo fui a recorrer la casa en donde estaba. Tenía un patio grande con juegos —supongo que las personas tiene hijos—retrocedí un poco y choqué con alguien.

—¡Estúpida, casi tiras mi bebida encima de mi carisimo vestido! —se quejó

—L-lo s-siento yo... —alcé la mirada —. Daysi...

—¿Cómo...? —me miró —. Vaya, vaya, vaya —se cruzó de brazos —. Pero si aquí tenemos a la mismísima T/n.

—Esa misma —respondí con voz áspera

—¿Y tu novio? —se tapó la boca al instante —. Cierto, ya no tienes.

—Me alegra, porque no necesito de un hombre para ser feliz.

Ahora dilo hasta que te lo creas

—¿Y Aidan? —miró a su alrededor —. Cierto, tampoco viene contigo, viene conmigo.

Mi mundo se detuvo ahí

No llores, sé fuerte, tú puedes

—Que bueno —tenía un nudo en la garganta horrible

—Él y yo volvimos, hace unos días. Creo que desde que llegaste —sonrió maliciosa

No... Eso no...

—No te creo.

—No me creas si no quieres. Al final de cuentas, él todavía siente algo por mí.

Quiero golpearla

—Mientes, él jamás volvería con alguien como tú. —aunque podía no ser cierto, ambos estuvieron enamorados pero Aidan...

—Créeme que yo sé lo que a él le gusta que le haga —se acercó a mí —. Le he hecho maravillas.

Mi mandíbula se tensó y apreté mis puños a mis costados

—Aidan jamás volvería contigo...

—Él jamás te quiso y a mí sí. Esa es la diferencia entre tú y yo —sonrió y se fue

Quería llorar —como siempre —pero me mantuve firme y respiré hondo. Necesitaba un trago, era más que necesario. Después de unas cuantas copas empecé a marearme un poco, así que decidí beber un poco de agua. Hannah estaba hablando con unos señores de no sé qué.

—Oye T/n —me llamó —. ¿Sabes cantar?

Asentí dubitativa

—Bien, ella lo hará —gritó y yo la miré de inmediato con los ojos muy abiertos

Auge ✔(Aidan Y Tú) 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora