El secreto de mi amo (Terminada)

Capítulo 5 (Venganza no planeada)

(Narrador omnisciente)

Los planes no siempre saldrán como se esperan, tal vez en su momento sea bueno cambiar de estrategias.
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Había pasado un tres meses desde el incidente en el departamento del azabache  y  su relación empezó a tornarse tormentosas, sin embargo los negocios  eran asuntos aparte.

-Necesito el papeleo para hoy  entiendes, Ichinose - el rubio se encontraba sentado en su silla, revisando documentos que mantenia en su escritorio, y el azabache se encontraba a un metro alejado de el rubio, pues esta distancia fue impuesta por Mikaela.

- Enseguida, presidente -tomo los papeles y salió de la oficina, mientras en su mente analizaba (¿Qué fue lo que hizo para merecer ese trato?) - Quiero renunciar -pero si lo hacia la familia Shinso se encargaría de que nadie lo volviera a contratar, eso se lo dejo en claro Mikaela.

El rubio observo los movimientos  del azabache estos tres últimos meses, el primer mes solo le causo gracia que el azabache empezará a salir con un chico de cabellos castaños, quien según  sus contactos se lo había presentado su amiga de cabello lila, el segundo mes  le molesto el hecho de que saliera cada vez más  con este joven, por lo que en un ataque de locura mando a que el casero del azabache lo echará  de su departamento, debido a esto el azabache terminó viviendo nuevamente en la casa Shindo, hasta arreglar  el asunto con el casero.

Y

uu-chan, eres un maldito descarado-  se encontraba observando  al pequeño amigo de Yuichiro quien lo esperaba, puesto que dentro de diez minutos  sería su hora de almuerzo-  te adentrarse en mi mente como un maldita pesadilla- aplastó un botón  debajo de la mesa - Emil porfavor  has que Ichinose  venga a mi oficina, y por cierto en cinco minutos permite que la señorita Seraph ingresé.

La secretaria acató la orden de Mikaela, llamo al azabache y le dejo el recado a la castaña; sin embargo eso tendría consecuencias luego.

-Me mandó a llamar presidente -  el azabache  por su aspecto  pareciaque no durmió en semanas.

-Quiero que llenes estos  intervalos de reactivos y su código de acceso- el azabache sólo lo recibió  le dolía demasiado la cabeza que no queria discutir.

Salió del lugar y unos cinco minutos después   la chica llegó -Amor, creo que tu secretaria es demasiado grosera, me trata como si fuera cualquier persona - hizo un mohin, que el rubio sólo puedo imaginarse a Yuu haciendo lo mismo; la chica se acerco, tomando asiento en las piernas de Mikaela, para empezar a besaralo, mientras el de orbes zafiro  le quitaba la blusa descaradamente para tocar los pechos de ella, sin embargo no sentía nada, ni una pizca de excitación; eso lo molesto,  por lo que  le quito el brasier  a la chica, empezando a besar los pechos de esta; sin embargo aún nada, la recosto con un poco de brusquedad en el escritorio pero a la única persona que pudo imaginarse es al azabache, esto sólo provocó que  su amiguito empezará a latir y a erectarse -Mika, me excitas  cuanto te comportas así.

El rubio estaba asqueado al escuchar la voz de la chica iba a apartarse cuando derrepente el azabache entró con unas carpetas en sus manos- presidente porfavor podría firmar esto para que me permitan observar el laboratorio - al  alzar  un poco la vista, contempló aquella escena y por alguna razón su corazón volvió a partirse en pedazos más  pequeños - yo..

- Yuu-chan, no te enseñe a tocar -  tomó a Karin de la cintura y la abrazó, para empezar a besar su cuello dejando marcas de posesividad,  sacándole así suspiros a ella; el azabache no pudo más   pero aún así lo vio - eres un pervertido que  nos observará mientras lo hacemos - el azabache salió dejo las hojas en el escritorio y corrió fuera del edificio,  sin embargo Yoichi lo abrazo por la espalda.

- Yuu-kun- el chico castaño era muy sonriente y hacia que la tristeza del azabache desapareciera un poco- vamos a almorzar- tomó la mano del  chico y con una sonrisa lo guió a un restaurante -  esto se ve delicioso, Yuu-kun, ¿sabes que día es hoy? - pregunto con anhelo.

- El día del escudo - parecía que el azabache lo pensó demasiado, por lo que el castaño sólo hizo un mohin- tranquilo garrapata se que es tu cumpleaños, lo celebraremos hoy- sonrió mientras lo despeinabael pequeño sólo sonrió y empezó a comer alegremente.

Mientras tanto el rubio se encontraba bebiendo vodka  en su despacho, viendo a las personas pasar, y con una sonrisa maquiavélica; había echado a Karin cuando la apego al ventanal para empezar a embestirla ferozmente pero a la  primera vio como el azabache se fue con el niño ese, y tomados de la mano eso le hirvió  la sangre por alguna razón,  le dio a la chica su ropa para que se visitará y saliera, vio la chica esa rabia en él asi que decidió irse  sin protestar.

- Emil, cuando llegue Ichinose  a mi oficina porfavor- y así fue la chica mando al azabache a la oficina del rubio en vi al estaba apegado a la ventana un poco ebrio -Vaya así que Yuu-chan estas muy obediente hoy- por impulso se acerco al azabache por detrás  lo tomo de la cintura- te  gusto abrirle las piernas a un niño- dejo caer el vaso con vodka al suelo, y empezó a pasar sus manos por debajo de la camisa del azabache- porque gracias a eso aquí tuvimos un  gran percance - beso el cuello del chico dejando marcas, empezó a desabotonar la camisa de este.

-Sueltame- empujó a Mikaela y se cubrió, lo vio directamente a los ojos, empezó a sacudirse como si fuera lo peor que le habían hecho- no se me acerqué presidente - intento caminar hacia la puerta pero derrepente un dolor de cabeza le llegó.

-Mira esto Ichinose, por  mantener esas salidas de la clínica tienes idea de cuanto hemos perdido en reactivos- le arrojó varias hojas al rostro, luego lo hizo colocarse de rodillas - recogerlo -el azabache lo acató conteniendo sus ganas de golpearlo y llorar- más  rápido zorra, o tal vez -  bajo su bragueta y acercó su miembro a la cara del azabache -Me vas a pagar de esta manera ahora- el alcohol le había llegado, sin embargo  el azabache tampoco estaba en sus cinco sentidos, vio al rubio a los ojos.

- Mi.. Mika- una pequeña lagrima resbaló por su mejilla y se desmayó asustando al rubio quien inmediatamente, volvió en Si, guardo su miembro y abrazó al azabache.

- Yuu-chan. - estaba en shock, ¿que hizo?- ¡¡Yuu-chan!!

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continuara~

Bueno espero que les guste mi fanfic <3

Espero que aprecien mi trabajo

lo hice con mucha dedicación

y si hay una que otra falta de ortografía sepan disculparme.

~Hasta el próximo capitulo ~