Capítulo IV. 🌹

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Dimitri.

"Gracias por comunicarse con el servicio  al cliente de Dragomir Company, aguarda un momento y uno de nuestros asistentes le responderá luego de la señal." Se escuchó una voz que era notoriamente mecánica.

"pip-pip..."

- Buenos días, habla con el centro de reclamos ¿en qué puedo ayudarle?- casi podía sentir las ondas sonoras de esa voz recorrer cada centímetro de mi cuerpo, pasando por todas y cada una de las partes de este. Se sentía hermoso, puro.

Eran unas simples palabras, y a su vez tintadas de un tono dulce pero peligroso, amable pero letal. Una combinación que podría significar gloria o perdición.

Traté de calmarme lo mejor que pude porque es que esa voz me ponía los pelos de punta. Podría pasar horas escuchándola. Tragué fuerte para pasar la saliva acumulada debido al muy enredado nudo en mi garganta que fue generado por la impresión.

- Hola, buenos días.- dije como pude.- tengo un problema, es mi teléfono no me permite recibir llamadas, ni mensajes, ni mucho menos me permite hacerlas.- hubo un pequeño espacio de silencio hasta que luego la mujer carraspeó ligeramente para responder a mi reclamo.

- ¿Ya probó con reiniciarlo?- era obvio que lo hice, quizás era una pregunta de rutina, pero yo podía usarlo a mi favor y así poder volver a contactarme con ella.

- Sinceramente... no. No lo había pensado.- menti descaradamente, rogando que no me descubriera debido a mi inexperiencia en el ámbito.

- Inténtelo y vuelva a llamar.- dijo con la intención de finalizar la llamada. Pero... ¿y si cuando llamaba ya no me atendía ella?

- ¡Espere!- dije casi gritando con desesperación, cosa que logró sorprenderme. Por suerte para este momento ya me encontraba nuevamente en mi oficina fundido completamente en la privacidad que me rodeaba.- ¿Cómo... cómo es su nombre?...- dudé en si era correcto preguntar. Debido a que sé que en estas operadoras quedan grabadas todas las llamadas de sus trabajadores. Se escuchó otro silencio a través de la línea.

- ¿Cómo?- dijo confundida. Su voz enviaba corrientes eléctricas en todo mi cuerpo nuevamente.

- Tu nombre... para volver a llamar necesito saber quién eres.- aclaré.

- ¡Aahh! Disculpe señor, es que no le entendía bien.- rió casi con incomodidad, o al menos eso creí.- mi nombre es Rosemarie Hathaway. Que tenga un buen día.- y colgó.

No quería terminar la llamada, pero entiendo cómo es que graben tus llamadas y tener que recibir reclamos debido a algún exceso de atención a un usuario o palabras fuera del contexto laboral.

Quería volver a escucharla pero tendría que esperar otro rato para volver a llamar o la mentira se me caería hasta el centro de la tierra.

Entré al historial de llamadas con ella. Dos minutos con treinta y seis segundos bastaron para que me deje con ansias de volver a encontrarla, por lo menos, virtualmente.

Trataba de imaginarla, pero no podía. Ni siquiera mi imaginación podía crear una figura o un rostro con semejante voz.

- Rosemarie Hathaway.- se sentía bien decir su nombre en voz alta, me sentía un metal y aquella voz era como un imán para mi.

Don't Stop Loving Me.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora