🧁Doctor Pastel🧁 [YM] -Terminada.

[8] Mirame.. [8]

Después de desayunar Jimin tomó las llaves del auto de su padre y se las entregó a Yoongi.

—¿tienes licencia de conducir?.

—Si..

—vamos entonces —sonrío llevándolo del brazo, nunca lo tomaba de la mano ya que pensaba que Yoongi lo soltaría.

—espera, ¿de quién es el auto?

—mío, mi padre me lo regaló esta mañana —rio— dijo que puedo conseguir un permiso para manejar antes de cumplir los 18, me lo regaló porque dice que me servirá para ir al trabajo y no quiere que regrese tan tarde, pero el permiso lo sacaré después ahora vamos —lo jaló del brazo y ahora Yoongi no lo detuvo.

Ya estando en el auto Yoongi lo encendió y condujo a dónde el menor le indicaba, había un poco de tráfico pero Jimin había colocado música desde su celular haciendo así no tan aburrido el camino.

Al llegar a una cafetería Jimin pidió una rebanada de pastel y un frappe.

—¿no crees qué es mucha azúcar? —Jimin puchero al lo que comería frente a él.

—No.. es un día importante así que puedes comer lo que quieras —Jimin asintió y con una sonrisa comenzó a comer la rebana de pastel de vainilla.

—está delicioso, pruébalo —le entregó el tenedor y Yoongi probó un poco.

—Si.. está rico.

—vamos Yoongi no seas tan seco, estamos fuera del hospital, ¿puedes ser feliz esté día.. por mi?

Yoongi lo miró, inclinó un poco la cabeza y no dijo nada.

Jimin no supo que hacer solo siguió comiendo,
el mesero llegó con la orden de Yoongi lo cuál era una rebanada de tarta de queso.

Jimin estaba callado no sabía de que hablar con Yoongi y cuándo le contaba algo el seguía en silencio es cómo si solo le pusiera atención pero no tuviera nada que opinar.

—¿Después te gustaría salir a dar un paseó? —comenzó a hablar llamando la atención de Jimin— podemos ir al parque si quieres..

—Claro —sonrió.

Yoongi miró la camisa de Jimin, se veía lindó pero al ver el clima afuera negó y se puso de pie.

—ahora regreso, no te muevas de aquí.

Jimin lo miró confundido y dejo que se fuera.

El tiempo estaba cambiando, frío y nublado camino hasta una tienda cerca de la plaza y al ver una de su agrado entró.

Fue directamente hacia las chaquetas negras y miró las tallas, Jimin era pequeño no cómo el.

Tomó una que estaba seguro le quedaría junto unas gafas negras y camino a donde estaba la cajera y pagó con el dinero que tenía guardado desde antes que lo llevaran al hospital pues el tenía un trabajo y siempre guardaba el dinero ya que no se compraba nada.

No era mucho pero no le molestaba gastarlo todo en Jimin, en fin cuándo saliera de ese hospital o cómo el le decía jaula, volvería a trabajar.

Salió de la tienda y regresó a la cafetería dónde Jimin lo esperaba tomando de su frappe.

—tardaste mucho —regaño.

—Fui a comprar unas cosas.. —tomó asiento— toma.

—¿Para mi? —se sonrojó.