𝑷𝒓𝒐𝒕𝒆𝒈𝒊𝒅𝒐

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Los dedos de John iban abotonando su camisa de abajo hacia arriba mientras se miraba en el espejo del baño, Freddie estaba en la sala viendo nuevamente las caricaturas mientras esperaba a su doctor para poder irse hasta el supermercado.

Su mente estaba en su propio mundo, ese recuerdo acerca de aquel acercamiento erotico con Freddie, le había hecho pensar demasiadas cosas, y cuando dice demasiadas, son DEMASIADAS, estaba pensando en todo lo que podía pasar,en su parte sucia y llena de deseo pedía a gritos poder cogerse a Freddie, pero...recién Fred había llegada a su casa, no podía decirle 'Oh Freddie, sabes, deberíamos coger.'

Esas cosas no podían pasar, bueno, solo en películas porno de los 70s pero no, estamos en la realidad. Y tenía miedo, bueno no, era más que nada un suspenso que le hacía sufrir.

Incluso su mente le hacía el juego de imaginar que mientras duerme llegue Freddie y que le de una buena mamada. Pero siendo realistas, era difícil saber que pasaría mañana. O que pasaría en ese mismo momento.

-Agh, Freddie bebé, vámonos. - Gritó con calma tomando su chaqueta y las llaves de su auto, ya tenía su lista de que cosas tendría que comprar y que cosas tenía que pensar en comprar. Pero el pequeño y hermoso obstáculo que tenía con él no le permitiría comprar ciertas cosas, todavía tenía que comprarle ropa.

Paso sus manos por su rostro soltando un sonido raro y susurró antes de salir de su habitación. - Ahora entiendo la razón de por que mi madre siempre me decía que hiciera mi propia lista de compras...es estresante. Ay mami, te necesito. - Susurró mirando desde lejos a Freddie recostado boca abajo, se veía tan hermoso mordiéndose su labio por estar tan concentrado en la televisión, era difícil saber como tendría que cuidarlo,pero, al haber sido un médico especializado en ese tipo de problemas logró tener la suficiente información para saber que hacer. Esperaba que no fuese difícil. Se acercó hasta él y al estar a su lado susurró - Anda vámonos, si nos vamos más tarde habrá mucha gente ahí. Sé que odias cuando hay mucha gente.

Freddie en cambio subió su mirada al oír que lo llamaba, estaba silencioso, volvió su mirada a la televisión y la apagó. Nuevamente se giro para verlo y se hinco con calma soltando un suspiro. Ay dios, la mente de John estaba imaginando tantas cosas en esos momentos. Pero su corazón le decía que Freddie se veía hermoso, y es que así era.

Aunque en realidad Freddie solamente lo veía a sus ojos en una GRAN calma. Tragó saliva tallando sus ojos y se separó frotando sus manos con sus propios brazos después de sentir un pequeño besito en su mejilla por parte de Freddie.

-V-vamonos. Ven - Tomó su mano llevándolo fuera de la casa, escuchaba sus risitas todo el tiempo, de cierta manera le gustaba oírlo siempre como si fuese una alarma, así sabría que estaba cerca suyo. Cuando ambos estuvieron dentro del auto, primero se puso él el cinturón, se acomodó bien y se giro viendo a Freddie con sus piernas encima del asiento, se veía adorable, pero los instintos de animal de John le hacían pensar en cosas que no deberían.

-Me ves mucho...¿me veo mal?...¿Hice algo malo? No debí usar tu chaqueta...mmh,¿la quieres? - La expresión de John cambió repentinamente apenas lo escucho viendo como alzaba sus bracitos para intentar quitarse su chaqueta.

Pero John negó de golpe al ver aquellos ojitos preocupados y afligidos.

-¡No, no! Yo umm, es solo que te ves hermoso...te veo mucho por eso. - Miró a sus ojos nuevamente viendo como sus mejillas estaban más que rojas, 'que vergüenza por dios' pensó John. ¿Había sido un error decir eso? Pues tal vez, pero Freddie no se lo tomó a mal. Sonrió viendo a sus tenis y susurró tierno.

-Es hermoso que digas eso...fue dulce - Rió tierno y se acercó dejándole un resonante besito sobre su blanca y fría mejilla viéndola cambiar de color al segundo, esto también le causó una risa infantil.

He's just a boy ... right? ( Deacury ©) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora