Capítulo Uno

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── El recuerdo de lo
que se ha ido. ೋ

Durante la primaria, me escondía detrás de los más grandes para no aparecer cada vez que llegaba el momento de sacarnos una fotografía

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Durante la primaria, me escondía detrás de los más grandes para no aparecer cada vez que llegaba el momento de sacarnos una fotografía. Me daba terror pensar que podía aparecer en al menos una foto, es por eso que tampoco habían fotos mías de cuando era bebé ya que me cubría el rostro y no salían con claridad. Al pasar a la secundaria, me di cuenta que la mayoría de los grupos se sacaban fotografías para no olvidarse de los momentos que pasaban juntos, y así poder atesorarlos cuando sean solo parte de su memoria. Todos querían aparecer, es por eso que yo siempre tomaba las fotos, yo era la encargada de atesorar esos recuerdos para ellos. 

Y eso era lo que me gustaba.

Pero todo cambió durante el primer año de la secundaria.

Tenía un hermano tres años mayor que jugaba en el equipo de volleyball de Aoba Johsai. Yo siempre lo había admirado, e iba a cada uno de sus partidos sin falta. Mi hermano brillaba como el líbero del equipo, lo veía salvar la pelota y siempre terminaba cada partido con una sonrisa en el rostro sin importar cual fuese el resultado. Trace siempre estaba feliz con lo que hacía, la escuela, el volleyball, cuidar a papá enfermo y el trabajo. Era mi superhéroe, siempre decía: "No te preocupes por mí, Grace, yo puedo con esto y mucho más".

Yo era tan estúpida que le había creído.

Si solo me hubiese dado cuenta de las ojeras bajo sus ojos cansados, de lo delgado que se había puesto bajo ese uniforme, de lo agrietado de sus labios con cada sonrisa. Si tan solo me hubiese dado cuenta de las señales, no habríamos recibido esa llamada a las tres de la tarde. Yo aún no salía de la escuela cuando pasó, mamá me fue a buscar a mitad de la clase, entre lágrimas y nerviosismo. En ese mismo momento, me había enterado que Trace había cortado sus muñecas en el baño de la escuela.
Tiempo después, mi padre enfermo también murió de un paro cardiorrespiratorio y solo quedamos mamá y yo desde entonces. Atesoro las fotos de ellos como el tesoro más importante en mi vida, tenía varias copias por si acaso, dos en la computadora y otras tres en mi celular, pero las originales, las tenía enmarcadas en mi habitación. Solo con esas fotos me di cuenta de lo que realmente pasaba con mi hermano, de lo contrario jamás habría entendido sus razones.

Mi hermano se había estado muriendo frente a mis ojos, y yo dejé que pasara.

En el último año de secundaria, me obsequiaron una cámara digital. Desde entonces había prometido capturar los recuerdos de las personas, antes de que se me escaparan igual que Trace. Es solo a través de la cámara que puedo ver las verdaderas emociones de la gente, solo así puedo saber si realmente son felices o se están muriendo en vida igual que mi hermano.
La vibración de mi celular junto al computador me sacó de mis pensamientos, las ideas se me perdían en la mente y tergiversaban mis preocupaciones, haciéndome pensar cosas distintas a lo que estaba haciendo en este momento.

𝐋𝐈𝐀𝐑𝐒 𝐋𝐈𝐊𝐄 𝐔𝐒 ❯❯ Akaashi KeijiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora