Warriors and Legends (Guerreros y Leyendas) [TERMINADA] ✔️✔️

CAPÍTULO XXII

¿A dónde nos estás llevando?

Narrador.

Luego de que ese destello pasara en fracciones de segundos, Jonh logró caer de pie flexionando las piernas para esquivar la patada que le habían lanzado.
Aprovechando ese instante para impulsarse hacia atrás, tomó la espada con la única mano que podía usar y de alguna manera logró replicar lo que vió en sus recuerdos con esa espada.
Cuando Kronder le lanzó un gancho, él lo esquivo por encima girando el cuerpo de un impulso y, con un movimiento veloz y preciso, partió en dos a Kronder del torso para abajo.
Su cuerpo cayó al suelo pero aún permanecía con vida.

-Pagarás por esto basura humana... Kronder volverá, ¡Kronder siempre vuel!... -sin perder el tiempo, Jonh le cortó la cabeza antes de que la espada se derritiera en su mano, finalizando así la pelea y acabando con tres de cuatro objetivos.
Por otro lado el cyborg que sostenía a las chicas se fue corriendo como todo un cobarde, ni bien esa pelea terminó.

Las manos de Jonh volvieron a su estado normal y la marca de su frente se desvaneció sin que se diera cuenta. Con ello su cuerpo estaba al borde del colapso debido al excesivo uso de energía pero al tiempo comenzó faltarle el aire, miró a las chicas y les lanzó una leve sonrisa de satisfacción. Luego su cuerpo cayó al suelo quedando completamente inconsciente.

-¡Jonh! -gritaron las chicas tras correr en su auxilio.

-¡Jéssica ve por ayuda! -le ordenó Era tan preocupada como podía verse.

-Si, grandioso, buena idea -le respondió exaltada.

-Tranquilo, tranquilo, vas a estar bien, estoy aquí contigo -exclamo Era, haciendo un esfuerzo inmenso por no entrar en pánico mientras recostaba la cabeza de Jonh sobre sus piernas.

Antes de que Jéssica llegara al final de callejón para ir por ayuda, el cuerpo del cyborg que había escapado salió despedido en dirección a la gruesa pared de concreto, Jéssica se detuvo y Era fijo su vista hacia esa dirección solo para ver que un chico alto, de cabello negro descuidado, piel morena y ojos verdes, iba en dirección al cyborg.

Luego de que entrara por el agujero que quedó en la pared tras el impacto se escucharon varios sonidos provinientes de golpes. Cuando el chico salió con la cabeza del cyborg a un lado de sus ropas, fijó su mirada en Jéssica con una expresión como si ella fuera la siguiente víctima.

-Eso estuvo intenso, ¿no? -le dijo a Jéssica con un tono alegre como nada hubiera pasado. Jéssica no parecía gesticular palabra alguna, estaba boquiabierta y no podía creer lo que había visto, el joven y atractivo chico estaba parado frente a ella y por alguna razón apenas podía procesar sus propios pensamientos.

-¿Puedes ayudarnos? Mi amigo está en riesgo -le respondió finalmente sin dejar de mirarlo a los ojos.

-Si, claro -le respondió con una tierna sonrisa que hizo suspirar a Jéssica por solo mirarla.

Cuando se acercó a Jonh, lo examinó de pies a cabeza, con una expresión que parecía comprender cómo se encontraba, Era podía sentir que sus latidos eran débiles y su respiración leve.

Era le agradeció a aquel misterioso joven por su apoyo mientras levantaban a Jonh sobre sus hombros con dificultad.
Mirándo más detenidamente al muchacho, Era notó que llevaba un atuendo como los que usan los carroñeros: botas viejas y gastadas, una gabardina algo gastada y larga que hacía juego con unos pantalones estrechos e igualmente viejos.

-Oye debo decir que tú novio es impresionante, jamás había visto a un metahumano enfrentarse a un cyber -dijo él a modo de halago mientras se llevaban a Jonh de aquel lugar.