SADIE SHEPHERD Y LA PIEDRA FILOSOFAL [1] ✔

viii. christmas

CAPÍTULO 08
Navidad

La navidad estaba más cerca y el clima podía confirmarlo, cada vez hacia más frío, las montañas ya estaban pintadas con el color blanco de la nevisca.
Sadie había aprovechado junto a los gemelos para hechizar algunas bolas de nieve para que persiguieran al profesor Quirrell, gracias a eso se había ganado un castigo, del cual iba saliendo cuando se encontró con sus amigos junto a Hagrid, el semigigante les estaba reclamando por meterse en el tema de Fluffy, esos días habían estado buscando respuestas en la biblioteca con el nombre "Nicholas Flamel" pero aún no encontraban algo útil.

—Vamos ya— interrumpió Sadie temblando mientras se refugiaba en su abrigo— tengo frío

Se habían despedido de Hagrid para ir a la biblioteca, Hermione había puesto una gran pila de libros sobre la mesa, Ron agarraba algunos al azar y Sadie solo podía pensar en la sección prohibida, era el único lugar donde no habían buscado pero al mencionarlo, su amiga negó rápidamente diciendo que necesitaban un permiso.

Llevaban quince días buscando en sus tiempos libres pero nada parecía resultar.
Los cuatro salieron decepcionados nuevamente.

—Seguirán investigando cuando no esté, ¿Verdad?— preguntó Hermione cuando se dirigían a la sala común.

—Yo tampoco estaré— dijo Sadie— Mi tía está ansiosa por verme después de meses

Era el último día en el que estarían juntos, las vacaciones iban a comenzar y algunos alumnos saldrían de Hogwarts para visitar a sus familias, otros se quedarían en el castillo, entre ellos, Ron y Harry. Sadie quería irse cuanto antes, no porque quisiera alejarse de sus amigos, de hecho, no quería eso pero tenía que hacer algunas compras navideñas para ellos.

—Intentaré investigar algo en casa, pero no creo que Nicholas Flamel tenga que ver con algo muggle

—¿Tu tía es una muggle?— preguntó Ron.

—Lo es, su hermana, o sea, mi mamá, era una bruja nacida de muggles— explicó sentándose en una banca que estaba en el pasillo, los otros tres hicieron lo mismo— de mi padre no sé nada.

Scabbers que estaba en el bolsillo de su abrigo, se removió buscando calor.

—Por cierto, Ron— habló nuevamente— supongo que Scabbers se quedará contigo, no puedo llevarlo a casa, mi tía le tiene temor a los roedores

El pelirrojo ni siquiera se molestaba en replicar que la rata era suya, se había acostumbrado a que Sadie la tuviera por días y Scabbers parecía tenerle cierto cariño, así que había aceptado el trato de compartir la custodia.

—Está bien, creo que me ha extrañado— acercó su mano para acariciar al animal pero este lo mordió para volver a esconderse en el abrigo rojo de Sadie.