Un mate gay

4

Al llegar al colegio me salí lo más rápido del auto y me dirigí a mi primera clase sin esperar a Marcos, sentía que estaba haciendo algo mal, algo que no debía y eso no me deja rondar en la cabeza, Marcos iba a hablar seriamente a su mamá sobre su relación con Jordan, no quería joder eso, maldición maldita luna, los hubieras escogido a ellos.

Entre a la sala, ya habían unas cuantas personas sentadas esperando al profesor, agradecí internamente que mi compañeros fueran tan responsables, así no tenía que soportar el cuestionario de Marcos por no esperarlo.

Me dirigí a mi puesto, el señor que rondaba en mi cabeza por suerte se sentó al otro extremo con su mirada pegada en mi, le miré de vuelta y me sacó un hoyudo, luego agarro su cuaderno y escribió rápidamente en una hoja con un marcador que le había sacado a su compañero de puesto, levantó el cuaderno y sin esfuerzo leí.

"¿Andas en tus días maldita gata?"

Escuche una risa detrás de mi, me giré para enfrentarlo, era el hijo del Alfa, se veía mejor que hace unos meses, él me miró y sonrió de lado, observo la sala, se paró de su asiento y se acomodó en el de mi lado, miré de nuevo a Marcos con urgencia, él estaba escribiendo de nuevo en su cuaderno, su compañero gruño por lo bajo pero se limitó a ver lo que escribía, luego de unos segundos volvió a levantar el cuaderno con una sonrisa resplandeciente.

Funci el seño y volví a leer.

"Disfruta tu romántica velada, cojan mucho"

Oh, que hijo de puta.

Volví a oír la risa a mi lado, me giré lentamente al frente ignorandole, momentos después llego el profesor, solté un suspiro de alivio y escuché unos golpecitos en la mesa de mi lado, baje la mirada, había un pequeño papel, tenía escrito algo corto pero lo suficiente para sacarme de onda.

"Interesante.

PD: Me llamo Italo"

Subí la mirada hacia él, estaba mirando con atención al profesor con una sonrisa burlona.

Por supuesto sabia quién era él, todos lo sabian, cada vez que entra en una habitación se sentia, él no necesitaba presentación.

* * *

- ¡Lo hubieras visto, es enserio!

Marcos volvió a reír sin poder creerlo, me recline en la silla indignada y Jordan comía su ensalada con una sonrisa astuta.

- A todo esto.- Dijo Jordan- Va a ver una fiesta de gala en honor a nuestra Luna.

- ¿Vas a ir?- Pregunto rápidamente Marcos.

- Si tu vas no me lo perdería por nada del mundo.- Jordan le griño y Marcos se sonrojo.

- Esto huele a mamada asegurada.- Les sonreí abiertamente y ahora ambos se sonrojaron, malditas perras adorables.

- ¿Estará Raúl?- Marcos se me acercó un poco.

- Oh, Raúl- Dijo Jordan de nuevo con esa sonrisa astuta.

- Si, Raúl- Asenti.

- ¿Qué hay de mí?- Una voz familiar sonó detrás de nosotros y todos giramos en su dirección.

Un chico de alrededor de 27 años se nos acercó, tenía el pelo castaño oscuro, sus ojos verdes sobrenaturales brillan bajo las luces fosforescentes; iba vestido de forma elegante, demasiado para un restaurante donde su especialidad eran los churrasco, paró en nuestra mesa y después de pedir agua a la mesera se sentó.

- ¿Esta es la parte donde lloran y me organizan una orgía?- Dijo, una mesera que pasaba por al lado le miro con sorpresa.

- Tu de verdad te tomas enserio lo de "entrada dramática".