Historias al azar (Mii2)

Lovely Gazes

"Cuando el viento cálido y perfumado pasa por mis mejillas
Pienso en tu rostro que solía amar
Cuando lo silvestres flores florecen ocultas en las calles 

Nunca olvides el amor"

Era un día en el que el sol brillaba y el perfume de la primavera volaba por los aires, Jimmy pasaba todos los días por la misma calle, pero nunca se había detenido frente a la florería, es más, nunca lo hubiese hecho de no ser por los cordones desatados de sus zapatos que tuvo que hacer una pausa para anudarlos, es entonces que apareció ante sus ojos, casi iluminado por un aura celestial y un coro de ángeles un hermoso ser humano al otro lado del cristal, cuya belleza no lograba ser opacada ni por las flores a su alrededor.

Se acomodó la camisa y arregló un poco su cabello antes de entrar al local, haciendo sonar una campanita al abrir la puerta, comenzó a examinar el lugar, tratando de elegir una flor adecuada, y claro, robándole miradas a aquel joven en el proceso.

"Porque el primer amor es hermoso 

Un primer amor es como una flor"

Jimmy disfruta de la fragancia de una rosa roja con los ojos cerrados antes de pasar al mostrador a pagar por ella.

Se miran, sonríen, un estremecimiento los recorre y pronto Jimmy deseó flores a diario en su alcoba, en su mesa y hasta en su cabello. Por lo que en los días venideros ahí se encontraba puntualmente al medio día.

El florista pronto se acostumbra a verlo diariamente, siempre entra y le toma mucho tiempo el decidirse por alguna.

A veces crisantemos, a veces tulipanes, gerberas, en ocasiones margaritas y en otras girasoles, pero casi siempre eran rosas rojas.

"Cuando las estrellas en el cielo nocturno me muestran tus recuerdos
Yo te saco de mis viejos diarios
Era joven en ese entonces, no tenía experiencia" 

Lo primero que llamó la atención de Tommy fue su gran estatura, pero lo que le gustó fue el par de ojos que formaban medias lunas al sonreír y el requiebro de él al aspirar el fresco aroma de que emana de cada flor.

Cada día esperaba con ansias que el reloj marcara las doce para verlo aunque no sabía nada de él, pero presumiblemente tenía una novia si no, ¿Para qué necesitaría comprar flores a diario? De ser así, qué afortunada ella al tener a su lado a un hombre tan detallista.

El sólo imaginarlo arrancaba un sinfín de suspiros de su pecho.

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Jimmy no podía estar más fascinado por este muchacho excesivamente callado y misterioso, pero de aspecto adorable.

Pensaba en lo brillantes que son sus ojos y en la caída de sus pestañas al apartar la mirada, en el rubor que tiñe sus mejillas cuando hacen contacto visual prolongado y en cómo sería la textura de su piel ante su tacto, recuerda cada detalle memorizado de él al momento en que agrega los últimos retoques al retrato que ha dibujado.

Pasó varias semanas trabajando en él poniendo todo su cariño en cada trazo, Jimmy no estaba seguro de qué era este sentimiento, pero decidió llamarlo amor.

Meses antes de su primer efímero encuentro con el amor en forma romántica, le había llegado por correspondencia la noticia de que fue aceptado en la Universidad de Harvard

Cuando hizo sus trámites dudó mucho de salir seleccionado, pero así fue. Y el día de su partida se aproximaba.

Estaba en un fuerte dilema entre sí debería declararse o simplemente marcharse, porque de cualquier modo si era correspondido ¿Qué haría?

Analizando todas las posibilidades habidas y por haber, decidió ir a buscarlo para para entregarle el dibujo que sólo podía pertenecerle a él, así como cúmulo de emociones y pensamientos que invirtió en él, y decirle lo que siente.

Corrió como si su vida dependiera de ello y aunque la puerta tenía el letrero de 'cerrado' notó que en realidad no lo estaba, así que entró. No estaba bien y lo sabe, pero en este momento no le importaba nada más que encontrarse con su ser amado.

Ya estando dentro observa algo de luz al final de las escaleras, sube con prisa para descubrir un hermoso jardín con muchas plantas, flores de colores, hortalizas... Y ahí estaba él, de espaldas, alimentando a los canarios.

Parece no haberse percatado de la presencia de Jimmy pese a ruido de sus pasos y su respiración agitada por la carrera.

Jimmy trata de recuperar el aliento y comienza

- Disculpa – dice tocándole el hombro y retrayendo su mano al instante

Cuando Tommy se da la vuelta y le dedica una mirada perpleja.

- Yo... mañana voy a irme a estudiar al extranjero – Tommy lo mira como si fuera difícil de entender lo que dice y Jimmy se rasca la cabeza sintiéndose tímido de repente – Entonces... en realidad me gustas mucho y... si también te gusto, tal vez yo no quiera irme

Porque sí, el amor nos vuelve irracionales, porque al igual que un niño pequeño, un primer amor no tiene experiencia.

Jimmy terminó y Tommy no dijo nada, apartó la mirada de sus labios y conectó con sus ojos tratando de transmitir un mensaje indescifrable para Jimmy, quien lastimosamente no entendió, e interpretó su silencio como un rechazo y se fue, Tommy tardó en reaccionar y cuando corrió para alcanzarlo infructuosamente.

Pero encontró más adelante tirado un papel enrollado, sólo para descubrir su propio rostro plasmado en él, con una flor pequeña detrás de su oreja. Era hermoso.

"Un primer amor es doloroso, es como una fiebre 

Porque te enferma y no tiene sentido

Porque el primer amor nunca pudo ser

Porque no puedes tenerlo aunque ames mucho"

Nadie antes mostró interés en Tommy, así que no supo que hacer, además temía que este muchacho de quién nunca supo su nombre, se retractara de sus palabras, al enterarse de su condición, como lo habían hecho otras personas a lo largo de su vida. Su corazón se aceleró tanto y al final se rompió.

Esa noche Jimmy se fue y desde entonces Tommy se quedó solo, han pasado casi siete años y él todavía no es capaz de decir con palabras "A mí también me gustas" 

Fin

Espero que se haya entendido pero de no ser así,  les dejo el video en el cual me inspiré completamente. 

Gracias por leer