Página 19

879 104 19
                                    

Los jueves eran oficialmente de compras. Adrien tuvo que readaptar su horario ya que las clases de inglés de Lila habían sido canceladas, y el método de su madre para curarse siempre involucraba comprar. Así que valía la pena intentarlo.

Estaba subiendo las escaleras de la mansión con las bolsas en la mano cuando vio a Marc en la puerta.

—Oh, hey Adrien, ignórame, me iré en un minuto.— Dijo Marc. —Solo estoy esperando a Nathaniel.

—Pero pensé que...

—Sí, Nathaniel y su mamá tuvieron 'la charla', y ella volvió a contratarme. Alguien está muy emocionada por apoyar los derechos gay.— Canturreó. Intercambiaron miradas, y rió.

Adrien bajó las bolsas y se recargó en la puerta.

—Tú y Nathaniel, huh... ¿Entonces es oficial?

—Ha. Um. Estamos saliendo con exclusividad, sí.— Marc tímidamente pasó una mano por su cabello.

—No quiero sonar impertinente, pero ¿qué viste en él? Eres atractivo y listo y Nathaniel es...

—¿Bonito pero no muy listo?

Adrien alzó las manos.

—Iba a decir que no era estimulantemente intelectual, pero bueno...

—Me hace reír,— Marc dijo. —Y tiene el corazón más grande que cualquiera podría tener.

Escucharon un

—¡Hey-ohhhh!— viniendo desde el pasillo, y ambos supieron quién era.

Adrien mantuvo sus ojos en Marc, quien se iluminó al ver a Nathaniel.

Y Adrien pensó que, por primera vez en su vida, sabía exactamente lo que se sentía.

—¿Te veo cuando empiece la preparatoria?

—Claro.— Dijo Adrien.

Nathaniel y Marc estaban bajando cuando Adrien corrió hacia ellos y les dijo tres palabras que nunca pensó decirle a nadie:

—Necesito su ayuda.

☆゜・。。・゜✺ ゜・。。・゜★

Adrien miró su diario y se detuvo en una hoja nueva.

Q̶u̶e̶r̶i̶d̶a̶ ̶Marinette

Marinette̶,̶

̶Q̶u̶i̶e̶r̶o̶ ̶d̶e̶c̶i̶r̶t̶e̶ ̶c̶ó̶m̶o̶ ̶m̶e̶ ̶s̶i̶e̶n̶t̶o̶...

̶L̶a̶m̶e̶n̶t̶o̶ ̶q̶u̶e̶...

̶N̶u̶n̶c̶a̶ ̶f̶u̶e̶ ̶m̶i̶ ̶i̶n̶t̶e̶n̶c̶i̶ó̶n̶...

̶E̶s̶t̶á̶s̶ ̶m̶e̶j̶o̶r̶ ̶s̶i̶n̶...

—¡Maldita sea! Querido Adrien, eres un idiota.— Dijo rompiendo la hoja y haciendo una bola de papel.

☆゜・。。・゜✺ ゜・。。・゜★

—No me cambió.

Lila pausó con una mano en su rímel. Sus ojos miraron a Adrien a través del espejo.

—¿Qué?

—Enamorarme. No me cambió; solo me hizo darme cuenta de cosas de mí mismo que nunca había visto antes.— Adrien se detuvo en la puerta y miró a Lila. —Así que, quizá tengas razón. Quizá soy un imbécil. Un bastardo. Un ser rastrero, y no recibo suficientes abrazos. Pero al menos ahora lo sé.

—Bien por ti.

—Papá me dio las llaves de su casa en la playa.— Adrien tragó el nudo en su garganta. —Creo que tú y yo necesitamos pasar tiempo lejos del otro. Y después de lo que estoy por hacer hoy, puede que nunca más quieras volver a verme, lo cual entenderé, pero espero que sepas que no creo que seas una mala persona. Nunca lo hice,— dijo. —No somos malas personas – solo tenemos que crecer un poco.

La mirada de Lila recayó en los productos en su tocador.

—Solo vete, Adrien.

Adrien creyó que quizá Lila entendía; aun cuando estaba dando todo de sí para no dejarlo notar.

Caminó para besar la mejilla de Lila.

—Te veré en la preparatoria.

Crueles Intensiones (Adrinette)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora