XXXIII. Tribeca

4K 472 68
                                    

Despertó, mientras los recuerdos se venían y después se deslizó una sonrisa que difícilmente podría marcharse. La afelpada alfombra era lo suficientemente cómoda para desear una cama, podría prescindir de ella a futuro, sobre todo si se tratase de despertar con la ojiazul a su lado. Suspiró profundamente mientras los rayos de sol matutino se escabullían por la ventanilla recortada, haciendo que su espalda expuesta sintiera una agradable calidez. No había un mejor sitio que ese, aquel dónde podría estar con Kara Danvers. Se remolinó un poco en busca del calor de la ojiazul, y tanteando ahí estaba ella, dormida profundamente, perdida en el ahora, con su rostro apacible y el cabello rubio desacomodado sin ninguna dirección. La desnudez estaba expuesta donde sus senos descubiertos era un vista hipnotizante. Lena había quedado prendada de aquella escena, no de una manera carnal, no, ella había quedado cautivada de la naturalidad de Kara, quien no solo se había entregado en piel, sino también confiado aquellos sentimientos de los cuales se había escabullido con anterioridad. Eso Lena lo sabía y lo valoraba

Dibujo sobre su mandíbula con la punta del índice, descendiendo sobre su cuello hasta el valle de sus senos. Fue cuando Kara jadeó, tomó aquella mano curiosa y la llevó a sus labios en un beso

-buen día -la voz somnolienta de la ojiazul era palpable. Lena se acercó aún más a ella, con una sonrisa extendida-. ¿Qué tenemos ahí? ¿Una sonrisa de mil voltios?

-no lo disimulare, Kara, es una de mil voltios –repitió en un susurro aquello ultimo

La ojiazul sonrió de vuelta -verte feliz me hace feliz

Lena rió -¿Qué clase de frases estuviste buscando en pinterest?

-ninguna -respondió colocando sus anteojos-. Pero la vi en el algún eslogan que ahora no recuerdo

-tonta -la ojiverde rió por debajo para después suspirar, mientras su mano volvía a las facciones de la ojiazul -te extrañe -confesó mirándola directamente-. Kara, siempre he sabido lo importante que eres para mí...

-Lee, ya te has disculpado –se apresuró a decir entrelazando su mano

-lo sé pero...

-pero ya está olvidado -agregó la ojiazul determinada-. Ahora, lo que importa es esto y ese guión que escribiste... es maravilloso

Lena pareció entenderlo, quizá orillar aquel tema era importante aunque su culpabilidad estaría presente por algún tiempo. Decidió no forzar aquello -¿Estarás ahí? Quiero decir, en el estreno

-¡por supuesto que lo haré! en primera fila. Seré quién grite al iniciar -se llevó la mano a la boca simulando megáfono-. ¡Mucha mierda! ¡Rómpete una pierna!

Lena rió a lo alto imaginando la escena -por favor no lo hagas

-lo haré, lo aseguro

Sí, ella lo haría

-no dudo de eso

Lena pareció entretenida con las facciones de su novia, podía mirarla de aquella manera tan cerca mientras los ojos permanecían brillantes como en ese instante. Su mano fue hacia aquella pequeña cicatriz cerca de su ceja izquierda -nunca te he preguntado...

-caí a un alcantarillado mientras estaba somnolienta -explicó

Lena asintió, señaló la herida recién hecha -atravesé un supermercado con mi automóvil en estado alcoholizado

-lo sé, ahora ambas estamos en YouTube

-¿Estás en YouTube?

-sí, dormí en mi discurso de graduación. La ex novia de Alex lo filtró

My Pretty Sleeper [Supercorp - AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora