✨ 𝚂𝚑𝚒𝚗𝚎 𝚠𝚒𝚝𝚑 𝚖𝚎 ✨

Ａｆｔｅｒ Ｐａｒｔｙ

𝕄𝕒𝕣

Mariana estaba arreglando los últimos detalles de mi maquillaje, me había cambiado por un vestido rojo con tirantes de seda ceñido a mi cuerpo, tenía una abertura en el muslo izquierdo y me puse unos tacones abiertos de color negro, dejé el collar que me regaló Tim y con mi cabello solo agregué más volumen, tenía el cabello rizado así que lo aprovechaba al máximo.

-Dios tú quieres matar a todos los invitados- me dijo Mariana al verme tomar una foto solo del vestido y mis piernas

-Yo jamás sería capaz de tal cosa Mari, creo que me veo linda

-Pfff ¿linda?, nena traes un vestido que mata a cualquiera- movió sus manos de un lado a otro -A veces creo que te ayudó bastante separarte de Raúl- me paralicé un segundo ante su comentario, hace mucho no escuchaba su nombre.

-Aún no lo sé Mari, supongo que conforme pase el tiempo podré decírtelo con certeza- guardé mis cosas para ir a la fiesta.

Ya eran las 23:00 hrs y conociendo a  Timothée, estaba segura de que estaría esperando para poner la música que me gustaba, el reggaetón era su gusto culposo.

Mariana y yo llegamos  al ascensor, mientras llegaba estaba checando los mensajes de mi mamá felicitándome por la película y contándome lo que mi pequeño hermano había aprendido el día de hoy, siempre me mandaba fotos y videos; anoté en mis pendientes hablarle en la semana.

El elevador tardaba una eternidad, Mariana se veía desesperada y presionaba el botón una y otra vez, hizo que desviara la mirada del teléfono a su dedo nervioso sobre botón.

-Mari, no va a llegar más rápido si lo presionas de nuevo- me reí de ella, ganándome que me enseñara el dedo.

Me carcajee y decidí tomar una foto de ella enseñándome el dedo con la mano derecha mientras que con la izquierda  seguía presionando el botón del ascensor, la estaba editando para subirla a mi historia de Instagram, escribí "nasty fast bitch".

Por último quería etiquetarla pero no me aparecía su username, el elevador por fin llegó y Mariana me guió hacia el mientras yo seguía batallando por etiquetarla, sentía gente a mi alrededor pero no presté mucha atención

-Esta porquería no sirve- le dije en español, Mariana era de Colombia y cuando estábamos solas hablábamos en nuestro lenguaje materno.

-Ya déjalo güey, al rato lo solucionas

-Mari, esto tiene que quedar- escuché el sonido del ascensor llegando al piso donde sería la fiesta, solté un grito de frustración y seguí mi camino agarrando la mano de Mariana y sin voltear dije "permiso" a los que estaban con nosotras.

-Por Dios Mar, esos guapos estaban comiéndote con la mirada, te hubieras derretido- reí sarcásticamente.

-Mari, estaba muy concentrada, aparte no me estoy fijando en hombres últimamente, no me importan

-¡Por Dios Mar!, no digo que te enamores, te digo que tengas una aventura loca que te emocione y que disfrutes, eres muy joven para estacionarte

-No lo sé, sólo he tenido una pareja en ese sentido, y la verdad jamás pensé en tener otra- le dije mientras bebía una "Paloma"

-Disfruta, cuídate y relájate- me dio una palmada en las pompis haciéndome reír y se fue.

Timothée estaba bailando felizmente con una amiga de ambos, Eiza González, la tensión entre los dos era abrumadora así que prefería estar alejada un rato.

Estaba en la barra tomando mi bebida observando la vista de la hermosa ventana, Nueva York siempre fue mi sueño, es la ciudad de Gossip Girl, fantaseaba ir al MET, quedarme en el hotel Palace y aquí estoy, en una fiesta con músicos, actrices, actores, productores, modelos, no sabía cómo sentirme, sólo estaba disfrutando del momento con una vista de ensueño.