[Twisted Wonderland] Como el sol (Floyddle)

★Naranja; Carta: Y puede que se equivoquen, y el miedo nos juegue mal★

Riddle miró con atención el vaso de jugo de naranja entregado por Deuce, y alzó una ceja en cuestión.

-¿Qué pasa? no es día de jugo, y una de las reglas dice que-

-Te ves desanimado, prefecto. —Habló el muchacho más alto, con una convicción extraña—, y no es que no pueda estarlo, ¡pero es raro! ¿hay algo en lo que pueda ayudar?

Cuando Riddle oyó eso, sintió una calidez en su pecho, y sonrió mirando el vaso con satisfacción.

-Mnh. Lo arreglaré yo. —Suspiró, y una vez más su voz tronadora volvió a su sitio—, siempre puedo solucionarlo, ¿no lo crees así, Spade? 

-¡Sí señor! —Bramó, y rápidamente se retiró de la habitación mientras Riddle sostenía el vaso con líquido en su interior.

Oh, seguro podría beberlo. Quizás podría olvidar la sensación cálida que todavía permanecía en la comisura de su boca.

Mientras miraba el vaso con atención, tomó asiento en su escritorio y comenzó a revisar el papeleo.

En realidad, su mente estaba ocupada repasando los últimos días. Floyd siempre había sido tan simple, ¿no era Riddle quien estaba complicando toda la situación? comprendía totalmente que el muchacho era temperamental, y de hecho, no esperaba ser comprendido por él, o recibir una muestra de su paciencia.

Era todo tan extraño. Quizás Riddle quería poder comunicarse mejor sin la necesidad de usar palabras por temor a elegir las incorrectas y causar un desprecio en el resto. Si fuera como solía ser, poco o nada le importaría el resto, pero en ese momento, sujetando un vaso de jugo, recordando los pasteles de Trey o las burlas confianzudas de Cater, definitivamente sabía que había cosas que no quería volver a perder.

Quizás Floyd estaba ahí, en ese extraño límite entre conocido, amigo, y algo más, oscilante como un péndulo. Aunque el mismo muchacho nacido en noviembre era así; oscilante, inquieto, nunca predecible, aunque si lo observaba bien, quizás podía adivinar un movimiento, si sólo tanteaba la situación con cuidado.

El único problema de Riddle era que pensaba demasiado y no se dejaba llevar por lo que sentía, Tal vez todo sería más simple si fuera como Ace o Cater, que siempre parecían obedecer sus instintos, o si fuera como Deuce, que siempre hacía lo que le parecía en el momento adecuado.

En cambio era él, y siempre era cauteloso con todo. Quizás por eso Floyd se aburría a su alrededor constantemente. Suspiró mientras agitaba el vaso en su mano una vez más.

¿Y qué sacaba con dudar tanto? ¿había algo bueno en eso? sólo perdería lo que no tenía, y entonces comenzaría a odiarse a sí mismo por todo lo que perdería.

No podía ser así consigo mismo. Necesitaba progresar. Hacer un verdadero cambio. Porque quizás todo lo que estaba sintiendo un día se iría y entonces se arrepentiría totalmente de no poder tomar buenas decisiones.

Un día quizás él y Floyd irían por caminos separados, y se arrepentiría si no fuera por cuenta propia. Podía ser probable que el miedo le jugara en contra, pero si lo intentaba, no había mucho que perder, sólo conseguiría un fracaso, en el peor de los casos.

Floyd siempre avanzaba primero, y si Riddle estuviera en su posición, "aburrido" sería un eufemismo. Definitivamente habría mandado al diablo al otro.

Todavía estaría esa sensación molesta entre sus manos de sentirse como una presa fácil dispuesto a espantar a Floyd en cualquier momento, y este siendo capaz de ir con cualquiera que le prestara esa atención. Con ese temor, ¿cómo podría?

-Floyd... —Susurró bajito, y repentinamente escuchó un toque en la puerta con un patrón que conocía bastante bien.

-Pasa, Trappola. —Mencionó en voz alta, mientras tomaba un sorbo del jugo de naranjas que Deuce le había dado, dejando el vaso a la mitad.

Observó atentamente cómo la mirada de Ace caía en ese vaso con residuos de la fruta ácida, y un surco gracioso entre sus cejas.

"Oh, esto es interesante" pensó Riddle, mirando como el pelirrojo más alto sacudía su cabeza para espabilar.

-¡Líder de dormitorio, el superior Azul ha invitado a algunos a una fiesta! no sé por qué motivo, pero dijo que le avisara a todos, ¿no crees que es una trampa?

Riddle tuvo una pequeña epifanía en ese momento: en realidad, ya estaba cansado de huir y regresar. El estilo de péndulo era el de Floyd, e incluso él parecía ser más constante y estable en ese momento.

No. Fuera o no una trampa, ¿no era una oportunidad demasiado conveniente para desperdiciarla?

-¿Cuál es el supuesto motivo de la fiesta? no iré a un lugar donde quizás nos cobren la comida.

-Oh... —Murmuró Ace—, parece que ¿el cumpleaños de Jack? algo así. —Dijo Ace, con una facilidad que Riddle prefirió ignorar.

Porque había aprendido a reconocer una mentira.

-No dejes en vergüenza a Heartslabyul con tus travesuras innecesarias. —Fue lo único que mencionó, antes de que Ace saliera del despacho, con un asentimiento.

Bueno, Riddle había tomado una decisión. Y definitivamente ese era el fin a sus huidas sin sentido.

Floyd tendría que escucharlo en esa celebración.