Mi amor del pasado...

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3 de octubre, sentados en una calle llena de gente, muchos sin rumbo otros pensando en y demás festejos y un país convulsionado, las radios hablando de personas heridas, cercos por algunas zonas y gente que se mueve a evitar más conflictos. Estábamos pensando en como sería estar enlazados en un beso, volver a un sueño que no acabe, pero ella llega agitada con cabello suelto y caminamos por algunos comercios, con timidez la abrazo y dejo escoger algo mi corazón anda sin dejar de andar loco, caminamos por todo lado buscando entre miradas aquella chispa que haga nacer un pequeño beso, pasamos por la terminal y vemos correr ambulancias y muchos petardos suenan, avanzamos con premura, nuestras manos se unen la llevo por la plaza Riosinio, gente sube por las calles cercanas a la plaza murillo, bajamos por la Jaen y algunos tratan de meterse a las casas, ingresamos a una de ellas donde tenia una fuente al medio y muchos cuartos en los piso superiores, el olor a cera calmaba un poco la tensión.

Me trajo a esta casa, rara sensación que tengo James tenso busca un lugar para nosotros, pero me siento segura por el momento, pero algo me dice que estuve aquí alguna vez, miro alrededor siento que vine con él aquí, James me toma fuerte del brazo, tropezamos en un ingreso a esa habitación, su cama pulcra con algo de polvo y olor a ropa vieja con naftalina, en una veladora y casi oculta un retrato de una pareja y caigo en trance profundo dejo de escuchar y me enfoco en recordar ese instante.

que paso con Flavus?, la reviso y no encuentro herida alguna, solo quedo seca mirando a esa fotografía, pero al analizar la misma me pongo pálido, la respiración me hace falta no es posible que sea ella la de ese retrato con ese joven todo apuesto, se nota que es en la gradas de la casona al lado de la fuente de agua, ella sentada todo risueña con su traje de cholita paceña, y una manta que daba viveza a sus ojos ya iluminados, un sombrero de copa media que llevaba un topo disimulado a un costado, escucho pasos y gente gritando arengas que parecen cercar la casa, me acerco a su rostro pálido pero fijo al cuadro y su respirar suave me dice que está bien pero no encuentro pulso, busco en los cajones de los veladores que apenas se mueven y hacen escuchar su voz de despertar con un crujir, pero todo vacío busco en los roperos pero solo están algunas prendas que hacen escocer la piel al tocarlas.

hace años atrás la misma pareja huía de los conflictos del país el todo un líder del pueblo que esperaba dejar un legado a su tierra pero con el tiempo se dio cuenta que con solo sangre ellos entenderían el valor de su lucha, en sus último momentos en su pequeño santuario dejo sus últimos deseos, tan oculto que nadie sabría mas que su amada, la cual entre tanto trajín se perdió y nunca retorno a esa casa, a el lo encontraron intentando tomar unos caballos y bajar a galopé esas calles hace la iglesia de San Francisco el cuál nunca llego y solo sus últimos alientos pidieron estar juntos por última vez en su lecho de amor.

a James lo siento rodearme, anda impaciente y yo sin poderme mover, sin esperar un segundo quiero salir de ahí y lo único que realizo es ponerme de costado más este cuerpo no colabora, todo inherte solo siento algo de calor queriendo reanimarlo, mis recuerdos llegan a cuenta gotas, trato de ver en donde estoy, escucho la gente en tumulto tratando de ingresar a la casona pero a momentos veo mas objetos en la habitación a otros no.

Continuara...

Historias entre las Calles de La PazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora