Normal (Lucas Fanfic)

Capítulo 39

"Muéstrame."

"No quiero salir vestido así..."

"Querrás decir 'vestida' y si lo harás. Ahora deja que te vea."

Lucas sale del baño con los ojos rojos de tanto llorar, va vestido completamente distinto ahora que Peach está a cargo de él, van recién tres días y ya no soporta más, es humillante.

"Te ves muy bien con esa ropa." La voz de la princesa es alegre y le sonríe cariñosa. Lucas usa un top rojo holgado que le cubre solo hasta el busto y va sobre una camiseta sin mangas, de pabilos, blanca haciendo resaltar su cintura y dejando al descubierto sus pequeños hombros. "¿Y la falda?" Ahora le frunce el ceño, y es que no está usando todo lo que le pasó, sí se puso el short negro ajustado, las bucaneras blancas sobre las rodillas y unas zapatillas similares a las anteriores, rojas con amarillo, pero más delgadas y pequeñas, para que sus pies se vean proporcionales a su cuerpo, no como antes que toda la ropa le quedaba grande.

"N-No quiero usar falda." Su voz tiembla al pronunciar esas palabras. Los dos días anteriores se rehusó a salir de su habitación para que nadie le vea usar falda, pero hoy Peach lo obligará y además ya pasó su tiempo de reposo por las lesiones en su pecho, debe regresar a las peleas, pero se rehúsa a usar una falda, eso sí que no.

"Ve a ponértela ahora." La voz dura lo hace dudar.

"N-No." Tiene tanto miedo de ella.

Peach camina los pasos que los separaban y abofetea sin titubeos la mejilla izquierda de Lucas que lo mira completamente asustado y retrocede un paso. Los golpes de la princesa en su contra ya son algo común, cada vez que se niega a algo o habla de sí mismo en masculino es regañado y si continúa es golpeado.

"Obedece." Los ojos celestes de Peach son fríos y penetrantes, lo miran con intensidad, pero esta vez no quiere ceder, ya es horrible que tenga que usar un sujetador y un short tan corto como para más encima agregarle una falda ridícula. "Anda." Traga saliva nervioso y se prepara para correr.

La princesa está de espalda a la puerta cerrada así que si corre tendrá como máximo tres segundos en lo que ella se de vuelta y corra a su siga. Se puede hacer.

La ve dar un paso en su dirección y enseguida pega un pequeño salto a la derecha y corre hasta la puerta abriéndola con nerviosismo, logrando huir de su propia habitación y correr por el pasillo lejos de Peach, lejos del encierro, lejos de esa voz que repite un nombre que no es suyo. Lucy.

En algún momento, más pronto de lo que quisiera, tendrá que pagar por este comportamiento, pero no podía pensar en nada más que no fuera huir de ahí. Quiere aire, quiere trepar un árbol y olvidarse de todo, de todos. No se da cuenta cuando ya está en el jardín en dirección al bosque, justo lo que quería y se permite sonreír un poco.

"¡Lucas!" Escucha la voz de su mejor amigo y se detiene respirando agitado. Cuando Toon Link llega frente a él lo mira con asombro. "¿Por qué estás vestido así?"

"Peach me obliga." Sus ojos vuelven a llenarse de lágrimas.

"Nooooo, no llores. Mira." Se le acerca y comienza a levantarle el cabello para peinarlo más o menos como lo usaba antes. "Ahora si eres tú otra vez." Toon le sonríe con tanta felicidad que Lucas no puede evitar soltar una pequeña risa y abrazarlo.

"Gracias." Le susurra separándose y limpiando las lágrimas de sus ojos. "Quiero trepar un árbol, ¿me acompañas?" El menor grita en afirmación cuando ya está corriendo hacia los árboles con Lucas a la siga.

La mañana pasó de forma agradable y amena, Toon Link lo trata como siempre, no deja de ser algo brusco en sus juegos y eso le alegra completamente. Tienen sus típicas conversaciones tontas y sin sentido que les hacen reír, sus burlas, sus bromas, y como siempre una carrera hasta el comedor para el almuerzo. Toon Link ingresa riendo y hablando fuerte como siempre hasta llegar a la mesa con sus compañeros, en cambio Lucas baja la cabeza para evitar las miradas que la mayoría tiene sobre él, sabe que Peach se encargó de decirle a todos que él es una chica, no quiere ni ver sus expresiones de asco, de burla, de desprecio, prefiere solo caminar a la siga de su mejor amigo, pero cae en cuenta que Popo está en esa mesa. El esquimal que le fue a tocar la puerta en sus días de encierro para poder hablarle y a quien no respondió por vergüenza, así que detiene sus pasos a mitad de camino sin saber dónde ir. Respira profundo un par de veces y levanta con cuidado la mirada que para su mala suerte fue a caer justamente en Ness. El psíquico mayor lo observa fijo con sus ojos violeta llenos de repudio hacia su persona y Lucas retrocede un paso. ¿Ness lo odia?