Mine [MinJoong] ATEEZ

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-Este me gusta, queda cerca de la Universidad y se ve cómodo.

HongJoong asintió mientras veía la imagen impresa en el catálogo que MinGi señalaba. Habían muchas otras opciones que seguramente podrían ser más prometedoras, pero si a MinGi le gustaba ese, entonces ese sería.

-A mí también me gusta este, Gigi, ¡tienes buen gusto para esto!

MinGi sonrió halagado y cerró el catálogo, acomodándose sobre la cama a la vez que palmeaba el lugar disponible a su lado en el colchón.

Encantado, HongJoong se acostó a su lado y lo abrazó como un koala mientras ocultaba su rostro en el cuello del rubio.

-Me gusta estar aquí contigo, pero las miraditas que nos dan cada vez que pasamos por aquí son insoportables.

-Yo no les presto atención, Gigi, estar contigo me hace pensar solo en ti y no en lo que sucede a nuestro alrededor.

-Uhmm, ¿sabes qué? Tienes razón, cuando estás a mi lado nada más importa.

MinGi dejó caer un beso en la frente del bajito y los arropó con la sábana. El invierno estaba llegando a cortos pasitos de bebé y el frío comenzaba a hacerse notar en todo el país, así que lo mejor era mantenerse abrigados.

-Igual quiero largarme de aquí, no soporto que te miren. Me irrita.

HongJoong estaba en total acuerdo con eso, él tampoco soportaba que mirasen a su hombre.

-Coincido con eso-

El celular de MinGi comenzó a sonar, haciendo que HongJoong hiciera un pucherito al verse interrumpido. Sin embargo, MinGi rió y se estiró para atender la llamada. Ese tono característico era de JongHo, y no quería dejar ignorado a su primo.

-¿Alo?

-¡SONG MINGI, MENOS MAL QUE ATIENDES!

-¡Eh! Yo también te extraño, JongHo, pero no hace falta que me grites. ¿Qué pasa?

-¡YunHo y WooYoung no salen de la casa! Estoy harto, ¿podrías decirle a San que los saque?

-¿WooYoung y YunHo...? Espera, ¿estás en tu habitación?

-Obvio, ni modo que me fuera a quedar ahí en la sala con esos dos y San, pero llevan ahí toda la tarde, ¡mira la hora! Casi son las siete, ¡no los quiero aquí!

-Oye, Jonggie, no es que me quiera meter en el asunto, pero en unos días se acercan las vacaciones de final de otoño, ¿por qué no vienes aquí con nosotros? - MinGi le sonrió a HongJoong ante la idea que proporcionaba.

-¿En serio? ¿No les molesta?

-Claro que no, JongHo, anda, ¡puedes venir cuando quieras a visitarnos y quedarte si así quieres!

-¡Gracias, primo! ¡Gracias, HongJoong!