~Las Diez En Punto~

25

Mi corazón se paró por unos momentos cuando me levanté rápidamente y miré al suelo avergonzado.

A: Yo...

J: Cuanto tiempo llevas aquí?

A: emm unos ¿Quince minutos?

J: Que se supone que hacías?

A: Pues no se yo solo... te vi entrar y vi que dejaste flores aquí y pues...- intentaba excusarme

Josh me apartó con una mano y se agacho para ver la lápida.
Paso su mano lentamente por encima de esta y luego de levantó de nuevo.

J: Ven- dijo y se dirigió a la salida del cementerio

Yo lo seguí sin saber muy bien donde íbamos.

Salimos del cementerio y me llevó por un callejón.
Me había olvidado que mi bicicleta estaba en la puerta del cementerio pero ya era demasiado tarde.
Mi atención estaba puesta en Josh y en el camino por el que me habia llevado.

El callejón parecía no tener salida hasta que una pequeña luz blanca proveniente de una farola iluminaba lo que parecía ser el final de este.

Al llegar había como una carretera y un muro.
Al lado habia unas escaleras abajo y Josh bajó por allí sin pensarlo y yo fuy atrás suya.

Se escuchaban el ruido de las olas del mar cada vez más cerca.
El olor a salitre se hacia más intenso.
Hasta que llege al final de las escaleras poniendo los pies en la arena.

Me habia traído a la playa.

La playa de noche se veía muy solitaria puesto que por la mañana siempre estaba llena de gente.

Pero era relajante solo escuchar el ruido de las olas chocar mientras los faroles dan esa pequeña luz tenue para no quedar a oscuras del todo.

Yo cerré los ojos y me relaje escuchando el mar y respirando el aire puro.

Parecia como si fuera la primera vez que voy a la playa.

Lo cierto es que todas las veces que fuy fueron con Avani pero como siempre estaba a abarrotada de gente.

Era agradable presenciar el lugar así, sin gente gritando sin niños llorando y levantando tierra o sin el fuerte olor a sardinas de los chiringuitos.

Mientras tenia los ojos cerrados escuche como algo caía a mi lado haciendo que abriera los ojos de inmediato.

Josh habia dejado caer su mochila en la arena, mientras él se quitaba la ropa.

Yo me quede espectante sin saber muy bien que intenciones traía.

Cuando ya solo le quedaron los boxers se me quedó mirando.

J: No te bañas?

A: A-ahora?

J: Claro ¿Cuando si no?

A: Hace frío y además no traigo bañador...

J: Ves que yo traiga bañador? Ademas a estas horas es cuando el agua se pone mas buena vamos!- dijo corriendo hacia la orilla

Yo sin más rodeos comencé a quitarme la ropa hasta quedarme en boxers al igual que Josh.

Luego me quede mirando unos segundos como él se introducia en el agua sin impedimento alguno.

Sumergió la cabeza y la volvió a sacar cuando se dio la vuelta y me miró a mí que aun nisiquiera me había acercado a la orilla haciéndome un gesto con la mano para que me metiera.

Me acerqué lentamente a la orilla dejando que la marea mojara mis pies.

Estaba helada.

Iba a hecharme atrás cuando vi a Josh pasándoselo tan bien dentro del agua igualito que un niño pequeño.